Capítulo 26

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Jeremy

No tenía una opinión en particular de él, sólo creí que era un gran doctor y que aparentemente tenía una rivalidad con Shuster pero creo que había algo mas, es algo que comprobé muy bien durante la cirugía. El director Bell había estado observando desde la sala especial de cirugía, mirando con atención el proceso que realizábamos y todo fue un completo éxito, nada parecía ir mal lo único que hacía falta era cerrar la herida pero antes que lo hiciéramos desde la bocina de la sala de observación escuchamos como una enfermera llamó al doctor Bell para informarle que algo grave le había sucedido a la doctora Shuster, ni siquiera el director Bell reaccionó tan rápido como lo hizo del doctor Cooper, había dejado los utensilios a un lado y me pidió que yo terminara la cirugía mientras ya iba hacia afuera, todos nos quedamos por un momento en silencio, su actuar fue extraño y sorprendió a más de uno pero teníamos un trabajo que terminar por lo que solo nos concentraremos en eso, en terminar de cerrar la cirugía y inspeccionar que la paciente estuviese bien.
Y tras pasar varios horas lo vi llegar, llevaba la bata de cirugía en mano y como si nada hubiese ocurrido continuó con su trabajo, debía aceptar que era un hombre sereno y disimulaba muy bien sus sentimientos pero aparentemente cuando se trataba de Shuster titubeaba.
Sabía que había algo mas y estuve seguro de ello tras la confesión del doctor Díaz en el bar, me miró con cierta furia y pensé que incluso podría golpearme pero sólo se levantó pago la cuenta y se marchó.
Alguien estaba enamorado de Iris Shuster y intuía que él mismo sabía que no era sencillo.

A la mañana siguiente decide aclarar las cosas, él aún se quedaría un par de semanas y sabía que sería incómodo tras aquel acontecimiento, durante el descanso fui a verlo se encontraba en la habitación de la joven que había fallecido hace un día, se encontraba sentado en la cama mirando hacia la ventana.

—La gente suele tocar antes de entrar —habló el doctor Cooper cuando me acerque—. Pero debo suponer que estas ansioso por querer aclarar lo de anoche. Ahora mismo no tengo una relación con Shuster así que lo que ella haga no tiene que ver conmigo.

—Aun aunque no haga una relación, debo aclarar que no tengo ninguna relación sentimental con ella, solo somos buenos colegas.

—Interesante que solo aclares el hecho emocional pero no físico, lo que indica que compartes algo intimo con ella.

Es un hombre listo, debo admitirlo.

—Como mencioné antes, no tengo una relación con ella así que la relación que usted tenga con ella no debe ser de mi interés.

—Aun así sentí la necesidad de aclararlo para evitar incomodidad. ¿Puedo? —pregunté señalando el lugar a su lado a lo cual él solo asintió, por lo que tomé asiento —. Puedo notar tu preocupación por ella.

—Ella vio morir a su madre cuando tenía once años y ahora ve morir a una niña pequeña justamente en la misma habitación en donde vio a su madre morir... Cada médico tiene sus motivos para escoger esta carrera, algunos con motivos de mas de peso que de otros, nuestro juramento de consagrar la vida al servicio de la humanidad tiene mucho más valor que en otros, en mi caso solo estoy siguiendo el legado familiar pero para Shuster significa mucho más —él se levantó me miró por un segundo para extenderme un broche, el cual tomé reconocía muy bien este tipo de broches, eran los que entregaba a cada paciente —. Cada broche es especial para ella y representan cosas positivas pero tambien parte de nuestro trabajo es aceptar que no se siempre se puede salvar una vida y es algo que ella debe entender.

Invidente amor ©Where stories live. Discover now