El gremio del dios ladrón.

No tomar el té

Tienes mil cosas en la mente esperando para ese momento, pero, aun así, ¿qué no puede salir mal? Aunque ya estés "impune" con algunos pecados cometidos, no eres inocente del todo y eso es lo que más te preocupa.

Dejas la taza en el lugar y sales de la habitación junto a Sebastián; el pasillo es largo y sin puertas. Las paredes están adornadas por cuadros de todos los capitanes que hicieron parte del escuadrón "S+", incluido el tuyo. Hay quienes dicen que este crece cuando un nuevo capitán asume el cargo, y posiblemente no sea mentira. Al final del corredor encuentras unas escaleras, bajas por ellas. Sientes como si las pinturas que están allí, llenos de imágenes sangrientas, te miraran. Te sientes culpable mientras bajas los escalones.

Tu mente, que usualmente está tranquila, comienza a sentir el paso del tiempo. Te sientes con miedo, aunque sepas que él no pueda hacer nada dentro del gremio; por alguna razón te sientes desprotegido. Llegas a la sala de visitas, la más grande de todas, y buscas con la mirada donde estará. Al lado tuyo, Sebastián te dice en que puerta es y entras en ella.

Al cruzar la puerta lo primero que notas es al miembro del consejo mágico, este no es humano. Está lleno de pelaje dorado en todo el cuerpo. Es un hombre tigre de color dorado, al parecer se pinta el pelaje para que la edad no se vea reflejada en el cuerpo. Das un suspiro, sería peor si un humano hubiera venido. Los seres mágicos, en especial los del consejo, les da igual cierto tipo de cosas. Caminas y te sientas en el sillón que está en frente de él.

-Un gusto, soy Zervik, ¿en que lo puedo ayudar? -preguntas con una sonrisa en tu rostro, es el mayor símbolo de "política" que puedes hacer sin nombrar una palabra-. Le pido perdón por parte del líder del gremio, se encuentra ocupado en una misión urgente que salió hace pocos días.

-Un gusto capitán Zervik, mi nombre es... -pronuncia un nombre en un lenguaje imposible de ser interpretado por los seres que no sean de esa raza; eso muestra lo "importante" que son para él-. Vengo a ustedes a pedirles algo demasiado importante. Y no se preocupe por lo del líder del gremio. Es un honor tenerlo a usted.

-Claro, no se preocupe, estamos aquí para hacer negocios al final, ¿cierto? -Sonríes demostrando amabilidad.

-Creo que es demasiado lo que le pediré a ustedes como trabajo, y según ustedes no hay trabajo que no puedan hacer, pero... Este es demasiado complicado y no tenemos a donde pedir ayuda.

» Siguiendo, y yendo directamente al grano, necesitamos que roben un libro. Tal como lo dijiste, el consejo en su totalidad necesita ese libro. -Suspira-. El nuevo director de la sagrada biblioteca de Alejandría II, acaba de declarar que dará a conocimiento general en una semana el libro del tiempo.

»Creo que es de conocimiento general lo que hace el libro y lo que tiene dentro, pero es mejor que lo explique por si las dudas. -Hace un movimiento con las manos y se crea una barrera de sonido alrededor del cuarto-. El libro del tiempo es aquel que fue creado por los dioses que anota todas las líneas temporales que existen en el universo. Cada decisión que tomas, este libro la acepta y cambia los hechos de acuerdo con ello. Claro, esto solo se ve afectado en la vida de cada persona.

»Podrías imaginar las miles de millones de líneas temporales que han de existir por cada decisión tomada por una persona. Desde una taza de té, hasta dar un beso. -Sonríe y prosigue-. Al dar esto, significaría que cualquier persona podría utilizar la línea que más le sirve, alterando el orden natural de las cosas.

-Bien, lo que están pidiendo es un suicidio. -Tratas de sonreír, pero no lo logras. Solo imaginar entrar a esa biblioteca con ánimos de robar-. ¿Qué beneficios trae esto para nuestro gremio?

-Además del dinero que les llegará a ustedes, los que hagan parte del trabajo tendrán el derecho de pedirle un deseo a un genio sin importar cuál sea.

-Claro, me imaginaba que iba a ser algo por ese estilo... Espera, ¿cualquier tipo de deseo? ¿Es en serio?

-Sí, cualquier tipo de deseo, entonces... ¿decides aceptar la misión?

Decisión: Aceptarla.

Descripción: Aunque sea una misión demasiado compleja, una en donde literalmente podrás enfrentar algo peor que la muerte.

Decisión: Negociar.

Descripción: Podrías buscar mejores ofertas sobre las ganancias.