CAPÍTULO 30

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Eran alrededor de las 2 a

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Eran alrededor de las 2 a.m. y todos seguían en la sala de espera, aguardando noticias de HyunAh, Vante estaba recargado en JungKook, quien lo abrazaba dándole consuelo, HwaSa trataba de hacer lo mismo con HyoJong, pero parecía no funcionar, el sólo estaba con la mirada perdida, sujetando la mano de Hugo fuertemente, estaba aguantando las ganas de no romperse, tenía que ser fuerte por su esposa.

Familiares de HyunAh Volcaba – un médico salió del pasillo que llevaba a la sala de Urgencia.

Somos nosotros – Vante se levantó seguido de los demás.

¿Usted es...?

Soy su amigo y él es su esposo – Vante explicó tan rápido como pudo – Sólo seré su traductor.

— Ella y el feto están estables, apenas tiene 3 semanas, por lo que este incidente lo vuelve un embarazo de mediano riesgo – explicó sorprendiendo a todos que hablara en inglés

— ¿Puedo verla? – HyoJong quería correr y admirarla, la necesitaba con todo su ser.

— Seguro, sólo no la presionen, parece estar en shock aún – el médico le indicó el número de habitación.

HyunAh no era la única en shock, todos lo estaban, nadie esperaba que esto pasara, las palabras sobraban en esta situación, ¿Que se podía decir ante la situación?, era tan sorpresivo y repentino.

— Entra, te necesita – lo animó Hugo al ver dudar a HyoJong entrar – Nosotros te esperaremos aquí afuera.

— No me siento listo – apenas susurro, Vante pudo notar que le temblaban las manos así que las tomó para darle fuerza.

— Entonces entraré yo – dijo Hugo para que HyunAh no estuviera sola más tiempo.

El chico sin dudar entró y cerró la puerta con cuidado, la chica estaba acostada en la camilla, boca arriba y con las manos tomadas sobre su estómago, sino fuera por el movimiento de su pecho al respirar parecería que estaba muerta, incluso parecía no parpadear.

— Tu si sabes cómo dar sustos - Hugo se acercó con movimientos lentos y suaves para no exaltarla.

— Lo siento – la voz de Hyuna sonó ahogada como si resistiera el llanto.

— No te disculpes – él se acercó a la camilla e hizo a un lado con cuidado a la chica para subirse y acostarse con ella y abrazarla un poco.

— Sólo tú te subes a la camilla de un enfermo - bromeó ella acercándose más a Hugo, los abrazos de él eran mágicos, no sabía porque, pero eran capaces de quitarte la tristeza, el estrés y el enojo, dejándole una sensación cálida en el alma, era de esos abrazos que duran todo lo que necesitas.

— No estas enferma, sólo embarazada – aclaró él, haciendo tensar a HyunAh.

— No sé si quiero estarlo - susurro apurando la mirada de él, con vergüenza.

Escapando del mundo //KV//Where stories live. Discover now