Cuando tienes las cosas tan claras, tienes que huir y empezar de nuevo.
Otra vida experimentar, para acabar en otro lugar.
Cuando crees que el amor llama a tu puerta, sólo te esta preparando para el amor correpondido.
¡¡os he dejado con la intriga...
Un ruido escandaloso me hizo despertar, son las 9.00 de la mañana, me levante de un salto y fui a la ventana que había en el comedor que daba a la carretera. Mire y habían dos coches haciendo el tonto, uno de esos coches se paro justo en mi casa, el piloto daba gira la cabeza y de golpe me escondo para que no me vea, durante unos segundos el coche no se escuchaba. Hasta que escuche como por fin se iban, suspire de alivio, me puso nerviosa que pudiera haberme pillado y algo me pasase, no llevaba ni una semana aquí.
Fui hacia mi cuarto para hacer la cama, y prepararme la ropa ya que saldría a comprar comida. Me fije en el movil, y vi las fotos del Mini que me mandó Amanda ayer cuando estaba dormida. Era espectacular, descapotable negro, de 3 puertas y nuevecito, le envíe un "me lo quedoooo" y sonreí, ella me pasó la ubicación y me puso que me pasará ahora si quería, acepté ya que tenía que ir a comprar la comida para el mes.
Me di una ducha relajante, después me maquille tapando mis ojeras, colorete y rímel, los labios solo los hidraté. Me deje el pelo suelto listo, y me vestí con unos tejanos estrechos, y una camiseta de punto blanca con escote, con unas botas de las que llevan dentro pelo y son planas, de color marrón, me puse la chaqueta gris gorda con capucha de pelo, cogí lo necesario y salí, se me olvidó desayunar pero no había comida.
Con ayuda del gps en el movil pude llegar a casa de Amanda, en el gps ponía que caminando estaba a 10 minutos, pero al ser nueva aquí tarde 20. Al llegar a la calle busque el numero 50, me encontré con una casa mediana, de color marrón de ladrillos moderno, me acerque a la puerta principal y pique a la puerta. Un chico un poco más mayor que yo abrió la puerta, era moreno, con ojos ocuros, alto y fuerte.
-Buenos días, he quedado con Amanda-dije amablemente y sonrío.
-Oh si, pasa no me acordaba, y buenos días-dijo el igual, me guió hasta la cocina y ahí estaba Amanda preparando 3 cafés.
-Buenos días guapísima, como has dormido en tu nueva casa?-pregunto ella dándome dos besos muy amable como a sido desde que la conocí.
-Buenos días, la verdad que he dormido bastante bien-dije sonriendo pensando en lo sucedido hacia dos horas.
-Ten siéntate, desayuna que se que no tienes aun comida en casa-dijo ella amablemente y agradecí-Ya habrás conocido a mi novio Matt-dijo ella sonriendo.
-Si, es muy majo-dije sonriendo y justo entra el.
-Asi que eres nueva aquí no?-preguntó amablemente mientras se sentaba con nosotras a desayunar.
-Si, llegue hace dos días-respondí igual.
-Ella es Jane amor, la que le conseguí la casita en la zona de Roodwood-dijo ella explicandole.
-De donde vienes?-preguntó igual.
-De un pueblo de Portlant -dijo sin importancia.
-Wow, con 19 años un cambio muy brusco, algo has querido dejar atrás-dijo dandole un sorbo a su café y Amanda le dio un codazo por su comentario.
-Tranquila no pasa nada, no era feliz-dije sincera , el se sorprendió y asintió. Acabemos de desayunar conociéndonos más y me explicaron sobre la fiesta y eso. Cuando acabemos Amanda me llevó hacia el garaje, y me enseño mi futuro coche, estaba nuevecito, me dí un par de vueltas y me asegure un más, asique firmemos un papel, y la semana que viene iríamos hacer el cambio de nombre, le pagué los 3.000 en metálico y solucionado ya tenía coche, estuvimos un rato hablando y hacia la 13.00 ya fui directa al super que me había indicado Amanda.
A los 15 minutos lo encontré, aparqué e hice una compra de 100!euros por lo menos, que me durara todo el mes. Después de hacer la compra fui a mi casa a ordenarla y hacerme la comida.
A las 21.30 de la noche ya me encontraba eligiendo modelito para ir a la fiesta, le pregunté donde era y me dijo que era al aire libre, que vaya informal pero sexy. Entonces me decanté por algo no muy atrevido pero sexy, como ya me habia duchado en la mañana, decidi solo ducharme el cuerpo. Me eché crema al salir de la ducha, y me puse la lencería de encaje negra, y me comencé a maquillar como siempre pero con los labios rosa carne y la linea de los ojos, seguidamente me peine el pelo liso acabado en ondas, finalmente me vestí asin:
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(Pantalón corto con el mismo cinturón y rasgado)
Ya que estábamos en pleno julio, iba perfecta para un fiesta o eso creía. Cogí todo lo necesario y me asegure de que todo estuviera cerrado y salí echando la doble llave a mi nuevo hogar, camine hasta la cera y justo llegaba Amanda con su coche.
-Wow, no veas estas muy sexy-dijo ella sincera, yo me subí al coche y sonreí.
-Es informal pero sexy, y tu no te quedas nada atrás-dije sonriendo.
A los 20 minutos lleguemos a la fiesta, bajé sorprendida porque era una casa en el bosque al lado del lago.
-Aquí es?-pregunté sorprendida.
-Si aquí es-dijo ella llevándome dentro, nada más entrar me vino olor a tabaco, alcohol, sudor, marihuana y sexo. Fuimos a una barra donde había alcohol y nos servimos un cubata, luego me guió hasta afuera donde habian mas mesas y gente bailando fumando etc.
-Aqui estais!! Menos mal ya empiezo a ir borracha-dijo ella riendose y nos saludemos igual.
-Matt aun no a venido?-preguntó Amanda preocupada.
-A ido a buscarlo, lo traerá supongo-dijo Taylor. Buscarlo? A quien? No entendía nada.
-Bueno, pues esperemos que no se alborote mucho todo.-dijo Amanda bebiendo de su cubata. Taylor nos ofreció de lo que estaba fumando y yo dudosamente accedí.
Ya eran las 0.00, habían pasado 1 h y media desde que lleguemos y estábamos borrachillas pero al puntillo juntándolo con la substancia química. Me estaba meando asique le dije a Amanda que iria a buscar el baño, me dijo que estaba arriba la ultima puerta a la derecha y le hice caso. Subí esquivando a la gente, y buscando la ultima puerta a la derecha. Abrí la puerta y me encontré a un chico casi en pelotas y cerré de golpe, me había equivocado que vergüenza, fui hacer mis necesidades, me lave las manos, me retoque y volví a bajar, mientras bajaba y esquivaba a la gente notaba una mirada pero no sabía de donde venía con tanta multitud. Fuí en busca de otro cubata así no tendría que volver, me lo estaba haciendo y seguía sintiendo esa mirada. Mire al frente, y en la pared de enfrente algo lejos había un chico con capucha recostado, y me miraba fijamente aunque no le podía ver bien la cara, pero si esos ojos azules grises, que me dieron a entender que cambiarían mi vida para siempre.
