Imposible Olvidarte (1° SAP)

Capítulo 10.

Imposible olvidarme de ella, más al estar lejos suyo, pero unos pequeños problemas me vió obligado a volver a Rusia a resolver todo. Había cuestiones que Gauss solo no podía y conllevaba que me haga presentes en esos negocios, sobre todo cuando se debía poner en orden a unos pequeños rebeldes que supuestamente querían atentar con el dominio de mi familia. La Bratvá lleva años siendo manejada por un Sokolov y eso seguirá de por vida, nuestra familia es la única que puede portar al heredero, además desde nuestro reinado se ha modificado muchas cosas, la gente piensa que la mafia solo se basa en el narcotráfico, prostitución y trata de blancas e infinidades de cosas más que se siguen haciendo, pero en Europa. Rusia tenía otros principios, además no por algo somos los mejores, nuestros negocios van más allá de todo eso, somos muy pocos lo que hicimos los cambios, los principiantes solo viven de esas bajezas.

Dos semanas me tardó volver a este país, solo estaba en esta ciudad por un solo propósito, todos ya sabían cuál era. Tan solo entrar en mi habitación, me hace pensar en ella y hacía que mi pene se despierte queriendo poseerla mil veces si fuera posible, pero no la tenía a mi lado para seguir cumpliendo mis fantasías y eso no me gustaba para nada, ella es mi mujer, mi reina, solo mía. Alexia tiene que estar en esta casa conmigo como siempre tuvo que hacer, ahora debía tratar de buscar la forma correcta de unir de una vez su vida a la mía, ambos debemos ir a ocupar nuestro puesto en la organización, en Rusia será imposible tocarla, acá en Chicago debía tener todos los ojos encima, más con muchos enemigos queriendo atacar a la porción más débil y esa mujer es mi debilidad.

— Antonily — llamo a mi jefe de seguridad mientras bajo al salón principal.

— Señor — aparece en el gran salón.

— Duplicaremos la seguridad para mí reina y sobre Sasha — ordeno tecleando en mi celular tratando de que mi primo quede conmigo para conversar. Tenemos muchos puntos que hablar, incluído con Natasha, que todavía seguía en mi casa.

— El señorito Sasha no nos quiere cerca suyo — me recuerda.

— Eres el jefe de seguridad de la familia así que busca la solución, no dejaremos a Sasha sin protección porque estoy seguro que cuando sepan quién es, querrán ir detrás suyo — acoto chasquendo la lengua.

— Esta bien señor, buscaré la forma — acota.

— No te olvides de duplicar la gente de Alexia — repito haciendo contacto visual con él.

— Ahora mismo hablaré con Iván, necesito gente de confianza — declara agarrando su celular.

— ¿Se saben algo del paradero de Yurgo? — pregunto recordando que ese es mi problema principal, maté a su hija y estoy seguro que vendrá por mí queriendo tentar mi poder. Sabía que algo estaría tramando, tanto silencio solo genera desconfianza, pero se olvida quien soy y que siempre voy un paso delante de mis enemigo, cuando lo encuentre será su perdición porque a la basura se las trata como tal, así que no seremos piadosos ni con él y mucho menos con su gente.

— ¿Me estabas buscando? — escucho la voz de Natasha.

— A tí querida prima y a tú hermano — contesto leyendo el mensaje de Dmitri que si la conversación era urgente debimos acercamos al hospital donde trabajaba.

— ¿Sucede algo con Sasha? — inquiere con preocupación haciendo que la observé unos segundos, así y todo algo quiere a su hijo.

— Vamos al Med, Dmitri nos espera — ordeno haciendo que me siga.

Ella por lo menos me obedece y Antonily nos guía al auto, se que estás semanas no trató de comunicarse con su hijo, pero también después del tremendo posteó que Sasha hizo en su cuenta de Instagram, en referencia al día de las madres y subió una foto con Helena, sumado algunas palabras bonitas está claro que el adolescente digan lo que le digan su tía es más su mamá de lo que fue Natasha a lo largo de los años.