XXXII

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Capítulo treinta y dos.

Múltiples latidos se escuchaban a la vez, algunos coordinados, otros lentos y  apagándose o acelerados. Elyah podía matarnos a todos de no ser porque Cloe le hizo frente con sus habilidades. Inaham acabó con el poco afecto que ella podía tenerle.

–Dijiste que él no iba a morir...– susurra con un hilo de voz.

Inaham se levanta del suelo ya que cayó cuando Elyah usó su poder en todos.

–Lo mataste...– vuelve a susurra Elyah.

Inaham se acerca a ella a pone sus manos en los hombros de ella y niega –Querida, no había lugar en su corazón para ti– dice con seriedad.

–En otra vida, nosotros seremos felices, tu no seras nadie porque ese es tu destino, no eres nadie, tu poder es nulo, tus hombres no te son fieles y las personas que amas te dieron la espalda. Créeme, Inaham, en otra vida seremos libres de ti y de tu locura, en otra vida aprenderemos a amar... porque esta vida ya esta intoxicada por ti. 

–Elyah, solo estas dolida– espeta Inaham.

–No, solo soy sincera. No tienes poder, no tienes familia ni el amor de tus hijas, y la vida de tus hombres depende de mí... Por eso puedes intentar seguir con esto sin Mika y sin mí... porque sin nosotras no lograras nada.

Elyah deja a todos en silencio por sus palabras, incluso a Inaham. Sin duda, el ruso no se esperaba que fuera ella quien le diera la espalda cuando todos llegáramos, pero lo hizo. Elyah se aleja de Inaham y se acerca a mí.

–Gracias por confiar en mi, Haylee– dice con calma. 

–Elyah... no lo hagas– ruega Cloe.

Ambas se observan fijamente en silencio.

Elyah dirige su mirada a cada uno de nosotros y termina por sonreír –Una vida a cambio de muchas– dice como respuesta a la petición de Cloe. 

No entiendo a que se refiere hasta que la veo correr, como si fuera directo su felicidad, a la libertad, como si lo espera desde hace años. Todos se abren paso y  ella llega al borde para luego saltar y caer...

La libertad es algo relativo, cosas que dependen de la visión del mundo y de las circunstancias. Elyah siempre tuvo la libertad de ir por el mundo, de conocer la realidad del mundo pero nunca pudo tomar sus propias decisiones, no pudo vivir el amor... Siempre atada a Inaham... Su libertad estaba en la muerte. 

Unos segundos despues de que Elyah caiga, los hombres de Inaham comienzan a agonizar de dolor y  a caer muertos. Algunos se mantienen quietos sin que nada les ocurra y corren para ayudar a sus amigos.

–Que ocurre?– pregunto al ver la escena.

–Elyah tenia su alma atada a gran parte del ejercito de Inaham de tal forma que todos mueran si ella muere– explica Cloe.

El numero de hombres de Inaham se reduce visiblemente pero aun quedan varios con vida. En nuestro caso, los hombres de Alessia son menos que antes y los de Halek apenas sufrieron bajas. Caitlyn, Cloe, Jeremiah y Lieven siguen con vida, también Melissa y  Katrina junto a su padre, Alessia y Demetre tienen heridas pero nada demasiado fuerte, los trillizos perdieron a uno.

–Debemos seguir peleando– sugiere Jeremiah.

Un rubio muy parecido a Melissa llega  hasta nosotros y le dice algo en un idioma raro a Halek. El ruso observa a sus hijas y puedo notar que ellas también comprendieron.

–Hay ácido en las tuberías, planean explotar el edificio y que tomos nos rociemos de ácido– informa Melissa con miedo en sus ojos.

Nunca había visto a Halek, Kate o Melissa con miedo pero ahora los tres lucen nerviosos y con miedo.

MortalWhere stories live. Discover now