Capítulo 17

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Llevaba tres días muy atareada con el trabajo, me suelo agobiar con facilidad y lo habría hecho de no ser por Logan, él notaba cuando me estaba alterando y entonces pedía cinco minutos de descanso, claro, si los pido yo pasan todos, pero si los pide él el mundo se detiene. Sherry también me había ayudado, era una buena amiga y siempre estaba para todo, podía contar con ella para que me ayudara con las fotos.

Alana y Nathan me pillaron en la cafetería del estudio besando a Logan, me habría sorprendido por ver a esos dos tan juntitos, pero solo pude sonrojarme, eso sí, ahora Alana no me dejaba en paz, se tiraba todo el tiempo preguntándome estupideces.

Esa mañana todo el mundo tenía mucha energía, excepto yo, eran alrededor de las dos y no habíamos hecho ni un descanso, estaba apoyada sobre la pared, esperando a que Logan se pusiera el siguiente conjunto, Sherry estaba hablando con una chica de vestuario y parecía que se entendían muy bien.

- ¿De qué hablabais? – pregunté cuando Sherry se acercó.

- Me ha dicho que le gusta mi pelo – contestó tocándose frenéticamente sus rulos rubios.

- Yo te dije que te hicieras las planchas algún día.

- Sí, te haré caso, algún día – dijo en tono burlón.

Iba a protestar pero entonces vi que Logan se acercaba con dos mujeres a su lado, aquellas eran las encargadas de la revista, no sé para que servían, porque lo único que hacían era agobiar, creo que todos las odiábamos, los de la propia revista y los del estudio.

- ¿A qué esperas niña? – me dijo una.

- Nos han puesto a dos niñatas para el reportaje, este estudio va a peor, ya no hay nadie que se tome las cosas enserio.

Sherry pareció ofenderse, yo en cambio lo que sentí fue enfado, rabia, di un gran manotazo en la mesa más cercana y casi tiró mi cámara que estaba en el filo, Logan se dirigió hacia mí lo más rápido que pudo, me cogió del brazo y me sacó de allí, empezamos a andar por el pasillo hasta que dejamos de escuchar los quejidos de aquellas dos.

- Yo tampoco las soporto – dijo Logan leyendo mis pensamientos.

- Nadie las soporta.

- Lo sé – hico una pausa – Bueno, ¿Quieres tomar algo en la cafetería?

- Pero, nos están esperando.

- Qué esperen, no me pueden echar.

- Pero a mí sí.

- Si te echan a ti me voy yo.

- Que caballeroso – dije sarcásticamente, aunque él lo tomo como un cumplido.

Al final me convenció, además necesitaba un descanso, entramos en el ascensor, solo era una planta, pero no teníamos ganar de andar, el ascensor se cerró y en menos de un segundo Logan me tenía cogida en brazos, ambos nos reíamos y nos besábamos, sonó una campanita, eso significaba que el ascensor se iba a abrir, Logan me dejo en el suelo y salimos como si no hubiera pasado nada, aunque por dentro siguiéramos riendo.

Llegamos a la cafetería, no había mucha gente, fuimos hasta la máquina dispensadora, Logan sabía lo que quería, así que ni me preguntó, yo miré hacia el final de la sala y vi a Amber sola removiendo un vaso con una cucharita de plástico. Le dije a Logan que me esperara ahí y fui hacia Amber.

- ¿Qué te pasa, amiga?

Me senté junto a ella. Parecía verdaderamente triste, estos últimos días había estado muy rara, por las mañanas andaba cabizbaja sin decir nada, no tenía ganas de salir a la calle, se pasaba las tardes sola en su apartamento y nos daba de lado a Sherry y a mí.

- Nada – dijo sin quitar la mirada de su vaso.

- No me lo ocultes, somos amigas – la cogí de las manos y ella levantó la mirada, tenía una débil sonrisa en el rostro.

- Está bien – apartó su silla de la mesa y se me quedó mirando – A ver, a ti alguna vez, como lo digo, si has tenido un famoso favorito, es decir, un famoso, da igual actor, cantante o lo que sea, que te encantaba y pensabas todo el tiempo en que estabais juntos, que erais una pareja feliz, que lo seguías en cada paso de su carrera, que te obsesionabas con él.

- ¿A dónde quieres llegar?

- Porque yo sí, lo sigo teniendo, hace varios años, me enamoré de un actor, me empecé a obsesionar con él, me sigue gustando, pero hace un tiempo que me dije a mí misma que ese amor era imposible, estoy enamorada de Josh – mi asombro quedó bien reflejado en mi cara – sí, lo estoy, y ahora lo conozco, lo he visto, he pasado un día en la playa con él.

- Pero tiene novia – dije sin pensar.

- Lo sé, pero ___, he llegado hasta aquí, lo he conocido, los sueños se cumplen – se dibujó una sonrisa en su cara – no voy a dejar que una chica me detenga, que tiene ella que no tenga yo.

- No puedes meterte en esa relación, son felices, no te entrometas, no arruines esa bonita pareja, yo te entiendo, pero…

- ¿Qué me entiendes? – ahora la voz de Amber sonaba a desesperación y amargura – no, que va, para nada, yo lo amo, ___, lo amo – varias lágrimas rodaron por sus mejillas.

Abracé a mi amiga, ella no tardó en responder a mi abrazo, Amber lloraba amargamente, yo me aferraba a ella y la acariciaba, mientras ella repetía todo el tiempo entre sollozos “Lo amo”.

Un famoso y yo (Logan Lerman & tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora