Capítulo #4

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Marinette miró la revista que Alya dejó caer sobre la mesa.

Ella finalmente tenía algo de tiempo libre para disfrutar de una buena taza de café con mejor amiga Alya, estaban en su lugar favorito, Coutume Café. Marinette sabía que Alya estaba ocupada viajando por el mundo con Nino, pero su llamada inesperada en la mañana no evitar preocuparla .

Tenía que ser importante, ¿verdad?

Marinette dejó su taza y levantó la revista, su rostro se torció ante la imagen de Adrien, medio desnudo y enredado con una extraña.

Sus labios estaban casi juntos y él la abrazaba con tanta fuerza que sus pechos bronceados casi subieron sobre las grietas de su pecho.

—-Esto está en todas las portadas de Italia—Alya suspiró. —Literalmente en todas partes ...—

Marinette sintió que su corazón se aceleraba. No pudo evitar sentir celos por esa mujer desconocida que estaba abrazando su prometido en la foto.

Pero se sentía tan tonta ...

Esto era solo parte de su trabajo. Sabía que era suyo, pero siempre existía la duda de que alguien siempre podría apartarlo de ella.

Cuanto más pensaba en ello, más tonta se sentía.

Llevaba su anillo de compromiso. Ella llevó a su hijo durante nueve meses y él los cuidó lo suficiente como para dar a luz a su hijo, por el amor de Dios, el rostro del rubio había estado enterrado entre sus muslos hace unas noches.

La pelinegra se aclaró la garganta y se enderezó.

Por supuesto, ella solo estaba siendo una tonta.

—¿Es esto por lo que me llamaste? Pensé que esto era una emergencia— Marinette se rió entre dientes, mirando a su amiga.

Alya se burló y se dejó caer en su asiento.

—¡Por supuesto que esto es una emergencia! ¿No notas nada raro en la chica? ¡Mira! ¡Mírala!— dijo Alya casi ofendida, agarrando la revista y casi empujándola en la cara de su amiga .

Marinette le arrebató la revista y se obligó a mirar la foto más a detalle.

Realmente ya no quería mirar esa maldita foto.

—¿Qué? ¿Que tiene unos senos enormes?—Preguntó, volviendo a mirar a Alya y arrojando la revista sobre la mesa.

Alya puso los ojos en blanco.

—Aparte de sus enormes implantes ... si miras más de cerca su rostro, te darás cuenta de que es¡ Lila!—

Marinette inmediatamente se tensó con ese nombre, e inmediatamente tomó la revista, ahora mirando su rostro de cerca.

Mierda...

—¿Lila?—

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Marinette nunca se sintió tan preocupada por el tamaño de sus senos. Tan loco como sonaba, no podía quitarse de la cabeza la imagen de los gigantescos senos de Lila.

Ella suspiró, sintiéndose mucho más cohibida que nunca. Como su alter Ego, a ella nunca le importó realmente cómo se veía con su súper traje, pero ahora ...

El material se aferrerraba a sus pequeños senos  y ahora los notaba más pequeños que nunca. Ella pensó que los senos se agrandaban durante el embarazo, lo cual era cierto ... pero luego perdían firmesa y regresaban a su tamaño normal.

Ella se estaba gritando internamente.

Todo esto era demasiado estúpido.

Ladybug mantuvo sus ojos fijos en la valla publicitaria de su prometido abrazando a una descarada bronceada de exuberante pecho.

Corazones Heridos Where stories live. Discover now