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PERDÓN POR EL RETRASO, SUBIRÉ OTRO EN LA TARDE

- No quiero que después estés llorando, JiMinnie, sólo eso te advierto. - dijo Tae Hyung mientras acomodaba la última pila de papeles, que contenían contratos súper importantes para la empresa al igual que tenía algunas copias de las normas y requisitos para obtener trabajo en la importante empresa de Seok Jin.

- ¿Llorar? ¿Por que? - Se burla el de menor estatura.

- Porque vas a perder.

Oh vaya, ¿volverá con ese tema? - Olvídalo, Tae Tae, no ganarás. Él no va a gustarme y ya deja de sacar ese tema, niño raro.

Tae Hyung llevó una mano a su pecho y abrió la boca desmesuradamente , haciéndose el ofendido. Luego respiro dramáticamente fuerte y soltó un quejido - Primero, no soy un niño. Segundo, no soy raro, soy rarísimo. Tercero, SACARE EL TEMA CADA VEZ QUE QUIERA PORQUE ERES UN ENANO CASI ENAMORADO Y NO QUIERES ADMITIRLO.

El pelirosado suspiró. - Como digas.

Luego de ello, sólo recogieron sus cosas para salir del trabajo, su horario y quehaceres ya habían acabado, por lo que tenían el resto de la tarde libre. Ambos mejores amigos quedaros en visitar una nueva cafetería que estaba ganando fama por la buena atención al cliente, la deliciosa comida y, la parte que más les gustó a ambos, karaoke. No era un bar, ni nada de eso. Era más bien un lugar donde comer y pasar un buen momento se fusionaba.

Y claro, ¿como no visitar esa tan famosa cafetería, si ya les había llamado bastante la atención con eso último?

Uno de los sueños frustrados de estos dos chicos fue el ser cantantes. Ambos, siendo más jóvenes, hacían dúos siempre para cantar y componer música, la cual nunca salía de la habitación de ellos.

Al ver que no progresarían lo suficiente, simplemente lo dejaron de lado. Aun si cantar era lo que más les gustaba optaron por una carrera más segura. Ninguno de ellos había terminado la universidad aún, la verdad es que aún asisten a ella, estudiando fotografía y publicidad. Pero Seok Jin encontró mucho potencial en ellos por lo que decidió contratarlos en su prestigiosa empresa con la excusa de que: " Así empezaran a tomar experiencia para cuando terminen la carrera y empiecen a buscar trabajo".

En dicha empresa, la cual era básicamente dueña de las revistas más reclamadas de toda Corea, les pusieron a practicar de todo, desde fotografía, hasta edición y estadística de bienes. El jefe de ambos chicos les dijo que sólo era para reforzarles más y que les serviría en un futuro.

Cuando los dos chicos llegaron a la tan reclamada cafetería fueron recibidos por un olor exquisito a galletas. Una señora muy agradable les dio la bienvenida y les guió a una mesa, la cual estaba algo cerca de la tarima del karaoke.

Habían personas haciendo turnos para cantar, otros simplemente escuchaban y hacían críticas a cada uno de los 'cantantes' mientras otros solo prestaban atención a sus comidas o celulares.

¡El ambiente era perfecto!

- Tae Tae, algo me dice que volveremos a nuestros antiguos tiempos. - ambos sonrieron cómplices y se dedicaron a ver la carta de menú, estaban hambrientos. Y emocionados, también.
















- Oigan, soquetes, escuché de una nueva cafetería en la cual todos pueden ir y cantar. - Nam Joon dice a sus amigos, haciendo que despeguen la vista de su celular.

- ¿Si? Entonces vamos.

- ¿Ahora? Ho Seok, ¿No dijiste que no más salidas esta semana? - cuestiona Yoon Gi.

El mencionado hizo un ademán con las manos y sólo se excusó con que tenía hambre y que quería ver que tan bueno era esa cafetería.

- Bueno... entonces vamos, no queda tan lejos de aquí.

Y así fue como los chicos fueron a esta cafetería, tomando asiento cerca de la tarima y justo detrás de un pelirosa que conocían muy bien.

- Oye, Yoon Gi, ¿Ese no es tu enamorado?

- Oh... si lo es...

- ¿y quien es ese otro? - vuelve a preguntar Nam Joon. Yoon Gi se encogió de hombros mientras miraba con más atención a la mesa de en frente.

Ambos estaban sonriendo mucho y riendo. Al parecer eran muy cercanos.

Pero la sangre de Yoon Gi hirvió cuando el chico desconocido de cabello castaño oscuro se acercó a la cara de SU Ji Min y removió salsa del espagueti que había quedado en la comisura de su labio... y de paso, besó la frente del pelirosado.

Pero no fue eso lo que más le enojó. Sino que Ji Min le devolviese el beso pero en la mejilla y verlos a ambos seguir hablando y riendo.

¿Que estaba pasando allí?

social experiment | yoonminWhere stories live. Discover now