El rival de Jellal

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Dos semanas pasaron desde las elecciones para presidente , ya todos estaba relativamente normal.Mirajane fue la que lloro desconsoladamente tres días después de las elecciones confensando que estaba feliz de que Erza estaba con ellos, Laxus toco consolarla, situación que no lo molestaba. Todos ocuparon nuevamente sus puestos, Ren asistía a unas cuantas reuniones del consejo.

Como todas las mañanas Erza estaba con el consejo en la entrada del instituto para observar quienes cumplían las reglas de uniforme. Observaba como los estudiantes pasaban con un uniforme impecable.

Todos temían a los castigos de Erza. Natsu, Gray y Gajeel eran los únicos que se atrevían a enfrentar al demonio escarlata. Ese día no fue excepción, llegaron con las camisas por fuera del pantalón, los tres botones abiertos y las corbatas en el bolsillo, en el caso de Natsu tenían su inseparable bufanda rodeada en su cabeza.

-¡Ustedes!-Llamo con autoridad Erza, asustando a los estudiantes de paso-Su vestimenta no es la adecuada.

-No queríamos llegar tarde-Aclaro Gray regalándole una pequeña sonrisa.

Sonrisa que no tuvo efecto en Erza-Saben cuál es su castigo, ¿cierto?

-¡Pero si ayer dimos más de veinte vuelta en el patio!-Refunfuño Natsu.

-No pasaría si obedecieran-Anuncio-Ahora se irán con Mirajane a donde correrán.

Mirajane le regalo una pequeña sonrisa, Gray recibió un tratado especial de Mirajane, la albina le saco la lengua para empezar a caminar. Erza soltó un suspiro apenas se alejaron del lugar.

-Tan responsable como siempre-Susurro alguien, Erza ladeo su cabeza encontrándose con la brillante sonrisa de Simón-Buen día, Erza

-Simón, buenos días.

-Tu trabajo como presidenta es el mejor-Comento observando como entraban los últimos estudiantes.

-Trato de hacerlo lo que está a mi alcance-Anuncio con una pequeña sonrisa. Jellal observo con el ceño fruncido como Simón se acercaba a Erza, de manera cautelosa se acercó a ellos.

-Erza, yo quería-Comenzó murmurar-Yo pienso que tú, quizás-Jellal previa lo que preguntaría, estaba por intervenir pero Erza hablo.

-¿Qué paso Simón?

Simón soltó un suspiro se inclinó un poco-¡Por favor Erza, ten una cita conmigo!

Eso no le agrado a Jellal. Los alumnos del instituto Fairy Tail, creían que Erza y Jellal tienen una relación no formalizada .Por ende las confesiones se disminuyeron, apenas ellos comenzaron a formar parte del consejo estudiantil.

Los rumores comenzaron en sus primeros días conformando el consejo estudiantil, sin embargó eso no evita el club de fangirl que tenía Jellal, lo admiraban desde una distancia prudencial nadie quería sufrir el castigo de la Titania.

Pero Simón no conocía su relación-no-oficial, o simplemente ignoraba lo que todos ya conocían, Erza y Jellal estaban juntos.

Las mejillas se le tiñeron, sus manos comenzaron a tener un leve temblor, Simón se levantó lentamente encontrándose con el dulce sonrojo de Erza.

-Yo......-Callo unos momentos, Erza pensó que rechazarlo sería descortés ya que el chico tomó valor para invitarla-Me encantaría, Simón-Le regalo una pequeña sonrisa.

"Es una pequeña salida de amigo, nada malo ha de pasar, ¿no?" Pensaba Erza

Jellal quedo estático con la respuesta de Erza, más sin embargó reacciono al escuchar a Simón decir que la esperaría en la entrada. Ideo rápidamente un plan, necesitaba la ayuda de su amiga. El timbre resonó indicando que estaba por empezar las clases se alejó del lugar con dirección a su salón.

Realmente no somos hermanos comunes.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora