𝘮𝘺 𝘣𝘰𝘺 - evanstan | ✔

𝓉𝓌𝑜

Al entrar el director estaba sentado en un gran sillón negro mientras que otro hombre se encontraba en la silla frente a su mesa mirándolo, y otro hombre de pie, detrás de este. Al escuchar la puerta ambos se giraron. 

Las miradas de Sebastian y su compañero se cruzaron. No podía creer que estuviese allí frente al que era su ídolo.

Cuando Sebastian estaba estudiando arte dramático todo lo que podía pensar era en llegar a la altura del joven actor Chris Evans, qué en ese momento estaba participando en las mejores películas. Lo admiraba de tal manera, qué era el que le daba ánimo a continuar estudiando pese a que su familia se opusiera completamente a su sueño de ser actor. Pero jamás pensó que realmente estaría frente a él de aquella forma.

Había hecho películas y había coincidido con él en varias entregas de premios y en unas cuantas fiestas, pero nunca había estado tan cerca, siempre había sido demasiado tímido como para dirigirle la palabra a su ídolo.

—Este es Sebastian Stan, el actor que compartirá protagonismo con usted, señor Evans. —Lo presentó el director.

Chris sonrió al verle, parecía agradable, lo cual tranquilizaba a Sebastian, tendría un buen compañero y no se sentía decepcionado, es justo como sentía que sería a primera vista.

Saludó también a su agente, un tipo serio que no dijo ni una sola palabra en toda la reunión.

—Encantado de conocerte, podemos tutearnos supongo, ahora que vamos a ser compañeros.

—Por supuesto. —Sebastian sonrió de vuelta.

La atmósfera era agradable, tenía ganas de empezar con la película y trabajar con Chris, sus nervios se habían convertido en entusiasmo. Estar en la gran pantalla junto a la persona que más admiraba, no podía esperar ni un segundo.

—Haremos una primera lectura del guión mañana a las 8am, no se retrasen. Esta reunión tan solo era porque el señor Evans insistió en conocerlo antes.

Sebastian lo miró un poco sorprendido. ¿Quería conocerlo?

—La verdad es que soy un gran fan, he visto todas tus películas, así que me sentía un poco emocionado por tu participación. Perdón si esto te ha molestado o te he hecho perder el tiempo.

Sebastian intentó no ponerse a gritar de la emoción allí mismo, ¿Chris Evans estaba diciendo que era su fan? No podía creerlo, era como un sueño hecho realidad.

—Para nada, yo también soy un gran fan, te he estado siguiendo desde que iba a la escuela de arte dramático, sinceramente, es gracias a ti qué seguí este camino.

—Por favor Sebastian, me siento demasiado alagado en este momento —Chris sonrió y lo miró a los ojos—. Siento que seremos buenos amigos. Vayamos a tomar algo mañana, si te parece bien.

—Por supuesto.

Después de una amena charla después, Sunny se encontraba conduciendo el coche camino a la casa de Sebastian mientras este fangirleaba en el asiento del copiloto diciendo que el gran Chris Evans le había dicho que era su fan.

—Bueno, es obvio, ¿no? Eres un actor reconocido, era imposible que no te conociese. Además, eres muy bueno en lo que haces.

—Supongo pero... Nunca pensé que lo escucharía de sus labios.

—Tenías razón, eres un chico de dieciséis años virgen que va a conocer a los padres de su novia inexistente.

Sebastian le miró con los brazos cruzados, nadie diría que ya tenía 37 años, en ocasiones se comportaba como un niño, o al menos esa era la parte que siempre veía Sunny.

—Le quitas la gracia a todo.

Ambos sonrieron y siguieron su camino a casa. El día siguiente sería probablemente un gran día.