Skin to Skin. ©YoonMin

❇CAPÍTULO 24

Es de conocimiento público que, en una pelea de perros, nadie debe meterse en medio.

Pero la duda llega a Yoongi cuando en vez de perros son dos omegas los que discuten. Dos omegas que discuten por él. Ningún manual te dice que hacer cuando eso pasa, ni tu padre alfa te explica sobre el tema.

Nadie está preparado para un suceso de estas proporciones, mucho menos cuando todo sucede así de rápido.

En un minuto está perdido en los ojitos de Jimin, luego este le dice algo y, abruptamente, unos labios llenos de brillo labial sabor cereza chocan contra los suyos. ¿Qué cojones?

Ni siquiera había visto a Jennie en todo el día, en una semana, de hecho. Y la chica lo primero que hace es intentar comerle la boca frente a medio campus.

FRENTE A JIMIN.

No pasaron ni dos segundos que un olor ya conocido por él inundó su espacio y al dirigir sus ojos hacia los del omega rubio, vio fuego explotar en su mirada.

El grito de Jimin no se hizo esperar, seguido por la ruda separación de los labios brillosos de la chica.

Jimin, uh no, no Jimin. Jimin ya no estaba. Frente a él, con ambas manos en el pelo de Jennie, estaba Minnie.
Ese pequeño ser que duerme dentro de Park, aquel con el que compartió su celo, al que mimó y cuidó hasta ayer en la tarde. La máxima expresión de su lado omega.  Aquella hermosa personita que se volvía una bolita bajo las mantas de la cama, ahora arrastraba a Jennie por los cabellos gritando que  "ese era Su Alfa".

Primera reacción de Yoongi, orgullo. Sí, era irracional, pero ver a su Minnie llamarlo su alfa frente a media universidad hacía que su alfa gruñera.

Segunda reacción, sorpresa. Minnie había demostrado ser coqueto, sensible y hasta vulgar en la cama, pero ahora mismo parecía una gallina cuando intentaban quitarle un pollito.

Todo el mundo estaba impactado, mirando la escena sin atreverse a irrumpir. Claro, aquello no impedía que grabaran todo. Dentro de unas horas el vídeo seguro sería viral. Dios, su primera aparición en un vídeo viral sería haciendo el ridículo en medio de una pelea de omegas.

Concéntrate, Yoongi.

La lógica le indicaba que tenía que separarlos, sobretodo a la pobre Jennie que no había podido acertar mas de un golpe. Y, joder debería estar preocupado por ella y no por el pequeño rasguño en la mejilla de Jimin, pero en cuanto vio góticas de sangre salir de allí corrió a sujetarlo lejos de la pelea.

—¡No! ¡Dejame, tengo que enseñarle! —gritó, sin parar de moverse en sus brazos. —Eres mio y ella tiene que respetar eso.

Yoongi apretó su agarre, abrazando a la inquieta fiera desde atrás. Un grupo de chicas, amigas de Jennie quizás, se acercaron a levantarla.

—Yoongi, ¿qué diablos le pasa a este? —chilló la omega, mientras intentaba acomodar su ropa de vuelta a su lugar — Te desapareces un montón de días, no llamas, ni vienes a clases. Y ahora este loco...

—¡Soy su puñetero destinado! —gritó Jimin, seguido por un murmullo colectivo —No vino porque era nuestro jodido celo.

Jennie jadeó, seguido del resto de las omegas que la rodeaban. Yoongi sabía que tenía que calmar a Minnie, ¿pero qué tan mal parada había dejado a la chica ya ? Por mas que se explicara con ella, ya había quedado como el imbécil infiel frente a todo mundo.

—Se la pasó conmigo y no precisamente hablando del colegio.

—Jimin, basta ya. —susurró tras él.