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Candela Montalbetti// 11 de marzo de 2023

Lunes, la tortura de inicio de semana llegó. Hoy tengo mil cosas para hacer, dudo mucho que las horas del día alcancen.

Terminé mi desayuno, recién son las seis de la mañana. Es muy temprano, demasiado diría yo.

Este fin de semana fue extraño, comenzando con el viernes por la noche con ese jugador insoportable.

Hace unos cuantos meses comenzó a ir al bar en el cual trabajo algunas noches, mucha atención no le di, no suelo seguir fútbol que no sea de España o Argentina, es decir que no miro nada que tenga que ver con el francés, no me llama la atención en lo más mínimo.

Pero a él lo conozco, juega en la selección Argentina y fue tapa de revista cuando su flamante matrimonio llegó a su fin.

Déjenme decir que no estoy sorprendida, cualquiera con dos dedos de frente sabe que pasó en esa relación que tenía como diez años.

La engañó, y fueron reiteradas veces. No logro entender como ella no lo dejo en el primer momento. Esos hombres me dan asco, me generan tanta molestia.

Creen que sólo por jugar atrás de una pelota pueden hacer lo que quieran, me parece horrible y creo que la mejor decisión que tomó esa mujer fue separarse.

Paredes es atractivo, debo admitir que sus ojos son hermosos, pero su apariencia es opacada a causa de ese largo historial de infidelidades.

El sonido de mi celular me sacó de mis pensamiento, un mensaje de un amigo me saca un sonrisa.

Busqué mis llaves, mi auto ahora está en el mecánico. El sábado quedé con el corazón en la boca pensando en las posibilidades de que puedan robarme el auto.

Con mi bolso en la mano, y mis cosas dejé el departamento. No hay ni un alma, mejor así, no quiero cruzarme con nadie y mucho menos con el jugador.

Cerré lo más despacio posible y puse llave.

¿No es muy temprano para salir? - una voz hizo que me sobre salte y gire de inmediato sobre mis talones-

Hablé demasiado rápido, esta en el pasillo junto a sus hijos.

Lo miré con una ceja alzada, y sin decir alguna palabra me apresure para llegar al ascensor.

Al menos podes decir buen día, desubicada - su comentario me desconcertó, moví la cabeza en su dirección-

Buen día Paredes - saludé y presione el botón del ascensor- buen día chicos

Él, junto a sus dos se quedaron detrás de mí. Admito que su presencia me molesta y me pone algo nerviosa, pero más molesta. Se piensa que no se cuando me mira en el bar.

Las puertas del ascensor se abrieron, entré y me quedé a un costado.

Sus hijos entraron y el me guiño un ojo antes de apretar el botón.

Ah bueno, son las seis de la mañana recién. Peor que un chico de sexto año.

Rodé los ojos y agarré mi celular, mi amigo me espera en la puerta del edificio.

Justo me llega un audio y presione para escucharlo. "Amor apurate que llego tarde"

Se escuchó en altavoz, quizás mentí un poco al decir que es solo un amigo. Yo lo veo de esa forma, estuvimos muchas veces juntos y no lo veo de otra forma, por el momento disfruto de mi vida sexual y quiero que siga así durante un tiempo largo.

La mandíbula del jugador se marca y hace un gesto con sus labios.

Ignore eso y respondí rápidamente el mensaje.

Rumors | Leandro Paredes Where stories live. Discover now