𝐎𝐍𝐄 𝐒𝐇𝐎𝐓𝐒 ||ESDLA & El HOBBIT||

27- |Random|

Acababa de llegar a Rivendel. Me quedé unos momentos mirando alrededor, pues lo que se hablaba de él no hacía justicia para un lugar tan hermoso.

Me distraje cuando un elfo más joven que el resto bajó las escaleras y habló con Gandalf. Me mantuve al lado de Bilbo mientras los demás cuchicheaban cosas negativas.

Unos minutos después comenzaron a llegar más elfos de fuera, junto con ellos Lord Elrond, del cual también había escuchado hablar a Gandalf pero no conocía en persona.

Los demás se pusieron a la defensiva, por lo que rodé los ojos y me fui al lado de Gandalf.

Al final, Lord Elrond nos invitó a comer. Acepté con gusto, ciertamente moría de hambre.

No lograba entender el conflicto entre elfos y enanos. Si han sido tan amables, siempre que preguntaba, nadie me respondía.

Pasé al comedor y me senté con el resto de la compañía al lado de Kili, pues Gandalf y Thorin comerían en la mesa de Lord Elrond.

Todos se quejaban de comer puras verduras, mientras yo estaba encantada y agradecida por comer algo.

-¿Puedes pasarme ese tazón, por favor? -dije a Kili, pero este pareció no escucharme. Miraba fijo en una dirección, decidí mirar también para ver lo que veía. Detuve mi vista en la hermosa elfa que tocaba el arpa. Era sin duda hermosa, pero no para menospreciarme a mí misma. Si bien era humana, me consideraba atractiva.

Solte una risa cuando Dwalin se le quedó mirando hasta que Kili reaccionó.

-No me gustan las mujeres elfas -dijo negando-. Son delgadas, tienen los pómulos marcados y la piel blanca, les falta bello facial -se detuvo un instante-. Aunque, esta no está mal -dijo señalando con la cabeza a un joven elfo que tocaba un arpa pequeña.

-Eso no es una elfa -le dijo Dwalin, y no pude evitar soltar una carcajada al igual que el resto.

Los demás seguían riéndose de Kili, quien se moría de la pena, pero yo seguí viendo a aquel bello elfo tocar.

Tan atractivo, sus ojos verdes lograban atraparme. Para mi desgracia, me atrapó mirándolo, a lo que me sonrió. Un sonrojo apareció en mis mejillas. Definitivamente, después de acabar con la misión, regresaría a Rivendel para ver a ese bello elfo.