Capítulo 06

1.1K 133 73
                                    

Oops! Această imagine nu respectă Ghidul de Conținut. Pentru a continua publicarea, te rugăm să înlături imaginea sau să încarci o altă imagine.


Cuando me anunciaron que mi equipo médico tendría un nuevo integrante pensé en lo fastidioso que sería, eso significaba entrenar a una nueva persona, capacitarla de la manera correcta e indicarle las reglas establecidas y por supuesto enseñarle de lo que se trataba ser parte de un equipo médico cirujano.

Rogaba por qué el nuevo integrante fuese alguien serio y dedicado a su trabajo con alma y corazón, alguien con quien pudiera adaptarme fácilmente, incluso aunque me pasaron su informe no quise leerlo después de todo no se puede reflejar sobre papel lo que es una persona, por eso se debe conocer e identificar sus verdaderos motivos, la verdad es que tenía altas perspectivas las cuales fueron destruidas en un par de segundos. Me decepcionó de gran manera el conocer al nuevo integrante de mi equipo, Iris Shuster tenía tatuado en su frente la palabra problemas, su simple apariencia no era nada profesional, siempre ataba su cabello en una coleta de caballo, en su bata blanca había colocado calcomanías y su calzado eran unos tenis blancos de lucecitas pero su personalidad era lo que más me molestaba, usando un humor sarcástico para todo, siempre fingía coquetería y a todo le encontraba un mal chiste, aquello ocasionaba problemas entre los pacientes, nunca tenía tacto, siempre conseguía burlarse de los pacientes y aunque sus diagnósticos eran correctos la manera en que lo hacía no era la apropiada.
Sabía que ocasionaría problemas y no me equivoqué, desde el primer día terminó en la oficina del director del hospital pero lo que mas me molestó es que ella se saliera con la suya y parecía estar acostumbrada a ello. Si ella no iba a facilitarme el trabajo yo tampoco lo haría, por lo que decidí pasarla por todo el hospital en espera de que se cansara y ella misma renunciara pero debía admitir que era alguien inteligente, se percató de inmediato de mi intención por lo que no dio su brazo a torcer, aquella actitud no sería fácil de controlar pero al igual que todos ella tenía su punto débil.
Había escuchado el rumor sobre que el consejo presidencial del hospital convocó una junta general para poner manos en acción y dar por fin orden en el hospital, por lo que el mismísimo Korden Bell hizo acto de presencia y aquel hombre resultó ser el talón de alquiles de la joven problemática, notaba en su mirada que había algo oculto, compartían una historia que aún la hacía temblar, bastaba con que él la llamara por su nombre para derrumbar por completo aquella seguridad egocéntrica, ella le tenía miedo y aunque era una buena manera de mantenerla a raya no era lo que necesitaba, parecía como si ella fuese a llorar en cualquier momento y no necesitaba eso. Pero lo que mas me sorprendió de todo esto es que ella fuese transferida por el hospital Johns Hopkings, era el hospital más prestigioso y reconocido en todo el mundo, ni siquiera yo había logrado transferirme a ese hospital y ella había decidido marcharse de ese lugar para estar en un hospital tan deficiente como este y aquello me hizo cuestionarme realmente sobre sus motivos para estar aquí, pero algo como interpretar los pensamientos de esa mujer era imposible, estaba seguro que ni siquiera ella misma sabía lo que realmente tenía en esa mente suya.
Una joven que ingresó a los diecisiete a Harvard, que se gradúo a los veintitrés y después trabajó por todo un par de años en el hospital Johns Hopkings, para finalmente volver a Londres a un hospital que ni siquiera tiene la mitad del prestigio de los lugares donde ella estuvo, eso solo me hacía ver que ocultaba algo y fuese lo que fuese era lo suficiente fuerte como para aferrarse a ello.

Invidente amor ©Unde poveștirile trăiesc. Descoperă acum