Gilbert Blythe y Elizabeth Black, eran totalmente diferentes. Él sonreía, y ella hacía muecas. Él era amado por casi todos, ella era temida por casi todos.
Beth era muchas cosas, a decir verdad. Era bonita, inteligente, talentosa, algo rara, seria...
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𝔜𝔬𝔲 𝔴𝔦𝔩𝔩 𝔟𝔢 𝔞 𝔤𝔯𝔢𝔞𝔱 𝔡𝔬𝔠𝔱𝔬𝔯
Omnisciente
BETH ERA UNA NIÑA PRODIGIO. Con tan solo tres años, aprendió el alfabeto, las vocales y aprendió a leer. A los cinco, se dio cuenta de su don por si misma. A los seis, leyó todo el diccionario, y gracias a su memoria fotográfica, se lo sabia de memoria. A esa misma edad, corregía a los maestros en su escuela. A lo siete, cuando veía algún error en las tareas de sus hermanos mayores, ella se los corregía (no sin antes decirles lo estúpidos que eran). A esa misma edad, era capaz de patearle el trasero a cualquiera en el ajedrez, y había leído cada libro en la biblioteca de sus abuelos. Beth era extremadamente inteligente. Pero había cosas que no sabía, cosas que, a pesar de su memoria, había olvidado. Y era el como sentir ciertas cosas. Como el sentimiento de perder a alguien que quieres. La primera y última vez que lo sintió, fue con su abuelo. Ya había pasado mucho tiempo de aquello, y como su abuelo siempre estuvo con ella, nunca supo con exactitud lo que era perder a alguien. Beth, en general, no sabia cómo sentir. Así que, ciertamente, Beth no estaba preparada para lo que se avecinaba.
El doctor estaba en la casa de los Blythe, atendiendo a Mary.
—No entiendo. Algo se debe de poder hacer —le dijo Bash al Dr. Ward.
—Entiendo tu frustración... —dijo el doctor, intentando poner una mano en el hombro de Bash, pero el hombre retrocedió.
—Lo acompaño —le dijo Gilbert al doctor.
Ambos salieron de la casa.
—Una semana —le dijo el doctor a Gilbert—. Quizá dos.
Se despidieron, y Gilbert volvió a entrar a su casa. Bash tiro una taza, que, obviamente, se rompió.
—¿Bash? —dijo Mary, desde su habitación—. ¿Sebastian?
—Yo iré —le dijo Gilbert a su amigo.
Gilbert se dirigió a la habitación de Mary.
—Lo siento —le dijo—. Algo se cayó. Bash se esta ocupando.
—¿Me traduces? —Gilbert se paro al costado de la cama—. ¿El doctor dijo que tengo algo llamado septicemia? ¿Que es? ¿Como se cura?
—La septicemia es una infección —explicó Gilbert.
—Eso me temía —dijo Mary—. ¿Que hay de Bash, Delphine y tu? ¿Es contagiosa?
