Percy Jackson And The Princess

La Encrucijada Del Destino

Iroh y su sobrino estaban esperando en una de las casas del rey tierra, ya que habían recibido una invitación especial de su parte para servir el té.

Durante los días en los cuáles el equipo avatar le revelaba los secretos de la ciudad al rey y tomaban caminos separados, Zuko había sufrido de fiebre luego de haber salvado a Appa. Una vez recuperado estaba totalmente distinto, era una persona completamente nueva, finalmente había dejado de lado su deseo de capturar al avatar.

-"¿Por qué tarda tanto?". Preguntó algo impaciente, mientras su tío servía el té.

-"Tal vez el rey tierra se quedó dormido".

En respuesta, los Dai Li aparecieron en su campo de visión, unos delante de ellos y otros detrás.

-"Esto no me gusta". Murmuró Zuko cuándo se vieron totalmente rodeados.

Por la puerta, en lugar de aparecer el rey, lo hicieron la joven princesa de la nación del fuego y su guardaespaldas.

-"¿Crees que sea la hora del té Percy?". Le preguntó a su amigo, ignorando abiertamente a sus invitados.

-"¡Azula!". Gritó Zuko, y ambos maestros se levantaron, observando con ojos entrecerrados a la joven maestra, para después darle una mirada interrogante a Percy.

-"Oh, realmente me duele el qué me hayas ignorado Zuko. Creí que aún éramos amigos". Respondió el semidios con fingida sorpresa, una sonrisa en su rostro y diversión en su tono, cómo cuándo te encuentras bromeando con un viejo amigo.
Azula interrumpió cualquier réplica.

-"¿Ya conoces a los Dai Li? Son maestros tierra, pero tienen un instinto asesino más al estilo maestro fuego". Ladeó su cabeza de forma inocente, cómo si realmente fuera una sorpresa encontrarse con su hermano y tío allí mismo.

-"Me gusta mucho".

Iroh tomó la taza de té que había servido con anterioridad.

-"¿Alguna vez les conté por qué mi sobrenombre es el dragón del oeste?".

-"Oh, esto será bueno". Dijo Percy con mucho interés en saber finalmente él porqué de su famoso apodo. Azula lo detuvo con una mano, dirigiéndose hacía su tío.

-"No me interesan tus aburridas anécdotas, querido tío". Agregó, observando sus uñas de forma despreocupada.

-"Siempre me gustó tu entusiasmo querido Percy. Y en realidad, es una demostración, sobrina".
Bebió un trago del té caliente, mientras Zuko lo observaba de reojo, rápidamente Iroh lo colocó protectoramente detrás de él, para cuándo el aliento de fuego de Iroh atacó a los Dai Li.

Zuko destruyó una pared para escapar, mientras Iroh lo seguía sin dejar de soltar fuego por la boca.
Corrieron por el mismo pasillo que habían usado para entrar, mientras los Dai Li lanzaban sus manos de tierra, las cuáles chocaron con la pared al final del pasillo.

Percy en un principio había quedado ligeramente impresionado, y una vez que quiso ayudar, fue detenido por Azula.

-"No Percy, dejemos que ellos lo hagan. Veamos de lo que son capaces en realidad". Terminó con suspicacia, comenzando a caminar tranquilamente, Percy simplemente la siguió, con la imagen del truco de Iroh en su mente.

Zuko e Iroh avanzaban hacía un pasillo sin salida aparente, Iroh se adelantó y lanzó un rayo contra la pared, haciendo un agujero, desde el cuál se lanzó sin dudarlo ni por un segundo, cayendo sobre un arbusto con forma de animal.

Volteó la mirada hacía arriba, dónde Zuko aún estaba al borde del agujero.

-"¡Vamos! ¡Tienes que saltar!".