Capítulo 26

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(Alicia)

Abro la puerta principal al sonido del timbre. Un señor bastante mayor que al parecer es cartero, me entrega un sobre, firmo un papel y cojo el sobre. Me adentro al salón luego de haber cerrado la puerta. Miro hacia atrás y mis dos nuevas escoltas me observan sin mostrar expresión alguna en sus serios rostros. Abro el sobre y parece haber una carta...

´´Hola señor Max, recibimos el paquete, se lo que debe estar pensando de nosotros pero le aseguro que todo fue por el bien de Alicia y nuestro propio bien. Mi mujer está embarazada aunque Alicia aún no lo sabe, no podía permitir que el tal Alex cumpliera con sus amenazas. Muchas gracias por cuidar de mi hija, sé que estará en buenas manos y recibirá el tratamiento para su amnesia. Espero volver a ver a mi hija sana y salva algún día. Con el dinero que nos dio podemos montar una mejor empresa en este lugar, por favor cuídala, ella es nuestro tesoro´´

Mientras leo la carta mis ojos se llenan de lágrimas. ¡Cómo pudieron mis padres entregarme a un completo desconocido mafiosos por dinero!. Lloro desconsoladamente y de la rabia rompo la carta en pedacitos. Corro a mi habitación y me encierro. ¡Mi vida es una mierda!. Grito fuerte para desahogar mi rabia y comienzo a destrozar y tirar todo a mi paso, los frascos y todo sobre la cómoda, a destrozar con unas tijeras toda la ropa del clóset, lanzar por la ventana todos mis zapatos y ni siquiera me percato del dolor en mi pierna por la rabia.
A los pocos minutos tocan mi puerta y deduzco por las voces que los guardias, Nana, Romeo y Gema están casi tumbando mi puerta preocupados por todo el alboroto. Pero no hago caso a las llamadas. solo me acuesto y a los pocos minutos mis ojos se cierran.

Despierto en la tarde y puedo ver por mi ventana la nieve caer. El dolor en mi pierna ha disminuido y ya no se sienten los ruidos en la puerta. Me abrigo y salgo al pasillo, todo despejado menos por la presencia de mis guardias. Me dirijo a la cocina y al llegar, veo a Romeo conversar con Nana. Mientras me adentro en la cocina, me miran y guardan silencio. Solo me acerco sin decir una palabra y bebo algo de chocolate caliente. Con la misma rapidez que entré a pesar de estar medio coja, salí en dirección a la pantalla grande del salón a ver una peli romántica triste.

Después de unos minutos de un buen rato de estar viendo el Titanic por enésima vez, Romeo se sienta a mi lado y me observa detenidamente. Trato de no prestarle atención al peso de su mirada y seguir concentrada en la película pero se me hace difícil.

- ¿Y ahora que sucede? -dice refiriéndose a la peli
- Él la está dibujando, ella le pidió que lo hiciera pero desnuda. -digo incómoda por la situación. Apuesto lo que sea a que mis mejillas arden.
Romeo se sienta un poco más cerca de mí, y yo me alejo otro poco.
- ¿Eso es todo, el la dibuja, ella se viste y ya está? -dice en forma de protesta.
- No, ahora él le...le hace el amor, ella se lo pide -digo algo nerviosa.
Él vuelve a acercarse a mí y yo me alejo más.
- ¿Y ahora corren por? -pregunta irritante
- Huyen del guarda espaldas y perro fiel del tipo que se quiere casar con ella -contesto algo fastidiada. Las escenas de la peli comienzan a calentarse cuando se esconden en el carro.

Romeo se acerca mucho más y ya no queda más espacio para yo alejarme. Me mira fijo y sus manos comienzan a recorrer mi brazo algo descubierto. Se apega más a mi cuerpo con la intención de terminar lo que pretendía comenzar en aquel parque. No sé porqué me dejo si mi cuerpo pide a gritos que sea Max quién lo posea. Cierro mis ojos esperando lo que él quiere hacer pero cuando está a centímetros de mis labios...

- ¿Qué te parece si te ayudo a decorar la casa para navidad? -dice e inmediatamente abro mis ojos pudiendo sentir que estoy colorada de la vergüenza.
- Sí, claro -respiro luego de contestar a su pregunta sobre lo que le pedí hace unos días.

El tema del otro día que me hizo enojar tanto no se tocó en los últimos tres días. Mañana es noche buen, estaremos en víspera de navidad, Max no ha dado señales de vida, solo sé que permitió hacer una super fiesta con todos sus amigo y conocidos. Gema me compró ropa nueva, y no es mi estilo pero agradezco su esfuerzo. Nada me queda bien con esta pierna vendada.

Romeo me ayuda con los adornos del árbol.

- Espera un minuto, voy por más guirnaldas -me dice y sale del salón.

Bueno, hay que aprovechar el tiempo. Subo lentamente por la escalera para poner la estrella como siempre lo hacía de pequeña con mis padres. Aprovecho que los guardias no están cerca de mí ya que solo decoro el árbol y con los preparativos para la fiesta hay muchas personas rondando la casa y decorando. todo está quedando hermoso llenos de brillo, luces y toda la magia navideña.

Continuo subiendo con cuidado, llego a la punta y...
¡ya está!.
Cuando me devuelvo hacia atrás después de estirarme hacia delante para poner la estrella, la escalera comienza a tambalearse y mi pulso se acelera. No puedo mantener el equilibrio y caigo....

Mis amores, en verdad discúlpenme es q tuve problemas familiares y estuve muy liada en navidad. Pero aquí están los capítulos. Feliz Navidad para todos los q leen y si eres un nuevo lector del 2021 jjj. Los amo
🎄🎉😘

Vendida por Amor a primera vistaWo Geschichten leben. Entdecke jetzt