UNA FUERTE UKEADA 🌌 MiloxCamus

Capítulo 1

Narra Milo.

Bueno, Como debería empezar, claro desde un principio pero no es tan fácil como recordar esos días en donde casi perdí lo más importante en mi vida, mi amor, pensar que es tan fácil jugar con los sentimientos de las personas, pero a la vez es tan difícil volver a arreglarlos, tratar de reparar el daño que has hecho, la verdad no lo sé, sonara ridículo todo lo que estoy diciendo pero es nada más que la verdad ustedes mismos son los que se encargaran de juzgar, si todo lo que hice está bien o mal porque aunque no lo crean ¡Ja!, aun no puedo procesar todo lo que ha pasado, pero es mejor empezar ¿No lo creen?

Era una mañana como cualquiera en el santuario, las guerras que habían antes se habían detenido, los dioses malvados estaban sellados, era tiempos de paz para la humanidad pero en las 12 casas es muy diferente, cada caballero tiene su diferente forma de divertirse, de distraer su mente de diferentes formas, la mía era lo más fácil, entrenar, recorrer todo el santuario, comer manzanas pero la más importante pasar todo el tiempo a su lado, mi amado francés, el guardián de la onceava casa, Camus.

Realmente él y yo somos polos muy opuestos pero los polos opuestos se atraen aún más.

Narración normal.

Había llegado la tarde, todos habían terminado su entrenamiento hasta que el viejo maestro había dado la idea de ir a la inauguración de un nuevo bar que quedaba en las afueras del pueblo.

Bueno ¿Quién se apunta para salir esta noche? -pregunto el caballero de Libra mientras estiraba un poco sus brazos al aire.

- ¿Salir? ¿Acaso hay alguna misión? -pregunto de manera curiosa el caballero de Aries dirigiendo su mirada a él.

-Vamos, ¿Es enserio, solo ustedes piensan en peleas, misiones? -pregunto Dohko mientras se cruzaba de brazos y sonreía -. Definitivamente están peor que yo, ustedes son jóvenes y solo piensan esas cosas, ¿Cuándo fue la última vez que salieron a tomar un par de copas o alguna fiesta?

Todos los caballeros se quedaron en silencio mientras que algunos se miraban entre sí, otros solo se quedaban mirando al caballero de libra pues estaba en lo cierto, fueron entrenados con el fin de proteger a Athena un solo descuido y ya había un caos, era muy rara la ves que todos los dorados se reunieran para una fiesta o pasar el rato.

Dohko al notar que nadie le hablaba o respondía sus preguntas este rompió a carcajadas llamando la atención de todos.

-Realmente esto es muy gracioso pero molesto a la vez, es por eso que no lo preguntare, esta noche todos absolutamente todos iremos a ese lugar.

-Realmente no me llama mucho la atención así que solo vayan ustedes -exclamo el caballero de Acuario con un tono de voz seria mientras que terminaba de colocar las vendas en su brazo izquierdo.

-Vamos Camus no seas un aguafiestas, la idea es ir todos hasta Shaka ira.

-Iré porque no me quedara de otra o Mu iría a mi templo para hacerme cambiar de opinión y es muy molesto cuando interrumpen mi meditación -exclamo el caballero de Virgo mientras estaba sentado sobre un pilar con los ojos cerrados.

-Oye, bueno en parte es verdad -exclamaba Mu en un leve susurro

-Bueno no se diga mas todos iremos esta noche a ese lugar hasta tu Camus, así que no valdrá ninguna excusa.

Pasaron las horas llegando el atardecer en el santuario, era una vista realmente hermosa desde el templo de Acuario, el caballero de Acuario se encontraba en las afueras de su templo contemplando aquella hermosa imagen, hasta que tomado por sorpresa por dos manos que lo rodeaban, un cálido abrazo y un leve beso en su mejilla bastaron para llamar la atención del galo, dirigiendo su mirada hacia un lado reconociendo de manera inmediata a la persona que lo abrazaba.