[CANCELLED] Los Cuatrillizos Grazer •AU-Crossover•

Capítulo 18: Las eliminatorias de las disculpas

Unos cuantos días después de la reconciliación entre Boris y Freddy, que por cierto había causado mucho revuelo y rumores entre los estudiantes, Mike miraba receloso como Alex hablaba con el profesor Scott, probablemente sobre alguna de las tareas que había enviado. Él había intentado hacer lo mismo que Boris para disculparse porque comenzaba a molestarle el hecho de que el pequeño Grazer no le hablara por ningún motivo, pero sin embargo y para mala suerte del azabache, el castaño parecía un poco más obstinado que Freddy y no había querido hablar con él con justa razón, y ya no sabía de que manera acercarse al chico.

En ese instante Alex le sonrió levemente al profesor y se alejó saliendo del salón. Mike al verlo retirarse, dudó un poco de lo que estaba a punto de hacer, pero luego se armó de valor y decidió seguir al castaño fuera del curso. Le costó un poco alcanzarlo en el pasillo, pero cuando lo hizo, al instante se arrepintió de sus acciones. Alex no quería hablar con él y ya se lo había dejado claro antes.

¿Era sano que siguiera insistiendo?

No, no lo era, para ninguno de los dos. Así que decidió no llamar la atención del más pequeño y detuvo su caminata viéndolo alejarse. Alex lo hizo unos cuantos pasos, pero de pronto también se quedó de pie soltando un suspiro rendido y se cruzó de brazos. Lentamente comenzó a girarse y encaró al azabache.

-¿Qué quieres Mike?- Preguntó desviando la mirada. En ese momento Wolfhard no supo qué hacer, planeaba hablar con Alex ¿pero de qué exactamente? Ya se había disculpado y el chico no aceptó ¿debía hacerlo de nuevo? Era muy probable, no tenía nada que perder después de todo.

-Quiero que esta vez... me escuches, Alex, por favor.- El castaño rascó su brazo algo incómodo y asintió en señal de aprobación. Pero no quería estar ahí. Conocía como solía ser de comprensivo con los demás y estaba seguro de que terminaría perdonando a Mike, y no quería. No quería porque lo que había hecho el chico frente a él le había dolido mucho, y aún después de todo, a su terco corazón le seguía gustando. -Sé que ya te lo dije antes, pero de verdad lamento todo acerca de los rumores, lo lamento mucho. No quiero que sigas enojado conmigo por eso.

-Todos queremos muchas cosas que lamentablemente no pueden ser.- Respondió el castaño fijando sus ojos en el más alto de manera momentánea. Por más que intentara, a Mike era el único al que no podía sostenerla la mirada.

-Alex...

-¿Qué me garantiza que es cierto lo que dices y no irás corriendo a hacer alguna tontería después de ganarte mi confianza?- Preguntó interrumpiéndolo, esta vez mirando el pecho de Mike. El azabache no supo qué decir ¿como le demuestras a alguien aquello?

-Supongo que en eso se basa la confianza. Debes creer que lo haré.- Alex soltó un suspiro cansino y negó.

-No es suficiente.

-Ni siquiera me has dejado intentar demostrártelo.- Le recriminó Mike, casi desesperado por evitar que Alex se vuelva a alejar de él.

¿Qué era eso que sentía? ¿De verdad empezaba a gustar de Alex como para llegar a comportarse así? Era la única explicación.

-Ya lo demostraste una vez, Mike.- Respondió Alex y retrocedió unos pasos. -Esto terminará siendo un círculo vicioso. Te disculpo, estamos bien un momento, y de pronto haces algo hiriente y pides otra oportunidad de nuevo. Que sea muy joven no me hace estúpido.- Mike suspiró sin saber que responder a esa lógica. Alex tenía razón, y a la vez se equivocaba en todo ¿Cómo debatías con alguien así?

Muchas preguntas sin respuesta.

-¿Puedes ser un poco comprensivo?- Pidió Wolfhard esta vez derrotado y como última opción. -¿Quieres que me arrodille y te lo pida así?

-No digas tonterías, Mike.

-Entonces dime qué quieres que haga porque ya intenté decirte lo que está a mi alcance y aún así no te comprendo.

-¿Por qué estás haciendo esto en primer lugar?- Preguntó el castaño algo exasperado, dejando sin aliento al azabache. Aparentemente Alex era experto en dejar sin palabras a Mike con sus preguntas complejas.

-Ya te lo dije. Porque lamento lo que hice, y porque no quiero que estés enojado conmigo.

-Pero ¿por qué? Por qué de pronto a ustedes les carcome la conciencia y se disculpan con nosotros. Freddy ya disculpó a Boris, todo el mundo ya lo sabe, pero eso no significa que nosotros debamos hacerlo.- Mike soltó un suspiro derrotado, dándose por vencido. Era imposible hablar con el pequeño Grazer en esos momentos. Parecía afligido y a la defensiva con él, y estaba seguro de que su presencia solo empeoraba las cosas.

No estaba tan lejos de la realidad, pero la actitud de Alex no era otra cosa que una mentira. El más bajo no hacía más que obligarse a sí mismo a actuar así para desistir de lo creía que debía hacer, aún si estaba equivocado. Quería dejar de ser tan indulgente con los que lo lastimaban, ser comprensivo solía ser cansado si los demás no hacían más que aprovecharse de él después de ganarse su disculpa.

-Con un "déjame en paz" era suficiente. No tenías por qué hacerme pedazos con tus palabras.- Susurró Mike cruzando los brazos mientras veía el rostro de Alex.

-Estoy seguro que te lo dije la primera vez, y luego en la segunda, y sin embargo estamos en la tercera.

-Pues... dicen que la tercera es la vencida ¿no?.- Contestó casi por inercia sin medir las consecuencias de sus palabras. Pero al contrario de lo que imaginó, Alex no pudo evitar sus impulsos y terminó sonriendo levemente, destensando sus hombros y levantando la mirada. El pelinegro, a diferencia de otras veces, amó con todo su ser la imprudencia que solía caracterizarlo, y sonrió complacido. -¡Ya sonreíste! Eso en mi mundo es un "lo voy a pensar".

Y ahí vió Alex su orgullo caer al piso y ser aplastado de forma humillante por Mike y su extraña insistencia. Esa era la razón por la que no quería estar ahí. Porque conocía su tendencia a ceder fácilmente ante las palabras de los demás.

-Eres lo peor.- Respondió derrotado mientras botaba aire por la boca. No había durado ni quince minutos y ya había cedido. -Eres la persona más molesta e insistente y te odio por eso.

-¿Ya? ¿Estoy disculpado?

-¡No! No estás disculpado. Apenas estás en las eliminatorias. Un error Mike y te juro que yo mismo voy a golpearte y estrangularte con mis propias manos.- El azabache hizo una seña de victoria con su brazo asintiendo.

-Yo te ayudo a matarme, te lo prometo.- Le aseguró viendo la hora en su reloj. -Debo irme ¡Gracias!- Sin pensar en lo que hacía, se acercó al castaño y estrelló sus labios en la frente del chico para luego alejarse, dejando a Alex atónito y con el corazón latiéndole a punto de salirse de su pecho en medio del pasillo.

Solo cuando ya estuvo lo suficientemente lejos como para disculparse, cayó en cuenta de su acción, y maldiciendo por lo bajo, se anotó un punto menos en los que debía hacer para lograr ganarse la confianza de Alex. Muy por contrario a lo que ambos creían, aquella acción no había hecho más que anotarle puntos a favor.

Solo debía ser lo suficientemente cuidadoso e inteligente para saber conservarlos.