Narra Amette:
-¿Podemos descansar?-pregunte jadeando
-Aun nos falta mucho, preciosa-dijo sonrriendo
Llevabamos más de 8 horas seguidas corriendo, brincando y lanzandonos golpes con desesperación. Jace era todo un profesional, y por más qué me esforzara no podia superarlo...
-Vamos, tu puedes, Amette-me animó IA
Después de haber encontrado a IO & IA, fui corriendo a Ryan y este me explicó qué de niños, en nuestro cumpleaños, papá nos habia dado a los muñecos; IO pertenecía a Ryan y IA me pertenecía a mi.
Sin embargó, sus esfuerzos por animarme, eran absurdos. Mañana sería el duelo contra Ryan por el trono. No sé cuantas veces he ido contra el consejo y les he pedido qué recapaciten sobre esto, más siempre se niegan.
-Estoy cansada-murmure mientras caia de rodillas al suelo
-...¿Estas bien?...-preguntó Jace incado frente a mi
-Necesito...descansar-susurre con la mano en mi pecho, me dolia un chingó y me faltaba aire
-Sobrepasasté tu limite, vale, vayamos a dentro-me cargó en sus brazos como si fuera algún tipo de princesa...Oh, esperen... ¡Soy una princesa!
-Estoy bien, puedo yo sola-balbucee y me removí en sus brazos para hacer qué me soltara
-Estaté quieta, estaremos allá en unos minutos-me apretó contra el y noté qué IA estaba sobre su hombró
Corrio tan rapido qué el viento golpeaba bruscamente contra mi cuerpo. Me aferrába a su pecho por temor a caerme, en cualquier momento, de narices contra el suelo. En unos minutos estabamos de pie frente al enorme edificio qué era mi hogar.
-¿Como estas?-me preguntó con voz ronca y gravé
-Tengo frio-musité
-Claro, soy un vampiro, no puedo darte calor-murmuro como si se estuviera reprimiendo a si mismo
-Te equivocas-murmure
-¿Qué dices?-me miró y detuvo el paso
-Contigo, siento una calidez aquí-señale mi pecho y me deje caer dormida en sus brazos
Narra Jace:
¿Qué quizo decir con eso?. Cuando quicé preguntarle, me dí cuenta de qué estaba profundamente dormida...
-¿Señor Gordón, esta bien?-preguntó el monito rosado que estaba sentado en mi hombró
-Estoy...enamorado-musité con una sonrrisa estupida en la cara
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Me enamoré de un vampiro
RomanceAmette se había levantado tarde para ir al instituto. Su vida era relativamente normal, no tenía nada interesante que presumir a la sociedad. Sin embargo, ese día cambiaría todo a su al rededor gracias al misterioso chico que aparece de la nada. Una...