en mis venas; trueno

07

DAFNE

❁══════❁

— ¡Daf, ya ha llegado el coche que estabas esperando! — grita Jordina desde el piso inferior.

Bajo las escaleras poniéndome las deportivas.

— ¿Cómo estoy?

— Presentable — me mira de arriba abajo.

— Me vale, adiós — digo entre risas.

Salgo y efectivamente hay un coche parado al lado de la acera, me encamino hacia el y alguien me abre la puerta desde dentro.

Entro, me siento y tres pares de ojos me miran fijamente.

— Hola — saludo.

¿Por qué me miran así?

— Hola, estás hermosa — responde Mateo.

— Gracias. Hola, soy Dafne.

Estiro la mano para saludar al que supongo que es el padre de Mateo.

— ¿Qué tal? Yo soy Pedro.

— Bien, encantada — nos damos una especie de apretón de manos.

— Daf, esta es Angie.

He reparado en ella, no me ha quitado la vista de encima desde que entré.

— ¡Hola! ¿Cómo estás? Me he enterado de que eres de España, ¡yo también!

Joder, cuanta energía tiene esta chica.

— ¡Qué bien! — exclamo fingiendo ilusión.

— Es una amiga de la familia y está de visita — explica Mateo.

— Bueno ahora que nos conocemos todos, vámonos — ordena Pedro al chófer.

٭٭٭

Durante el viaje estoy con el móvil ya que hablan de anécdotas que obviamente desconozco.

Manuuuu

no te preocupes, ya iremos a
verla otro día

lo siento de verdad, la próxima
invito yo

— Daf ya hemos llegado — tengo la puerta abierta ante mi.

Bajo y me quedo muda al ver la cantidad de personas que hay alrededor.

— ¿Todas estas personas vienen solo para ver tu cara de mierda? — pregunto de broma.

— Eso parece — responde entre carcajadas.

Entramos por la puerta de atrás, Pedro y Mateo se van al meet and greet y Angie y yo somos guiadas hasta un palco VIP.

— ¡Estoy tan emocionada!

Esta chica me empieza a irritar.

— ¿De qué parte de España eres? — pregunto intentando parecer interesada.

— De Madrid, estoy aquí de visita — dice mientras saca su móvil.

— ¿De qué conoces a Mateo?

La estoy acribillando a preguntas.

— Por mi padre que a su vez conoce a Pedro — responde mientras se hace unas fotos.

— Ah.

— ¿Y tú? — cuestiona ahora ella.

— Del instituto.

— Oh, sí. Una pena que todavía vaya al instituto.

La miro extrañada, voy a preguntarle por qué dice eso cuando la sala se llena de aplausos, Mateo y Pedro ya están en el escenario por lo que me olvido de Angie y trato de disfrutar.

Hora y media después de concierto, tengo una sonrisa de oreja a oreja en la cara.

— ¿Te ha gustado? — me pregunta mientras nos dirigimos al coche.

— Me ha encantado, no sabía que cantabas tan bien.

— ¡A mi también me ha gustado! — añade Angie desde atrás.

— Me alegro — responde Mateo.

— ¡Todos adentro! — exclama Pedro.

Durante el viaje Mateo nos cuenta qué le han regalado en el meet and greet, se le ve emocionado y eso me encanta.

Veinte minutos después llegamos a la puerta de mi casa y salgo cuando Mateo se ofrece a acompañarme a la puerta.

— Espero que te lo hayas pasado bien — dice mirándome a los ojos.

— Sí, gracias.

Nos quedamos callados unos instantes.

— Bueno, voy entrando — señalo la puerta.

Sin esperarlo me agarra del brazo haciendo que gire y me da un beso.

En la boca.

Un beso en la boca.

Me quedo ahí quieta asombrada totalmente.

— Adiós Dafne — se despide con esa jodida sonrisa mientras se va al coche.

— Adiós Mateo — digo cuando el coche arranca.