Cinco Minutos Gloriosos

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Hwasa corrió por los pasillos del hospital, no tenía la menor idea de el área donde podría estar Wheein y el edificio era enorme.

No pasó demasiado tiempo antes de que las personas se dieran cuenta de su presencia, mucha gente se comenzó a juntar alrededor de ella, muchas personas decían su nombre en voz alta tratando de captar su atención y de pronto ¡bam! La transmisión de su rueda de prensa comenzó en la sala de espera del hospital, lo que significaba que probablemente estaba el mismo canal dando las noticias de la tarde en todo el hospital.

Solo le quedaba correr y tratar de ubicarse con los carteles, se deslizaba por los corredores cuando lo escuchó. Fuerte en los pasillos del hospital logró oír su propia voz de fondo diciendo "amo a Wheein Jung".

Eso era todo, no se detuvo a escuchar a la fanaticada que la observaba y la seguía curiosa en ese enorme hospital. Simplemente corrió y corrió hasta que vio a dos guardas a la entrada de un pasillo normal, pensó en pedirles indicaciones cuando uno se quitó el sombrero y con una expresión de padre orgulloso, habló.

—Es la 1012, al fondo a la izquierda, junto al cactus que parece tener pechos

Hwasa le agradeció y se movió rápido hacia el fondo del pasillo, observando los números de las puertas hasta que llegó a la 1012. Al parecer el guardia no sólo tenía razón,  sino que había sido realmente discreto para describir al cactus. Que en realidad parecía ser una real estatua de una mujer con ambos brazos hacia arriba, como alcanzando las estrellas.

El pensamiento la distrajo, primero río y luego se enfocó otra vez en el desteñido número de la blanca puerta.

—Bueno cactus, llegó el momento de confesarme —La planta parecía darle ánimos.

Hwasa tocó la manija de la puerta, se escuchaba una distorsionada melodía, parecida a una discusión.

Hwasa abrió la puerta.

—Solar ¡Tu blusa, la quiero! —Esa era la voz de Wheein.

— Maldita sea ¿por qué soy tan mala en estos juegos? —Solar, definitivamente.

—No es que seas mala, amor. Es que hasta el mismo flujo universal de la suerte quiere verte sin blusa —¿De qué demonios hablaba Moonbyul?

Hwasa terminó de abrir la puerta cuando vio a Solar literalmente en ropa interior y a Moonbyul sin pantalones, ambas jugando a las cartas con Wheein, quién permanecía vestida.

—Chicas... Wheein ¿qué haces con los pantalones de Moonbyul en los hombros?

—Tenía frío en el cuello y los pantalones de Moonbyul se veían cómodos así que se los gané y ahora son mi bufanda

Wheein parecía tranquila, cosa que le dolió un poco. Hwasa miró disimuladamente la televisión, estaba apagada.

—Ehm... Yo...

Wheein lanzó lejos las cartasy comenzó a levantarse de la camilla (con dificultad).

—¡NO LOGRO RESISTIRLO! —gritó —Hwasa ¡Ven aquí! ¡Ven conmigo!

Demoró un poco más de lo esperado en entender el mensaje. Pero cuando lo logró, sus brazos ya rodeaban a Wheein. Una Wheein algo más delgada, algo más pálida, con unas notorias raíces y cosas que parecían ser pequeñas cicatrices en sus brazos y su rostro. Pero eran pequeñas, nada que no luciera como que iba a sanar, Hwasa se tranquilizó.

—Extrañaba tu olor —Wheein prácticamente le estaba olfateando el cuello mientras la abrazaba fuerte —Y tu voz y tu cabello que no parece querer quedarse en un solo color... También tus brazos y tus piernas y tu torso de súper estrella

Hwasa sonrió y trató de hacer lo mismo con Wheein sin apretujarla demasiado.

—Te amo

—Yo también te amo

Ambas tenían miedo de soltarse, hacía tanto tiempo que no se sentían tan cerca una de la otra, que necesitaban ese momento. Lo necesitaban para reconocerse dentro de la otra, que los recuerdos del pasado se reconciliaran con la realidad del ahora.

Era un reencuentro con sabor a reconciliación.

—Wheein yo-

—Me mentiste, Hwasa

—Yo no dije nada, me parece que asumiste lo mismo que todos aunque no fuese real

El abrazo se empezó a soltar de a poco, pronto Wheein puso sus manos en los hombros de Hwasa y Hwasa descansaba las suyas en la cintura de Wheein.

—¿Por qué no quisiste decírmelo?

—Yo... Me siento amenazada en exceso con... Bueno tú sabes, además esto es nuevo para mi. Tengo problemas ahora, los tendré durante mucho tiempo más y estoy realmente nerviosa en este momen-

Wheein se lanzó a los labios de Hwasa quien en acto reflejo le respondió el beso.

—Wow, no sabía que podía hacer esto sobria... Es un avance —Hwasa sonrió y ambas volvieron a besarse.

Mientras tanto, Solar y Moonbyul grababan.

—¿Lo tienes, bebé?

—Sí que sí, chiquistrikis

—Moonbyul, esto será un lindo regalo de bodas



Relatos de una letrista. [Wheesa]Where stories live. Discover now