Home sweet home

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5 años después



El sol golpeaba sobre la ventana, el comienzo de un nuevo día se hacía evidente. Bufó abriendo perezosamente sus ojos. Miró su reloj y una gran sonrisa se dibujó en su rostro.
Volvió su vista a su lado, donde el hermoso hombre que amaba lo abrazaba de la cintura mientras seguía durmiendo ignorante del día que tenía su novio por delante.
Se levantó lentamente tratando de no despertar a su compañero. Entró en el baño y se dedicó a asearse, se vistió y bajó a preparar el desayuno.

-¿Y este milagro?- preguntó su novio viendo como se dedicaba a servir la comida.

-¡¡Estoy feliz, ansioso y excitado!!- comentó con una gran sonrisa.

-¿Todo eso es por mi?- indagó el muchacho dejando un dulce beso en sus labios.

-No, no es por ti. Esta vez no estoy emocionado por ti- respondió con gracia.

-Auch, mi corazón acaba de romperse- dijo tomándose el pecho y haciendo una mueca dramática.

Rodó los ojos y sonrió. 
-¿Sabes cuánto hace que espero este día?-

-¿Cinco años?- dijo con burla.

-Me alegra que lo recuerdes. Ahora debo irme, no quiero llegar tarde. Ah y no me esperes, creo que no vendré al menos por una semana, ya sabes debemos recuperar algo del tiempo perdido- informó mientras le daba un intenso beso a su novio.

-¿Vas a abandonarme una semana y encima por otro hombre?- el drama volvía a salir de sus labios.

Sonrieron cómplices los dos.

-No es cualquier hombre. Es el hombre de mi vida, y lo extrañé demasiado. Aún no puedo creer que en unas horas bajará del avión y volveré a abrazarlo como siempre lo hacia- respondió con brillo en sus ojos.

-Sé cuánto lo extrañaste y cuánto lo amas. Sabes que también lo adoro y me hace feliz saber que estarán juntos de nuevo. Solo portate bien y ven al menos un rato a tener sexo conmigo, ¿puede ser?- su risa se escuchó en todo el departamento.

-Eres un pervertido,  pero vendré a ocuparme de ti amorcito- gimió mientras le daba un tierno beso y se encaminaba a la puerta para salir de la casa que compartían.

-Tae, dile a Jimin que lo quiero y que lo extrañé y que iré a verlo en cuánto hayan pasado su tiempo de amigos- dijo Jungkook con una gran sonrisa despidiendo a su amado Taehyung.

Tae tenía todo organizado para la vuelta de su querido amigo. Había puesto en condiciones el departamento de Jimin,  había llevado comida y ropa. Habían decidido pasar una semana ellos dos solos, para volver a rememorar todos los años que llevaban de amistad y para que nadie los molestara. Incluso Kookie tenía prohibido aparecerse por allí.
A Seokjin le habían dicho que llegaría una semana después para que no quisiera ir esa semana con ellos. Necesitaban su reencuentro a solas, llorar y reír juntos sin nadie alrededor.

Taehyung estacionó en el aeropuerto,  cerró las puertas de su auto y entró al gran lugar. Caminó hasta las puertas de desembarco y se sentó en un banco a esperar el arribo del avión de su mejor amigo. Había llegado con más de una hora de anticipación, llevaba consigo una caja de chocolates, una botella de champaña y un girasol. Se dedicó a esperar hasta que por los altoparlantes la voz avisaba que estaba próximo a aterrizar el vuelo procedente de Estados Unidos.
Sus nervios eran cada vez más evidentes. Si bien hablaban constantemente y hacían videollamada  la realidad es que hacia cinco años que no se veían personalmente.

-Imagino que en alguno de tus bolsillos tienes una caja de terciopelo con un gran anillo y me pedirás matrimonio ¿verdad?- gritó mientras se apresuraba a llegar hasta el otro.

-Al menos traje chocolate- habló mientras su voz se quebraba de la emoción.

Corrió y lo apretó en un gran abrazo y ambos comenzaron a repartir besos en sus rostros mientras las lágrimas corrían por sus mejillas sin control.
La gente los miraba, algunos asombrados otros con cariño. Indudablemente se habían extrañado demasiado.

-Al fin estás aquí, no sabes cuanto te extrañé- las palabras salían junto con lágrimas y mocos.

-También te extrañé mi lindo Tae Tae- dijo abrazandolo e intentando sostener sus valijas para que no cayeran.

Subieron al auto de Taehyung, entre risas y charlas llegaron a su destino.
Jimin sonrió al ver su antiguo departamento, no había cambiado demasiado se notaba que Taehyung lo había hecho arreglar y eso lo puso contento.

-¿Cómo estuvo tu viaje?- preguntó mientras abría la botella y servía en dos copas

-Normal, cansador, las horas se hacen eternas allí arriba- gimió y se sentó en el sillón junto a su amigo.
-¿Cómo está Jungkook?- indagó sonriente.

-Celoso porque lo abandoné por ti- contestó sonriendo también.

-Ya debería darse por vencido y entender que eres mío y he vuelto a reclamarte- comentó haciendo largar una carcajada al otro.

-Lo sabe muy bien te aseguro, hasta quiere batirse a duelo contigo- bromeó

-Ah deberíamos hacerlo, así me dejará el camino libre de una vez por todas- dijo y se recostó en el lugar acomodando su cabeza sobre las piernas de Tae.

-Entonces ¿ si te quedas definitivamente?- cuestionó mordiéndose su labio inferior.

- Así es, no más Estados Unidos para mí, mi padre me pidió que me pusiera al frente de su empresa aquí en Corea. Él sabía muy bien que no había forma de que me quedara más tiempo allí, así que ambos llegamos a un acuerdo justo para los dos- le contó mientras sentía las manos de su amigo acariciando su cabello.

-¡¡Esa es una gran noticia!!- comentó con una gran sonrisa.

-¿Cómo han estado las cosas aquí?- preguntó mirando los ojos del otro

-Bien, normal, podría decirse. Kookie está esperando novedades de su nuevo trabajo, Seokjin al fin puso en marcha su restaurante, Namjoon comenzó a dar clases en una escuela, y yo, bueno ya sabes, me estoy acomodando a la vida de ser un artista. Pronto haré mi primer exposición, eso me tiene algo emocionado y estresado, pero voy bien- respondió sin dejar de acariciar los cabellos de su amigo.

-Me alegro que todo marche bien. La próxima semana debo presentarme en la empresa. Papá quiere que me haga cargo enseguida. No es que no confíe en su socio, solo quiere que me acostumbre porque quiere que sea yo quien la maneje- comentó

-¿Y su socio, está de acuerdo con eso?-

-Claro, él tiene un hijo y lo está ayudando, es compositor así que sabe del tema, la idea es que nos quedemos ambos al frente de P y M music, ya sabes quieren descansar- contestó para luego largar un suspiro. Estaba algo cansado y las caricias lo hacían relajar al punto de quedarse dormido.

-¿Por qué no aprovechas a dormir un poco mientras cocino, y luego me sigues contado- propuso Tae quien había notado el cansancio de su amigo.

-Está bien, pero dormiré aquí en el sillón, luego saldremos a pasear por Seul, extraño mucho todo eso- dijo mientras cerraba sus ojos y se acomodaba cayendo pronto en el sueño.

Luego de una rica comida, los amigos decidieron salir a caminar, pasearon por algunos lugares y recordaron anécdotas que vivieron. Estaban felices de volver a estar juntos después de tanto tiempo.

Jimin al fin estaba en casa, al fin estaba feliz otra vez.

Ámame Where stories live. Discover now