La razón de mi sonrisa... / Taekook

》Capítulo 15《

Min Yoongi siempre procuró llegar puntual a todos lados, más aún si de trabajo se trataba.
Pero hoy, el universo parecía conspirar en su contra. Pues nada parecía ir bien, para empezar, se había levantado tarde ¡¿por qué tuvo que quedarse dormido?! Y lo más importante, ¡¿por qué tuvo que escoger un trabajo que inicia a altas horas de la mañana?! Él sin duda no era fan de levantarse temprano, tuvo que hacerlo, debido a que necesitaba el dinero y sus clases tenían lugar en horas de la tarde. Por la noche se dedicaba a estudiar y hacer todas las tareas pendientes por lo cuál, le quedaban escasas horas para conciliar un buen sueño. Una agenda muy ocupada y una rutina agotadora.

Suspiró con alivio cuando llegó al lugar, la cafetería de la Universidad. Para su suerte, su jefe no se encontraba, aún así esperaba no ser acusado por su compañero de trabajo.

ㅡLlegas tarde ㅡescuchó decir a Seokjin ㅡEs la segunda vez en esta semana.

ㅡLo lamento, tu sabes como es mi vida, Seokjin... te pido que no me acuses, prometo llegar temprano, pero no lo hagas, necesito en verdad el trabajo... ㅡse mordió el labio, temeroso por la respuesta de su compañero.

ㅡ¡Hey! Jamás mencioné que le diría algo a nuestro jefe. Somos amigos y por eso mismo, no quiero que nada te afecte. Si necesitas ayuda con algo, estoy en mi cuarto año de la universidad y puedo ayudarte.

Yoongi sonrió, el tenía una relación más allá de la amistad con Seokjin. Tenían una hermandad demasiado fuerte.
En esos momentos en donde Min sintió no tener a nadie, Jin apareció para brindarle la más sincera amistad que pudo tener en su vida.

ㅡGracias, Hyung ㅡsonrió mostrando aquella sonrisa de gatito tan característica de él.

ㅡSi, si. Sabes que siempre contarás conmigo, ahora, dejemos las cosas cursis y vamos a trabajar.

El menor rió tiernamente... en verdad adoraba la personalidad tan única de su mejor amigo.

ㅡAh, mira, yo estoy lleno de pedidos por atender. ¿puedes ir a atender a aquel chico? ㅡSeokjin señaló con la mirada al mencionado.

Yoongi vizualizó a aquel chico de estatura baja, cabellos rosa y piel blanca, sentado en una mesa con libros alrededor y aparentemente, muy concentrado en lo que sea que estuviera leyendo. Lo reconoció al instante, por lo cuál, la sonrisa en su rostro se borró.

ㅡ¡Yo no puedo! ㅡgritó haciendo sobresaltar al mayor.

ㅡ¿Pero qué es lo que te pasa? Sólo es un chico, ni que te fuera a morder.

ㅡSi, es un chico... ¡El mismo chico al que le tiré el licuado encima ayer! ㅡexclamó con las mejillas sonrojadas recordando el suceso tan vergonzoso ㅡ¿no puedes atenderlo tú? Yo puedo encargarme de las otras órdenes.

ㅡPuedo pero no quiero, me gusta verte todo sonrojado. Además, ¡vamos, no creo que sea tan malo volver a verlo! Después de todo, ayer fue muy amable contigo a pesar de que tú...

ㅡ¡No me lo recuerdes! ㅡLo interrumpió ㅡ. Eres malo conmigo, Hyung. ¿Y si lo vuelvo a espantar? O peor, ¿y si se ríe en mi cara?

ㅡNo seas ridículo ㅡDijo con tono burlesco ㅡ. Sólo míralo, parece buen chico. Ve y de paso le preguntas su nombre... o lo invitas a salir... ㅡrecibió un golpe en su brazoㅡ. Ok, ok, dejémoslo en que le preguntas su nombre.

Yoongi rodó los ojos para después salir del lugar dispuesto a enfrentarse a sus miedos y poder lograr hablarle a aquel chico sin hacer nada vergonzoso.
Pero cuando estaba perdido en su mente pensando en que todo iba a salir como esperaba, el universo lo traicionó de nuevo.
No supo exactamente como pasó pero ahora estaban los dos jóvenes en el piso después de haber chocado por accidente.