Vendida por Amor a primera vista

Capítulo 23

Sin que nadie se dé cuenta, de la nada Max aparece y le apunta con un arma al tipo que está solo a un lado...

- ¡Suéltenlos o él se muere! -amenaza - ¡Están rodeados!

Los tipos nos liberan y sin ninguna piedad Max le pega un tiro en las piernas a los dos y los guardias se los llevan. Max no me mira ni me habla, le informa a Romeo que su hermana está en el auto, que la lleve a casa. Sin decir más, me toma por la mano y me lleva casi a rastras a su auto con las miradas de todos los guardias incluyendo a Romeo. Arranca el auto y durante todo el camino no dice nada, solo reina un silencio incómodo. Sé que está furioso y temo a lo que pueda hacer en ese estado. Miro por la ventanilla del auto y me doy cuenta que vamos por una carretera desconocida. Cuando llegamos, me fijo que estamos en uno de los puntos más altos, se puede ver toda la ciudad y hace mucho frío que al parecer él no puede notar.
Me acerco y me quedo mirando la vista mientras el baja también del auto.

- ¿¡En qué rayos estabas pensando!? -me grita y me volteo hacia él viendo que se acerca hecho una furia.
- Yo no quería..... -trato de defenderme pero me interrumpe.
- ¡Pudieron haberte llevado con ellos Alicia, y Alex no te quiere solo para curarte la amnesia!, ¡Él es peligroso, tanto como yo y tú solo sabes desobedecer mis órdenes desde que me conoces! -grita - ¡Incluso cuando ni siquiera me recuerdas vas y me llevas la contraria! -se acerca más
- Lo siento no creí....
- ¿No creíste?, ¡claro que no, porque solo piensas en ti, no pensaste en que ponías en peligro a tus amigos, a tus propias guarda espaldas que se quedaron sin trabajo por descuidarte! -grita y mis ojos se llenan de lágrimas - ¡Deja de ser una niña mimada y terca, porque te prometo que si esto sucede otra vez, yo mismo te llevaré hasta Alex aunque te ame demasiado para que juegue contigo y consiga lo que quiere! -dice y se devuelve al auto dejándome ahí parada procesando todo lo que me dijo.

Lloro y cubro mi rostro con mis manos. Ese maldito dolor regresa. Pero esta vez no lo aguanto ni un minuto y caigo inmediatamente al suelo. Trato de no cerrar los ojos pero mi vista se va nublando y grito por el dolor, veo como Max me carga entre sus brazos, veo sus labios moverse pero no puedo escucharlo....
Despierto y miro a mi alrededor, estoy en una habitación de hospital. A mi lado está Max, trato de moverme y cuando me doy cuenta...

- ¡Aaa, mi pierna! -grito de  dolor despertando a Max
- ¿Alicia, qué sucede? -pregunta asustado, se ve tan lindo cuando está preocupado.
- Max mi pierna, me duele mucho que sucedió -lloro

Rápidamente busca al doctor, que me atiende y me examina. Luego de unas horas de dolor, ya tengo inmovilizada la pierna al tener una fractura en el cuello del fémur. Max puso vigilancia por todo el hospital.

- ¿Cómo te encuentras? -pregunta Max cruzándose de brazos recostado del marco de la puerta.
- Aún me duele un poco pero ya me siento mejor, gracias por preguntar. -contesto mientras juego con mis manos estando recostada en la cama.
- En la mañana debo irme, solo procura descansar esta noche y mañana te llevarán a casa.
- Espera, hay algo que no me has dicho -lo miro
- ¿Qué?
- ¿Cómo me sucedió esto? -pregunto
- Íbamos en el auto y el dolor de cabeza era tan fuerte que al parecer empezaste a delirar y querías escapar. Abriste la puerta y te lanzaste, pudiste haber muerto Alicia. -se acerca con cara de preocupación.
- Qué locura, la verdad es que no recuerdo nada de eso

Entra una enfermera y la muy perra mira a Max de arriba a abajo, se lo quiere comer con la mirada. Pero este ni la mira a pesar de que es consciente del efecto que causa su figura en las mujeres.

- Señor, su hermana debe descansar, aún está muy débil -dice la estúpida enfermera. Ni siquiera me parezco a él.
- De acuerdo enfermera, mi amada esposa sabe obedecer las reglas -sonríe u la chica se pone colorada de la vergüenza, yo sonrío observando la situación. Ella sale rápidamente y Max se sienta a mi lado.
- ¿Amada esposa? -sonrío y me sonrojo
- Te ves hermosa cuando te sonrojas -dice acercándose más a mi rostro.
Conozco sus intenciones, cuando nuestros labios están a punto de juntarse, viro mi rostro y el solo sonríe y niega con la cabeza.

Otro capítulo, voten y comenten mis amores, eso me hace muy feliz
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