X. El demonio más poderoso

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Época moderna

Montañas de Rebún

—Veo que te has dignado en aparecer Sesshoumaru. ¡Fheh!, jamás tendrás el honor de tener a Tessaiga, no tendrás el placer de portarla porque padre me la heredó a mí — se mofaba Inuyasha del poderoso lord —si tanto la quieres ven por ella, jaja.

El poderoso demonio sólo se quedó estático analizando la situación, se posó al frente de aquel híbrido escuchando cada una de sus palabras, que su punto de vista no eran más que escoria. —Inuyasha, ¿crees que estoy interesado en aquella arma que portas?, este Sesshomaru siempre será más poderoso con o sin esa arma. No la necesito—.

—¡Vaya!, pero que hablador resultaste el día de hoy querido hermano. Dudo mucho que aún no tengas las ganas de poseerla, mi colmillo de acero siempre será tu mayor fracaso, jajaja— se burlaba el hanyou del Lord del Oeste. 

El lord sólo se limito a sonreír levemente de forma sarcástica, respondiendo a su medio —hermano, este demonio no está interesado, no tengo más que hablar contigo—  El lord siguió su camino. Internamente sentía una ligera preocupación por su acompañante, pero eso no le impidió continuar.

Más adelante apareció aquella escena donde habló por última vez con su padre —Sesshoumaru, ¿tienes algo que proteger?— el peliblancos sólo se limitó a asentir y a comentar —tengo algo que proteger y sin duda lo haré, seré más poderoso que tu padre— el viejo demonio sólo volteó y fijó su mirada en su primogénito, regalándole una cálida sonrisa; Sesshoumaru realmente no se inmutó, pero internamente se sentía feliz de poder volver a ver a su padre y sobre todo que este le regalara aquella sonrisa que tanto añoró de niño, dando por terminada aquella conversación. El poderoso general perro se transformó en su bestia aullando y alejándose de aquel lugar, perdiéndose así de la vista del poderoso Sesshoumaru.

El Lord continuó su camino, apareciendo en aquella escena donde intentó poseer a colmillo de acero como espectador y contempló cada escena que vivió; sin embargo de un momento a otro él se encontraba peleando contra sí mismo y a un lado su acompañante. Se sentía extraño, se dio cuenta que él estaba en el lugar de aquel híbrido en esa batalla, la mujer tenía en su posesión la espada que tanto añoró por un capricho y qué el en un ataque de rabia y odio por los humanos había dejado ácido en el lugar. El poderoso demonio sabía exactamente qué es lo que procedería después de eso, lo único que se limitó a hacer fue sacar a la mujer de los escombros, tomándola de las manos le quitó la espada y para proceder a lanzarle un costado de las costillas de su padre; acercó y cargó por la cintura a la azabache, se elevaron y él en un susurro dijo —te protegeré—. Sin percatarse en qué instante la mujer había desaparecido de sus brazos, esto último lo sorprendió demasiado, había recuperado su otro brazo y la joven se había transformado en una poderosa arma, colmillo explosivo, esa nueva espada que acompañaría aquella arma heredada por su padre, colmillo sagrado.

Momentos después aquel espejo se estrelló dando paso así a su hermano quien apareció de la nada comentando —Sesshoumaru, siempre te admiré y también te envidié,  sé que el odio entre los dos nunca cambiará del todo, pero eso no quita que seamos hermanos. Cuidaré y atesoraré esta espada que me fue heredada, por favor cuida de Kagome, no tengo a nadie más que a ti, confío plenamente en que serás el demonio más poderoso y que ella no correrá ningún riesgo estando a tu lado— el poderoso daiyoukai solo asintió con la cabeza dando por entendido que comprendía las palabras del hanyou.

Breves segundos después, apareció aquella imponente figura de una demonesa, que a los ojos del gran lord era bien conocida, era su progenitora, su madre, la diosa de los cielos, Irasue. Esta se plantó frente a los dos hermanos y hablo con voz firme —Veo que has logrado tu cometido Sesshoumaru, ahora nada ni nadie te impedirá ser el más poderoso, Se objetivo, se consciente y y se firme al actuar, confío en ti hijo mío y estoy orgullosa de ti—. Sin más la demonesa le regaló un beso en la frente a su hijo y desapareció en una esfera de luz que iluminó todo el lugar, este destello hizo que ambos demonios salieran de aquel lago.

Cuando el peliblanco salió de aquel lugar, notó que su acompañante estaba en el suelo inconsciente; se acercó a ella rodeándola con sus brazos para sentir su pulso y el latir de su corazón, ambos iban a un paso muy lento cosa que generó intriga en el demonio. La cargó delicadamente y se dispuso a regresar a aquel templo donde se encontraba la familia de la joven y su viejo sirviente. Durante el trayecto se dio cuenta que la joven comenzaba a presentar una fiebre alta y su aura no era la misma, constantemente había una lucha entre dos poderosas energías Reiki y... ¿youki?. El joven estaba desconcertado no entendía que era lo que sucedía, ¿por qué energía sagrada se mezclaría con energía demoníaca? ¿Cómo era posible que dos energías pudieran vivir en la misma persona? ¿acaso era eso posible?. Seguía desconcertado y las preguntas se disparaban en su mente, tantas dudas y confusión solo causaban grandes estragos en el joven. 

Cuando el joven aterrizó con la sacerdotisa en manos, el monje y el abuelo los estaban esperando; ambos le indicaron el camino para que llevara a descansar a la joven, ya que su estado actual era claramente impredecible, necesitaban dejarla en un espacio para que ella no pudiera dañar a nadie y sus energías lograran llegar a una armonía deseada. El joven accedió a aquellas órdenes y se dispuso a acomodar a la chica en una cama, pidió quedarse en el lugar para poder contemplar aquellas energías y actuar si era necesario, necesitaba tener la certeza de que la joven mujer estaría bien.

 El joven pasó largas horas en espera, admirando a la joven que era iluminada por los pequeños destellos que se filtraban por la ventana e iluminaban el rostro de la joven, esta última imagen apaciguó a la bestia interna del gran demonio, dejándolo en completa calma y tranquilidad que lo llevaron a caer rendido y quedarse dormido junto a la joven.

Out of timeWhere stories live. Discover now