48. Encerrada

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ALBA POV

Ya habían pasado 2 meses desde que vi a Natalia, había conseguido sacarla de mi cabeza poco a poco, pienso que estoy perdiendo el tiempo, no voy a intentar querer algo que no es correspondido evidentemente.

Había perdonado a Álex, él después de todo no sabe lo que pasé en Madrid ni mucho menos, tampoco se lo voy a contar, no estábamos saliendo no me sentía preparada para ello pero hacíamos muchas cosas juntos.

Me presentó a varias amigas suyas, creo recordar que se llamaban Noelia y Ana, eran muy majas y les encantaba cantar, íbamos a cantar a karaokes muchas noches.

Cada vez me sentía más libre, tenía que empezar a dejar mi pasado como lo que es, pasado.
Hablaba con María más habitualmente y me había invitado a ir a Madrid a pasar unos días, yo acepté aunque me daba miedo, me iría en un par de semanas y tenía ganas para que mentir.

NATALIA POV

Hoy era uno de los pocos días que podía dormir hasta la hora de comer, no tenía obligaciones de nada, alguien llamó a mi puerta.
-¿¡Qué pasa?!- gruño bajo las sábanas.
-Natalia tienes una visita- dijo mi segurata Manu, me habían asignado uno propio por mis instintos de escapar, ahora ya no lo hacía.
-¿¡Qué?!- respondí alterada, Manu abrió la puerta y me miró.
-Que alguien quiere verte, en 10 min te llevo- dijo cerrando la puerta.

Se me pasaban un montón de nombres por la cabeza, nunca había ido a esa sala, no sé a quien quería ver la verdad, la verdad es que a nadie.

Me cambié de ropa y me puse la bata gris tan característica nuestra y salí con Manu.
-esto no suele pasar- me explica Manu mientras bajamos las escaleras- nadie viene a hablar con nadie, normalmente vaya...
-no ayudas ¿sabes?- dije dándole en el hombro.

Llegamos a la sala, estaba en una puerta bastante apartada, entré y era como en las cárceles, había un cristal y otra sala en el otro lado, había un micrófono encima de la mesa.
-siéntate anda- dijo Manu señalando la silla.
Me senté observando la sala, me temo que no quiero volver aquí.
-¡Podéis abrir!- dijo Manu, sonó un fuerte ruido proveniente del otro lado entró alguien por la puerta.
-No, ¡Manu! Me quiero ir, no quiero estar aquí- dije levantando de la silla.
-Hola Natalia- dijo Miki acercándose al micrófono.
-¡Manu joder!- gritaba desesperada, no quería ni verle, ese cabrón me había encerrado aquí sin un ápice de sentimiento, no le quiero dar ni un minuto de mi vida más.
-¿Natalia te puedes sentar?- preguntó serio Miki, me dirijo al micrófono de mi mesa y hablo.
-¿a que coño vienes? ¿A reírte de mí?- pregunté muy enfadada.
-veo que nada a cambiado, 2 meses y nada- se frotó la frente.
- 2 meses y nada...- dije irónica- escúchame, no tienes ni puta idea de lo que es vivir aquí, no te quiero ver me oyes ¡Qué te vayas a la mi-er-da!
-Así no vas a salir nunca- hablaba en un tono demasiado tranquilo.
-¿Para que quiero salir? ¿Eh? ¡No tengo nada fuera Miki! ¡Nada!- grité golpeando la mesa.
-¿Alba es nada también?- preguntó, se me cambió la cara automáticamente, me senté en la silla.
-que pasa con Alba...¿Está bien?- pregunté preocupada.
-está en Elche trabajando de ilustradora, por lo que sé le va bastante bien-
-¿y ya está?- suspiré- para que has venido Miki, escupe.
-dije que te sacaría a los dos meses, pero viéndote de nuevo, no creo que lo haga- se levantó de la silla.
-muy bien, eso es, me tiras como un peluche de trapo que estorba, te ríes en mi puta cara y ¿todavía quieres que te considere un amigo? Te has caído tan bajo Miki, que prefiero morir encerrada a que me saques y estar contigo- escupí contra el cristal- ¡Manu sácame de aquí!
-Es una pena Natalia, es una pena- dijo mientras se iba por la otra puerta.

No sé cuánto duró la conversación pero salí al patio, necesitaba el aire fresco.
Me senté en un bordillo llevando mis rodillas al pecho y empecé a llorar de impotencia, me daba tanta rabia no poder explicar lo que siento, me siento un trapo viejo, algo que puedes olvidar y que no importa, echo de menos tantas cosas...alguien me tocó el hombro.
-¡Hola agente N!- dijo Julia sentándose a mi lado- ¿Estás bien?
-no tengo humor Julia, lo siento...- dije levantando mi cabeza y mirándola, ella con delicadeza quitó mis lágrimas con sus pulgares.
- sabes que me lo puedes contar todo ¿no?- me abrazó fuerte- somos amigas ¿no?
-eres una hermana para mí, ya lo sabes...- las lágrimas seguían cayendo por mis mejillas.

-¿me lo quieres contar?-
-me ha venido a visitar una persona que me ha hecho mucho daño, una persona que consideraba una amiga- suspiré- no voy a salir de aquí nunca Julia...
-¿eso te pone triste?- me levantó la cabeza para que la mirase.
-no, me pone triste pensar que una persona que quiero mucho se haya olvidado de mí...- empecé a llorar de nuevo, pero esta vez Julia apartó mis rodillas y se sentó abrazándome por el pecho.
-yo también tengo miedo a muchas cosas, pero cuando me acuerdo de tí se me pasa, te quiero mucho agente N, ya verás como se soluciona todo- dijo a mi oído.
-yo también te quiero agente J.

ALBA POV

Me tiré toda la tarde haciendo trabajos para el estudio, tenía un montón de retraso en viñetas, y andaba escasa de inspiración.
-Alba, ¿Puedo pasar?- preguntó mi hermana.
-Claro, pasa pasa- abrió la puerta y se apoyó en la pared mirándome.
-¿Todo bien?- pregunté sin mirarla, seguía dibujando.
-si, me aburría abajo, venía a verte solamente, eres una artista...
-ten cuidado no te des con el techo de tanto peloteo- dije riéndome.
-¿Nada?- preguntó está vez.
-¿Nada de..?-
-¿Nada de Natalia?- preguntó, me giré para mirarla y suspiré.

-Nada de nada, estoy haciendo un esfuerzo por olvidarla ¿sabes?- dije algo dolida- y que mamá y tú preguntéis cada semana si sé algo no ayuda...
-Perdona Alba...yo...no se..-
-¿Que piensas?-
-lo veo todo muy extraño ¿sabes? Ya nos contastes que estaba mal pero, no sabes nada de ella en 2 meses....
-Es raro, pero es lo que ha decido, yo la llamo y no coge llamadas, llamo a Miki y se ve que ha cambiado de teléfono..- me senté en la cama para hablar más cómodamente.
-¿qué es lo último que sabes de ellos?- se sentó conmigo en la cama.
- Miki nos dijo que se iría con ella a Barcelona en avión esa misma tarde, que la ayudaría eso de cambiar de aire...- suspiré.
-¿Natalia no dijo nada?-
-Nunca me despedí de ella...la última vez que hablé con ella fue al abrir la puerta del baño de ese dichoso hotel Marina...
-¿ y no es raro que no te dijera nada, ni un beso ni nada..?- me tocó el brazo.

-es raro de narices, pero ya sabes lo impredecible que es Natalia, se le da muy bien hacer daño...- me tumbé en la cama- ¿Tú crees que se fue a Barcelona?
-yo solo creo que no es lo que parece, además ¿Por qué Miki de cambiaría de teléfono sin darte el nuevo..? huele a gato encerrado y no es Queen Alba...
- tal vez tengas razón... dentro de nada voy a Madrid con María, si surge hablaré con ella.

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HOLI!!! Espero que la novela no sé esté haciendo pesada, tengo pensada la idea del final, pero lo que pasará antes no se cuanto voy a tardar en escribirlo ni cuántos capítulos me ocupará, de verdad que sí se está volviendo aburrida la novela corto por lo sano, tengo 10 capítulos escritos más, es decir, 5 días más de novela, no sé hasta donde quiero que llegue...
Qué preferís:
¿Algo más corto o que siga con detalles hasta el final?
Yo prefiero detalles pero si os aburre paro
Os quiero!! ♥🤘

Despacio // AlbaliaWhere stories live. Discover now