♡《Fin》♡

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A los pocos minutos de Matilda confesar que había sido ella quien cometió el crimen, en esa delegación todo fue un caos. Sánchez envió a encerrar a todos en espera de los resultados de las pruebas.

Dulce negaba y lloraba a la vez reprochándole a Matilda, mientras Christopher intentaba tranquilizarlas a ambas.

Sánchez reposaba iracundo sobre su escritorio con una mano repasando su frente por el gran dolor de cabeza que le causó lo ocurrido. Se encontraba en espera de las pruebas.

Sirvió algo de beber y encendió un cigarro mientras esperaba. Odiaba a Christopher por creerlo un maldito desagradecido al pagarle con tal traición a su padrino.

A los pocos minutos unos toques tímidos en la puerta lo hicieron prestar atención.

-¡Adelante! -ordenó sin retirar los dedos de su entrecejo.

-Tengo los resultados de las pruebas -el hombre encargado de criminalistica colocó una carpeta sobre el escritorio.

Sánchez la tomó y empezó a leer con cautela, mientras el hombre hablaba.

-Las huellas encontradas en el arma homicida no coinciden con las de Dulce Espinosa ni el doctor Christopher... Coinciden con las de Matilda Rivera... Además en el cuerpo de Enrique se hallaron otras huellas y pequeños rasguños.

Sánchez respiraba con dificultad por la impotencia que sentía. Matilda ¿Por qué la insignificante empleada? No. Le tenía que hacer justicia a su amigo como sea. No permitiría que quedaran libres e hicieran de las suyas.

-¡Ni una palabra de esto a nadie! Esto no me sirve-.tomó los documentos y los rompió en pequeños trozos.

El oficial abrió la boca de sorpresa al ver aquel acto, pero no dijo nada.

-Ya puedes retirarte, tengo que salir y todos los detenidos permanecen aquí hasta nueva orden. Recuerda que esto se queda entre nosotros.

El hombre asintió y salió pero no permitiría que Sánchez siguiera jugando sucio, no con ellos, no con Christopher a quien conocía muy bien, por ser el doctor del pueblo. Cuando Sánchez salió del lugar sonrío había denunciado a la oficina de la Policía Nacional y esperaba refuerzos de ellos para tal caso, para que se encargaran de Sánchez que era la actual sombra de esa delegación y se pudiera hacer el ejercicio de la profesión como es debido.

•••

Violeta caminó junto con el pequeño Gabriel hasta la delegación, quería denunciar todo lo que pasó esa noche y no permitiría que se quedara impune, mucho menos que culparan a su hermana por un delito que no había cometido.

Temblando se dirigió al vigilante quien dio aviso a las autoridades pertinentes mientras no estaba Sánchez.

Le prestaron atención mientras ella hablaba y casi no se le entendía nada, le tomaron algunas muestras de las uñas de donde al parecer salieron los rasguños propagados a Enrique. Luego la sacaron a ella junto con el niño para brindarles protección antes de que llegara Sánchez, ellos iban a declarar, pero no frente a ese corrupto.

•••

Dos días después todo marchaba exactamente igual. No habían realizado la ruta necesaria para aclarar los hechos, no habían abogados, declaración ni juicio hasta que la luz de esperanza llegó con tres delegados de la corte suprema de justicia, al evaluar las evidencias enviadas sobre el mal manejo de la autoridad en aquel municipio.

Aunque Sánchez amenazó a varios funcionarios del lugar, no le tuvieron miedo, era la oportunidad de acabar con el mandato de ese aprovechado, sin él ni Enrique se veía venir un buen futuro para todos los empleados de aquella delegación.

Me Declaro Culpable ©Where stories live. Discover now