Relatos de una letrista. [Wheesa]

Calma

El apartamento estaba tranquilo luego de su limpieza mensual, Wheein no podía sentirse más satisfecha. El piso de la cocina ya no estaba lleno de papel, había arreglado el problema de la ducha y su casa al fin era esa visión de la biblioteca de Alejandría que tanto había deseado.

El cuerpo de Wheein necesitaba descanso, ordenar y limpiar le llevó todo el día. Así que se echó sobre su sillón, se quitó los zapatos, estiró las piernas y respiró profundo antes de entregarse al sueño.

Sentía que estaba a punto de dormirse cuando alguien tocó su puerta.

—¿Es que nadie siente algo de respeto o empatía por una persona agotada? —Sus palabras brotaron desde el fondo de su alma mientras se levantaba a regañadientes, para lavarse la cara y luego ir a abrir la puerta con un mejor semblante.

*Toc*Toc*Toc*

—¡Ya voy! — Se quejó y abrió la puerta sin siquiera revisar.

—¡Wheein!

Esa no se la esperaba, Hani estaba otra vez frente a ella, sólo que sin maquillarse y con un atuendo de deporte que a decir verdad, se le veía muy bien.

—¿Necesitas el baño? —Preguntó, porque fue lo primero que se le vino a la cabeza luego de "Dioses, ella es realmente sexy".

Hani le sonrió algo nerviosa, se arregló el flequillo y negó con la cabeza.

—No, no. Es que estaba corriendo y recordé que tenía que hablar hoy contigo — Wheein podía estar segura de que para Hani era imposible no sonreír como un ángel— ¿Wheein? ¿Estás escuchándome? Te ves algo distraída... Y adormilada ¿Te sientes bien?

—Excelente —Respondió Wheein con una sonrisa cansada —Ven, pasa ¿Qué ibas a decirme?

Hani pasó al Living, impresionada por el orden del apartamento.

—Esto... Wow, ya sé por qué te ves tan cansada ¿Acabas de terminar esto? —Hani rió maravillada mientras se sentaba— Es genial poder encontrar un asiento sin tener que nadar entre libros, partituras y hojas sueltas

Wheein se sentó y puso su cabeza justo en el hombro de Hani antes de cerrar sus ojos.

—Es genial... —Dijo— Hmmm, cambiaste de perfume

Hani estaba completamente sonrojada, agradeció que los ojos de Wheein estuvieran cerrados.

—Yo... Sí —Se aclaró la garganta y siguió —Conociste a mi hermana y su familia el otro día y... ¿Me ayudarías a cuidar a mis sobrinas este jueves? Es que yo no sé nada de niños pequeños y ... Necesito ayuda con esto ¿Sabes? Ellas tienen que resolver un tema con los papeles de la casa anterior, deben ir las dos y no tienen con quién dejar a las niñas

Hani respiró profundo y Wheein se acurrucó un poco más en su hombro.

—Pero con una condición —Dijo— Dejas que te abrace mientras duermo y me acaricias el cabello o no hay trato

Hani rió suavemente mientras se recostaba en el sillón y dejaba que Wheein se acomodara sobre ella, con la cabeza en su pecho.

—Incluso podría besarte si me lo pidieras —Dijo sin pensar— E-En la mejilla, claro. Aunque no estoy asumiendo que me pidas que te bese en los labios o algo, cosa que tampoco me molestaría es sólo que yo-

—Hani —Dijo —No siento que estés acariciando mi cabello, necesita ser acariciado

Observó el cabello de Wheein un par de segundos y comenzó a acariciarlo suavemente con sus dedos.

—¿Entonces es un sí?

—Entonces es un sí

~~~

—¿Crees que sea una mala idea llamar a... Tú sabes

Hwasa estaba nerviosa, a penas se había enterado de que Solar era otra vez amiga de Wheein y que Wheein en realidad nunca tuvo nada con MoonByul.

La extrañaba, sólo Dios sabe cómo la extrañaba. Ahora que no tenía razones para enojarse con ella, necesitaba verla, escuchar su voz, oír su estruendosa y tierna risa de bebé. Pero no podía dejarse en evidencia con Solar y menos con MoonByul al respecto, así que fingía que no le importaba.

Pasó un tiempo pensando en cómo hablarle de nuevo, esa pelea se reproducía una y otra vez en su cabeza y se preguntaba "¿Cómo se supone que voy a ver su cara de cachorrito con el corazón roto y le voy a pedir disculpas?".

—¿Llamar a Wheein? Sólo tienes que hacerlo, veo en tu cara que deseas con locura oír su voz — Solar hablaba mientras leía su libreto.

Hwasa vio a su amiga fingiendo estar irritada y Solar a su vez, bajó el libreto y le sonrió.

—Hwasa ¿Alguna vez pensaste en que quizá sientes esa ira y frustración hacia Wheein porque te gusta?

Hwasa sintió que se había quedado sin aire, sin palabras; realmente nunca había considerado esa posibilidad, porque hey, ella era una hembra heterosexual, nunca tuvo una idea distinta de esa. El póster tamaño real de Ricky Martin junto a su espejo, lo acreditaba.

—No me gustan las mujeres —Terminó respondiendo con un tono de extrañeza bastante auténtico.

—No digo que te gusten las mujeres, digo que es probable que te guste Wheein. Esas son dos cosas diferentes, estamos en el siglo 21, deberías saberlo

Tenía razón, lo sabía muy bien pero no quería dar paso a esos pensamientos.

—No

—No qué

—No me gusta Wheein, Solar. Es mi amiga y ya sabes, las amigas no se comen

"Creo que Wheein no piensa lo mismo" Se dijo Solar mentalmente, el pensamiento la hizo reír.

—¿Qué es tan gracioso?

—Que Wheein no tiene la misma filosofía de vida que tú, Hwasa. No es tan cuadrada —Solar tomó aire y se levantó del sofá para ir a la cocina —Quizá me estoy confundiendo y no te gusta, pero va a llegar alguien a quién sí le gustará Wheein, hará todo lo posible para pasar la mayor parte del tiempo posible con ella, la hará reír, la escuchará y cuando eso pase, nosotras tres seremos tercer plano

Hwasa sintió un vacío en el estómago en cuanto Solar desapareció de su vista, porque sabía que su amiga tenía razón. Wheein encontraría a alguien y cuando eso pasara, ya no podría escuchar su risa de bebé y ver su hermosa sonrisa sabiendo que toda esa alegría era causa suya.

Rezaba a Dios para que eso no pasara.