━My baby don't like it.

t h i r t y

Horas antes.

Mark detiene sus pasos y observa una vez más el lugar que ha elegido, cree que ha sido el correcto. Es una cafetería cerca del centro que seguramente le agradará a Donghyuck por la cantidad de plantas que rodean la decoración del lugar, el aroma es agradable también y no hay mucha gente en las mesas cercanas al ser por la mañana.

Si bien había muchas cosas que tenía planeado decir y muchas otras que suponía solo fluirían de su boca,estaba inquieto. Mark toma asiento por tercera vez desde que llegó bajo la atenta mirada de la mesera que se cuestionaba si sería momento oportuno para ofrecerle la carta.

Se dedica a observar las flores en el centro de la mesa y acaricia sus hojas con cuidado mientras piensa con la mejilla sobre su palma.

El calor del sol se filtra de forma irregular a través de la hojas de los árboles a su alrededor a la vez que estas se remueven por la brisa y sabe que debe ser paciente... pero han pasado unos veinticinco minutos desde la hora acordada entre ambos y comienza a preocuparse un poco.

No quiere llamarlo, sabe que no debe meter aún más presiones después de todo lo que ha hecho.

Asique mira a su alrededor por varios minutos más y tantea el celular dentro del bolsillo de sus jeans, cuando este vibra.

—¿Donghyuck?...—responde inmediatamente—¿Pasó algo?Estoy esperándote dentro-

—Umh¿Puedes escucharme?—Mark puede oír el sonido ambiente y hace un sonido de afirmación entre tanto ruido de personas y niños gritando desde la otra línea.

—Oh...verás, llame para decirte que no iré—lo escucha titubear al principio de la oración pero la última parte resuena en su cabeza.

Y eso es lo único que dice, no agrega más.
—¿Qué? Pero...prometiste que lo pensarías.

—Lo hice—responde con seguridad esta vez—Después de todo Mark,¿De qué sirve seguir con todo esto?—escucha un largo suspiro por su parte y no puede evitar entrar en un pequeño trance ante aquello que mencionó, lo que dijo lo había dejado descolocado.

—Y-yo no lo sé—el mayor duda al intentar dar siquiera una respuesta hasta que el viento trae consigo algunos mechones desordenados de su cabello a su frente como si estuviese alentándolo a decir algo—Es decir-

...¿Acaso no valía la pena luchar por algo que había existido entre ambos por tanto tiempo?

Mark sintió el crudo desgano de Donghyuck por primera vez, como si no le importaba realmente continuar con ello...y no supo que hacer para retenerlo.

Después de tanto tiempo de no saber que era exactamente lo que quería, se obligó a sí mismo a esclarecerlo y después de aquellos días de verlo constantemente, fue verdaderamente conciente de la opresión que sentía en el pecho.

Y de las palabras que se quedaban atascadas en su garganta, sabía que era imposible lo que quería decirle en verdad "vuelve conmigo".

—Quería pedirte perdón...—el pelinegro se puso de pie alejandóse de aquella mesa con una de sus manos dentro del bolsillo trasero de sus jeans tocando las llaves que portaba aquel significativo objeto para ambos.

Sé que lo que hice no es justo, volver a ti después que no haya funcionado pero yo enserio pude darme cuenta de que... en verdad eres a quién amo.

—Ya dije que aceptaba tus disculpas—habló, el menor ya no quería escuchar más sobre ese asunto y Mark rogó en silencio que dejara de ser tan cortante.