UNA FUERTE UKEADA 🌌 MiloxCamus

Capitulo 10

Narración normal

Pasaron algunas horas para que Camus y milo llegaran al templo de escorpión pero los problemas no iban a terminar

Narración Camus

Realmente estaba enfadado con milo, no sabia si perdonarlo o no volverle hablar en mi vida, lo que había hecho aun que fuera algo estúpido también te pone a pensar que si aquella persona que amas solo te ve como un objeto para intercambiar, pero realmente me molesto algo mas lo que milo le dijo a saga pero a la vez fue tierno por que el aun así, deseaba protegerme aun que fuera un idiota lo amo y no puedo evitarlo, así que llegue a la conclusión de castigarle de la mejor forma obligándolo a que esta vez fuera yo quien tomara el mando en la cama, es raro saben, conocer a la persona que al final de todo solo el te comprenda y te haga muy feliz en la vida, milo es mi vida, mi mundo, mi ángel

Narración normal

Después de que Camus y milo entraran a templo las cosas se pondrían un poco intensas para ambos caballeros, el galo alzo su mano y empezó a darle una fuerte cachetada al heleno

-ahg !!- soltó un leve quejido el heleno -ya, dije que lo siento aun que si me lo merezco-

-créeme que no solo eso- exclamo el galo

-¿Qué?- exclamo el heleno un poco sorprendido

Sin ser avisado el heleno empezaría a ser atacado por los letales polvos de diamantes, una cruzada de frio y dolor sobre todo las fuertes nalgadas que este le daba

-repite- el galo alzaba su mano brillando observando a su amado de una forma fría y escalofriante -volverás hacer mas apuestas las cuales me involucraran, ALACRÁN-

El heleno había recibido todos los golpes provocando que este cayera al suelo -no- respondió el heleno -no lo vuelvo hacer, pero ya para que mis nalgas no aguantan mas tus nalgadas y mi cuerpo no aguanta mas el frió-

El galo solo lo observo, soltó un leve suspiro y bajo su mano dejando descansar al heleno -bien mas te vale recordar esas palabras por que de lo contrario te ira peor, ahora prepárate para tu castigo-

-castigo?- pregunto el heleno

-si, el que había dicho frente a saga eso será tu castigo-

El heleno solo lo observo para luego soltar una risa burlona cosa que disgusto mucho al galo

-estas bromeando verdad?, eso no va a pasar Camus-

-ah, ósea que yo no puedo y si lo digo es una broma para ti, ósea que aparte de ser un objeto para apuestas soy una broma para ti milo- exclamo el galo con mucho enfado, cruzándose de brazos, lanzándole una mirada fría y seria

-eh..- el heleno dejo de reír con solo observarlo -Camus como se te ocurre dec..-

El heleno fue interrumpido de forma brusca de parte del galo

-y cuando te ofreciste a saga en bandeja de oro y yo no hubiera hecho algo al respeto ya te hubieras metido con el pero ahora que soy yo dices que es una broma, no puedo creerlo milo-

-por athena, como te alteras- respondió el heleno -ya dije que eso no va a pasar Camus, asi que ni lo intentes por que nada de lo que hagas funcionara-

Las palabras de milo eran firmes, Camus solo se quedo pensando, bastaron unos pocos minutos para el pensar en un plan, si no podía de una forma lo intentaría de otra y es sacando su parte dulce y seductora cosa que este caballero solo hacia frente a su amado.

El galo cambio su expresión a una mirada tierna seguida de una sonrisa atrevida, el heleno solo lo observaba

Camus se acerco un poco a milo para acariciar con su mano derecha el pecho de su amado para después poner sus dos manos en el pecho de el y tomarlo de la chaqueta acercándolo un poco a el, dejando que sus labios se rozaran y sus respiraciones chocaran entre si

-¿estas seguro, mi bicho?- pregunto el galo con un tono de voz suave

-mm..c-cubito?-pregunto el heleno un poco dudoso y sorprendido ante la acción de su amado

Sus labios se unieron en un dulce beso, el cual el heleno sedaría poco a poco a los dulces labios de su amado, aquí no terminaría pues e glo tenia un pequeño plan sabia perfectamente que para hacer caer a milo en su tentación tenia que provocarlo y eso hizo, sus manos recorrían todo el pecho de su amado pasándolas poco a poco debajo de su camisa, acariciando el abdomen marcado de su amado, el heleno sentía las acaricias y cada vez las disfrutaba, ambos se separaron por la falta de aire, teniendo un leve sonrojo en sus mejillas, Camus tomo la mano de su amado y lo llevaba a la habitación

Pasaron dos minutos y se podía escuchar perfectamente en la habitación del templo de escorpión varios gemidos pero estos eran diferentes por que no provenían de el galo

-ah....c-Camus para- suplicaba el heleno -mmhg...ahg- soltaba fuertes gemidos ante las fuertes embestidas que su amado provocaba