❇CAPÍTULO 3

22.3K 3.1K 2.1K
                                    

Esa noche habría cena en la casa de los Min y todo el vecindario lo sabía.

En primera porque la señora Min SeRa mandó a iluminar todo el jardín, y teniendo en cuenta las gigantescas medidas de dicho jardín era obvio que solo se iluminaba para actividades importantes. Porque los Min podrían ser ricos, pero igual ahorraban como pobres.

La segunda, e inconfundible, señal de que habría cena es que todo el barrio podía escuchar la discusión de Yoongi con su madre.

—¿Por qué me haces esto? ¿Acaso no he sido buen hijo? ¿No he cumplido con mis deberes para contigo?

La omega resopló y agitó la mano para quitar importancia.

—No entiendo porque eres tan dramático, Yoon. Solo es una cena. Además vendrá Jiminie.

—Ese es justo el problema.

—Pero si es tu amigo.

—Claro que no. Hoseok es mi amigo, Jimin es la maldición del Perla Negra para mi ¿Por qué no te das cuenta?

SeRa suspiro y rodó los ojos. A veces no lograba entender a su hijo. Ella sabía que el adorable jovencito y Yoongi habían tenido inconvenientes, pero también había notado que se sentía un aura diferente cuando los dos estaban cerca. Diferente bueno.

Como si hubiera algo magnético entre ambos, y eso no podría ser otra cosa que cariño. Estaba segura, que tarde o temprano, ellos terminarían llevándose bien.

—Pero Yoonie, mamá no puede retirar la invitación ahora ¿o si? ¿Dejarias a tu madre pasar esa vergüenza?

—No, mamá. —el joven alfa observó a su madre hacer un puchero —Pero no es la primera vez que te digo. No me agrada Jimin, es un bocón, y se cree superior a todos.

—¡Jiminnie es un alfita adorable!

—No es adorable y ni siquiera es un alfa, al menos todavía.

—Pero lo será. Sus padres y nosotros estamos seguro que tarde o temprano se presentará como alfa.

Yoongi rechistó —Mas bien tarde. El lobo del mocoso es casi la bella durmiente.

Una risita irónica interrumpió la conversación. Yoonji estaba recostada en la puerta de la habitación y ninguno tenía idea de que hacía para ser tan sigilosa.

—Cualquiera diría que estas ansioso por su presentación. Quizás tu lobo te esté indicando algo, little brother.

La sonrisa en la cara de la alfa era un poema. Claramente ella queria insistirle en el tema de un utópico Jimin omega.

—Tienes razón, me está indicando que cuando ese pollo se presente como alfa va a intentar quitarme a mi omega. Así que debo eliminarlo cuanto antes ¡Gracias hermanita!

Yoonji se palmeó la frente y miró a su hermano que sonreía.

—Riete ahora Yoongi-ssi, porque cuando Jimin se presente no tendras tiempo para nada.

—Deja de atormentar a tu hermano ¡mira lo amarillo que se puso!¿No te da vergüenza? ¡Eres mayor que él!

—No lo estoy atormentando madre, lo preparo. —sonrió la alfa. —Así como el preparará a Jiminnie.

El rostro de la omega se volvió furiosamente rojo y Yoongi sintió su rostro calentarse ante el pensamiento que pasó por él. ¿Preparar a Jimin? ¿Tocar su...?

«No es la primera vez que lo imaginas ¿verdad?»

Puede que Yoongi hubiera tenido un pensamiento extraño sobre Jimin en su primer celo. Puede que encontrar la chaqueta de este impregnada de su aroma tenue, pero dulce, en medio de su sala y que luego la llevara a su habitación, no fuera la mejor idea. Puede que, a partir de allí, se negara a pasar todo el celo solo, por el miedo a repetir dicha escena.

Skin to Skin. ©YoonMin Donde viven las historias. Descúbrelo ahora