25

2.9K 143 4
                                    

DAFNE

❁══════❁

Esta mañana no había ido al instituto por lo mal que me encontraba, tengo que dejar de sobrepasar mis límites.

Estoy con el móvil cuando mi hermana entra a la habitación.

— Hola.

— Hola peque, ¿qué tal? — pregunto sentándome en la cama.

— Bien, tú no tienes buena cara.

— Estoy un poco revuelta pero ya se me pasará, ¿cómo han ido las clases?

— Como siempre — se queda callada. — Oye Daf...

— Dime.

— Papá esta algo raro.

— ¿Cómo raro? — cuestiono extrañada.

— Le pasa algo, lo sé.

— Ven — hago un hueco en la cama. — No te preocupes, seguro que no es nada.

Asiente y la abrazo para consolarla.

Por la tarde Sara viene a visitarme.

Conocerla es lo mejor que me pudo pasar, llevo en Argentina alrededor de tres meses y no he conseguido tener ninguna amiga hasta que la conocí.

— Chica, que cara me llevas.

— Estoy fatal — comento entre risas.

Entra y se sienta en la silla del escritorio.

— ¿No has ido a clase?

— No me podía presentar con unas gafas de sol y la taza de manzanilla.

Mi amiga larga una risita y yo sonrío.

— ¿Quieres? — me ofrece un cigarro.

— Ni se te ocurra fumar aquí.

— Que sosa — guarda la cajetilla y saca el teléfono en cuanto le llega un mensaje.

— Es Dani, quiere quedar — levanta la vista de la pantalla y me mira.

— Dile que sí.

— ¿No te molesta?

Frunzo el ceño para luego negar con la cabeza.

— Sara, solo nos liamos aquella vez y te recuerdo que iba borracha.

— ¿Y cómo vas con Mateo?

— Ni yo lo sé, supongo que bien en plan conocidos.

— ¿Quieres volver con él?

— Nunca quise que rompiéramos, no debo ser yo la que pida volver — me mira sorprendida. — ¿Qué?

— Que huevos tienes — sonríe.

— ¿Perdón? — me contagia su sonrisa.

— Te besaste con tu ex tía, ya te vale.

— No, me besó él.

Ese detalle me recuerda a la foto que le mandaron a Mateo.

— Eso dices tú... — la miro con los ojos entrecerrados. — Es broma, ojalá volváis.

Ojalá.

— Ve a disfrutar de tu cita y déjame.

Me lanza un beso acompañado de un te quiero y se va.

MATEO

❁══════❁

— Decidido, El Rey León — habla Melissa sacándome del trance.

— Perfecto.

Vamos a la taquilla y nos cruzamos con Sara y Dani.

— Anda, hola — saluda la primera.

— ¿Tarde de citas o qué? — pregunta Dani.

— Eso parece — responde Melissa riéndose.

— Pues que disfrutéis — dice de nuevo Dani pasando por nuestro lado.

Compramos las entradas y las palomitas, después entramos a la sala.

No le presto mucha atención a la película, primero porque estoy nervioso por el momento que se avecina y segundo porque no me van las películas de ese tipo.

Una hora y cincuenta minutos después salimos del cine.

— Me ha encantado, gracias — me da otro beso.

— Vamos, te acompaño a casa.

Durante el trayecto ella comenta la película y yo me limito a asentir, cuando llegamos a su casa no puedo aguantar más.

— Melissa, tenemos que hablar — comienzo.

— ¿Qué pasa?

Dilo sin ningún tipo de filtro.

— Sigo enamorado de Dafne, lo siento — se queda en silencio.

— Lo sé, solo hay que ver como te pones cuando está cerca — me mira durante un rato largo. — No quiero ser la otra.

— No quiero que haya otra — contraataco.

Me da un beso, esta vez en la mejilla y hace el amago de abrir la puerta.

— ¿Llegaste a sentir algo por mi? — pregunta girándose.

— No me dio tiempo.

Asiente con una mueca triste y ahora sí, entra a su casa.

Observo la madera oscura unos segundos.

Lo único que me queda es recuperar a Dafne y lo voy a conseguir cueste lo que cueste.

en mis venas; truenoWhere stories live. Discover now