Día 57

648 104 25
                                    

ー hey

ー hi 

Un saludo que se volvía costumbre en ambos.

Me senté junto a el, entregándole un chocolate distinto a los anteriores, que había comprado para el. Aquellas sonrisas inconscientes y el brillar de sus ojos cuando comía chocolate me eran un deleite a la vista, llenándome de confort.

deja de mirarme asi ーdijo avergonzado desviando la mirada

ー sorry ーle respondí con una sonrisa

Me lo había pensado bastante, sin embargo, debía estar segura de lo que sentía, por lo que deje que pasara un poco de tiempo para confirmarlo y ayer, finalmente lo comprendí, estaba enamorada de ese chico con quien siento una gran conexión.

Lo había decidido, hoy seria el día en que le diría lo que siento por el, me confesaría, pues me parecía que era un buen momento y no por el echo del accidente, si no porque finalmente podíamos estar a solas y estaba segura que no nos molestarían o interrumpirían como siempre lo hacían, tan solo esperaba tener una respuesta positiva.

ー Popee ーllame su atenciónー hay algo que quiero decirte

¿qué cosa?

A pesar de que ya tenia planeado como y que palabras usar para expresarle lo que sentía, no había previsto que los nervios se apoderarían de mi en ese momento, traicionándome por completo, pues a pesar de tener ya un guion planeado, en ese momento lo había olvido.

lo estuve pensando por un buen tiempo y había esperado el momento correcto ーdije tartamudeando un poco, esperando no me haya mal entendido el traductor

Tome su mano para darme ánimos a mi misma y le mire directo a los ojos, cosa que me puso aun mas nerviosa, de verme en un espejo, sabía que seguramente seria fácilmente confundida con un tomate.

yo estoy e-----

Lo había dicho, en verdad había terminado aquella oración, pero el chico no entendió, gracias a que en aquel momento, la traducción se había quedado a medias, pues fue interrumpida por el vibrar acompañando del tono de llamada de mi celular.

Le maldecía desde lo mas profundo de mi alma.

Aquello en verdad me había molestado de sobremanera, pues había agarrado valor para decirlo y mis sentimientos no pudieron ser transmitidos en lo mas mínimo. 

Furiosa colgué sin siquiera responder ni mirar de quien se trataba, frunciendo el seño con enfado, regresando al traductor donde para mi mala suerte la traducción al no haber sido completada se descarto completamente pues esta no aparecía ni siquiera en el historial.

Volví a activar el micrófono para hablarle.

tu me gu----

De nuevo, otra llamada interrumpió. Mi teléfono comenzó a sonar sin indicios de querer detenerse, no me quedaba opción, debía responder. 

ー i'm sorry ーme disculpe

Por supuesto, el rubio no comprendió absolutamente nada de lo que había pasado.

Apenas conteste pegue un gran salto pues al otro lado del celular, se escucharon gritos.

ー ¡no me vuelvas a rechazar una llamada! 

Casi que grito mi madre, haciendo que apenas acercara el celular a mi oído, se escuchaba alterada.

ー ¿qué ocurre? ーpregunte sumamente preocupada

Muchas voces a la vez muy alteradas era lo unico que podía escuchar, nada certero.

Mi mente comenzó a divagar en tantos y tantos escenarios nada agradables. Mi rostro me delato con una expresion de espanto acompañada de preocupación, pues aquellas voces alteradas podía incluso escucharlas el chico a mi lado quien tambien comenzaba a preocuparse.

No obstante, mi madre hablaba tan rapido que no entendía en lo mas mínimo, temía lo peor.

ー no te estoy entendiendo, habla mas despacio ーle pedi con desesperación

De pronto, se pudieron escuchar sirenas como de una ambulancia muy intensas, dando a entender que estaban muy cerca de una.

ー ¿eso es una ambulancia lo que escucho?

Como respuesta obtuve un enorme quejido de dolor que me preocupo de sobremanera, poniéndome de pie como instinto. Me helo la sangre.

ー ¡¿qué esta pasando mamá?! ーsin respuestaー ¡mamá responde!

ー ¡¡voy a parir!! ーgrito Paola con gran rabia

ー ¡¿qué?!

Pregunte anonadada, pues aunque no estaba del todo informada dado que no indagaba mucho sobre el tema, tenía entendido que aun faltaba tiempo para que aquello sucediera.

ー vamos directo al hospital en una ambulancia ーhablo un poco mas calmadaー ya le llame a tu tío, pasara por ti y nos alcanzara despues

ー pero.. 

Hable en voz baja, mire hacía al rubio sin saber que hacer.

No es que no quisiera estar con ellos en ese momento tan importante, sin embargo yo tambien tenia una tarea importante que cumplir y era cuidar al ojiazul mientras su familia trabajaba, me encontraba en un dilema.

Supuse que por mi manera de actuar había comprendido la situación, por lo que simplemente me tomo de la mano, me miro fijo y asintió con la cabeza.

ー tu tío debe estar por llegar al circo, estate atenta

ー si mamá ーle respondí igualmente mas calmada

La llamada se termino y sin apartar la mirada del rubio, volvi a acercarme a el.

ー debo irme

No queria, pero debía y el lo sabía.

Simplemente le arrebate un beso como despedida, pues sabía que probablemente no regresaría ese día. Queria intensificar el beso, no cortarlo, pero simplemente no me quedo alternativa.

ー good luck ーme dijo

ー gomen ーme disculpe por tener que dejarlo tan abruptamente

De igual manera, me costo soltar aquel agarre de nuestras manos y con gran pesar, salí corriendo del sitio.

Apenas salí del circo ya se encontraba fuera mi tío, quien me esperaba con prisas. Tan rapido como nos fue posible llegamos al hospital, donde me encontre con mi madre quien me explico con detalle la situación, fue repentino y sucedió en un centro comercial, por eso la ambulancia.

Tan asustadas y apresuradas por llegar que apenas pudieron explicar lo que sucedia en la llamada, comprendiéndolo todo.

Algo que me pareció peculiar, es que mi tío se encontraba con nosotras y no en la sala de parto dándole apoyo emocional a Paola. Por supuesto cuestione por ello, teniendo como respuesta un:

ー en Japón no es común que el hombre entre a la sala de parto, por lo general solo se ingresa a la embarazada y nada mas

Un dato sumamente curioso.

Tardo bastante, pero finalmente pudimos ingresar al sitio para ver a mi tía.

Su parto se había adelanto, pues estaba previsto para suceder en dos semanas, sin embargo termino siendo el día de hoy.

Estábamos dichosos, no sabía exactamente como explicar aquel sentimiento de conocer por fin a mi primo, era tan hermoso y se veía tan adorable, lo mas tierno que había visto en mi vida. Los cuatro gozábamos de alegría, sobre todo Paola quien incluso lloro de la emoción, pero...

Aun a pesar de la felicidad y el entusiasmo que sentía en esos momentos, por dentro me maldecía que aquello hubiese sucedido así de repentino, pues me había preparado para finalmente declararme al rubio. 

Simplemente suspire rendida, aceptando lo sucedido y tomándolo como una señal de que no era el momento adecuado para hacerlo. 

LoveCircus | [PopeexReader]Tahanan ng mga kuwento. Tumuklas ngayon