Capítulo 11

604 54 13
                                    

Dedicado a:
@cuchycopy
Feliz cumpleaños, personita 💕

Vegeta.

Trato de limpiarme el aroma de la mora.

—Por eso te pedimos más tiempo —dice dando fin a su argumento del porque necesitan mas tiempo para sistematizar mis hoteles.

《No soy un tipo fácil y quiero verla rogar》

—Hay un contrato ¿sabes perfectamente lo que pasará si no terminan en el tiempo acordado, cierto? —traga duro ante mis palabras.

Su mirada se desvía y me concentro en su pequeño y blanco cuello. Como deseo morderlo y marcarlo.

—Vegeta, tienes que entender que…

—No, tu entiende que no siempre vas a obtener lo que quieres con palabras —la interrumpo.

Su nerviosismo se transforma es dignación.

—Bien —se levanta y comienza a caminar hacia la puerta.

《¿No me va a rogar?》

—Puedes iniciar la demanda, tomaremos todas nuestras cosas y nos iremos, dile a tu abogado que me haga llegar la estipulación del tiempo en que tengo que pagarte —toma la perilla pero rápido la alcanzo.

Envuelvo mi mano en su carrera volteándola hacia mi y acorralándola contra la puerta.

—Ve…Vegeta.

—Sht —pongo mi dedo índice sobre sus rosado labios para que se calle— eres mi esposa y debes actuar como tal —la tentación me gana y dirijo mi boca a su cuello chupándolo— debes de doblegarme porque de otra forma no entiendo.

Se retuerce bajo mi agarre pero soy firme para que no escape. Su sabor ¡es tan deliciosa!

—¡Muévete! —me exige tratando de empujarme pero soy más rápido y tomo sus muñecas colocándolas sobre su nuca— ¡estas ebrio!

Levanto la cabeza de su cuello encarándola, sus pupilas están dilatadas dejando solo un poco su color azul, mis ojos bajan a su boca semi abierta.

—No lo puedes negar, Bulma —hablo de forma lenta— me deseas.

—Eso no es cierto —trata de sonar segura pero sé que no es así.

—Puedes decir lo que quieras pero tu cuerpo no, tan solo mira como reacciona ante un solo toque mío —paseo mi mano por su costado llegando al borde de su seno al mismo tiempo en que pego mi erección a su vientre sacándole un gemido— mira —ordeno, su mirada baja viendo lo mismo que yo.

Me apodero por completo a su pecho y froto mi cadera contra la suya, su cuerpo es tan perceptible y se mueve por sí solo.

—Solo es la calentura —trata de convencerme.

—No todos logran hacer lo que yo —me apodero de su boca con un beso brusco, cargado de ganas.

Estrujo su pecho con una mano mientras que con la otra coloco su pierna a tras de mi acariciándole las nalgas. La erección crece en mi pantalón, su mano me desabrocha la playera tocando mi torso, se aleja de mi y complementa mi cuerpo, me gusta que me desee.

𝑳𝒂 𝑫𝒂𝒎𝒂 𝑫𝒆 𝑳𝒂 𝑴𝒂𝒇𝒊𝒂 ✔Where stories live. Discover now