Por la Moncloa - IRENES

3.- De vuelta a Cataluña

- Ya estoy, siento haberte hecho esperar - dijo la de UP.

- Vamos. El Cabify no debe tardar en llegar - dijo mirando a Irene.

La cara de Montero era un cuadro.

¿Algún problema?

- N-no, ninguno. Venga vámonos.

Irene vio que a su amiga se le iluminaba el rostro, realmente estaba emocionada por la velada de esa noche. Seguro que en Cataluña no podía permitirse un respiro así que se propuso hacerle pasar una de las mejores noches de su vida. Le pareció adorable esa versión de Inés.

- Mira, ahí está - dijo señalando la de C's

Al entrar el conductor les saludó mirando un poco raro a Irene. El resto del trayecto fue silencioso. Inés se dio cuenta de que la de Podemos no parecía estar muy cómoda, intentó darle conversación pero fue un desastre. Por fin llegaron. Ese había sido sin duda uno de los viajes más largos de sus vidas.

Allí ya estaban reunidos los miembros de las principales fuerzas políticas y demás. Una vez dentro se sintieron embriagadas por aquel ambiente tan nuevo para una como para la otra.

- Bueno, ya estamos aquí. Y ahora qué hacemos - dijo la más alta.

- Creo que necesito una copa de vino - dijo la más baja - venga vamos.

- Quieta ahí. Yo me encargo - dijo Irene. Había localizado a Rivera, este estaba en su camino y no quería que interrumpiera su noche con Arrimadas.

La de Podemos se fue a por dos copas. Inés empezaba a sentirse fuera de lugar. Entre tanta gente no encontraba ningún rostro que le fuera de confianza y encima Irene la había dejado allí sola.

Una mano agarró su hombro y la obligó a girarse con fuerza. Extrañada, levantó la mirada para descubrir de quién se trataba: Santiago. Ella no tenía interés alguno en él o en su partido.

- ¿Está usted sola? Si quiere le puedo hacer compañía.

- Lo siento pero está conmigo. Si no le importa irse por donde ha venido. Gracias - dijo Irene desafiante. No parecía aceptar un no por respuesta.

El hombre se marchó resignado e Irene se giró hacia su acompañante:

- Siento mucho haberte dejado aquí sola, me topé con unos compañeros y no paraban de hablar - Irene cogió de la mano a Inés y la llevó al centro de la pista - déjame compensártelo.

La música calmó el ambiente. En el centro, Inés se dejaba llevar por Irene. Muchas parejas bailaban al igual que ellas pero era extraño, solo se sentían la una a la otra, no había nadie más allí. Inés apoyó su cabeza en el pecho de Irene. Por primera vez se sentía en paz, una paz que casi le aterraba que pudiera ser perturbada en cualquier momento. No quería que aquella noche llegara a su fin. Pero todo lo bueno tiene un final.

- Podría pasarme la vida entera así contigo -susurró Irene.

- Nunca habría pensado que acabaríamos así - dijo sonriendo la de C's.

- ¿Tienes sed? Voy a por algo de beber - dijo Irene.

Inés se quedó allí mirándola, destacaba entre todos los allí presentes. De pronto su teléfono empezó a sonar. Fue a una zona apartada para poder escuchar. Era Carrizosa, por el tono de su voz podía entrever que algo no iba bien en Cataluña.

- Se puede saber qué pasa ahora. Estoy en medio de algo importante - dijo la de C's molesta.

- Te necesitamos en Cataluña!! Ya no p-. La llamada se cortó tras un fuerte estruendo.

La de Ciudadanos se quedó helada. Un extraño escalofrío le recorrió el cuerpo. Estaba inmóvil, miraba a todas partes nerviosa. No se sentía tranquila allí. Empezó a caminar hacia la salida, sentía como la miraban. Tuvo que atravesar la gran sala abriéndose paso y disculpándose cuando chocaba con alguien. Ya casi había llegado a la salida.

- ¿A dónde te crees que vas? - preguntó algo extrañada la de UP.

Inés se quedó paralizada. Lo había olvidado por completo. Se giró lentamente hacia ella, le estaba haciendo mil preguntas con la mirada.

- Ha pasado algo en Cataluña. No consigo contactar con Carlos - dijo la líder de C's con gran preocupación.

Irene no sabía bien qué decir. Los problemas catalanes no eran muy discutidos en el Congreso. Antes de que pudiera decir una palabra Arrimadas lo dijo:

- Debo volver. Me necesitan.

Aquellas palabras no le gustaron a la podemita. Por el tono percibió que era una situación grave. No quería dejarla ir pero tampoco podía impedírselo. Inés iba sola ante el peligro y, a pesar de estar preocupada, no parecía temer en absoluto lo que sea que la esperase allí.

- Voy contigo - las palabras salieron de su boca antes de lo pensado.

- No. Es demasiado arriesgado. Si las condiciones fueran otras estaría encantada de disfrutar un poco más de tu compañía.

- Dices que es peligroso pero tú vas directa a ello y sola. Voy contigo y no acepto un no por respuesta.

Resignada, la de C's aceptó.

- Tenemos que ir a mi casa. No podemos ir allí con estas pintas.

Estaban a unos 45 minutos a pie. Llegaron en 30. Irene quería matar en esos momentos a Inés por hacerle correr como si de una maratón se tratase.

Inés se cambió de ropa. Una camisa blanca, unos vaqueros negros de talle alto y unas botas. Si iba a conducir debía ir lo más cómoda posible.

- Toma cámbiate - dijo Inés pasándole un conjunto de camisa y pantalón a Irene.

Se sentó en la cama a esperar que se cambiase. Miraba a Irene sonriendo, la de Unidas Podemos parecía algo avergonzada. Su mirada se tornó en deseo, un deseo que en aquellos momentos tenía que reprimir.

- Te espero fuera. No tardes - dijo la de C's abandonando la habitación.

En 5 minutos la de Podemos se encontró con su amiga fuera. Inés se quedó embobada al verla con su ropa, le quedaba genial esa camisa. Llevaba algunos botones desabrochados por el calor, le parecía jodidamente sexy. Y esos pantalones le... < Concéntrate Inés > pensó.

Subieron en el coche. La de C's iba al volante.

- Nos han arruinado la noche - dijo Irene - sé que te hacía ilusión.

- Lo siento mucho yo... mi trabajo nunca termina. No puedo descansar o bajar la guardia.

- Tendrás que encontrar el modo de compensármelo - dijo la de Podemos con tono provocador.

- Una cena, en mi casa. Vino, buenas vistas.. - dijo Inés mirando a Irene.

Les esperaba un largo y pesado trayecto. La de C's se alegraba de tener compañía. Salieron de Madrid a las 1:55 de la madrugada.