𝗔𝘁𝘁𝗮𝗰𝗸 𝗢𝗻 𝗧𝗶𝘁𝗮𝗻 | 𝗢𝗻𝗲 𝘀𝗵𝗼𝘁𝘀

Bertholdt

Las clases ya habían terminado cuando sonó la campana de la escuela. Recogiste tus cosas en tus brazos y agarraste tu bolso. Te detuviste a mirar por la ventana para ver el agua cayendo libremente. Estaba lloviendo, y no tenías paraguas contigo.

Dejaste escapar un suspiro y fuiste a tu casillero. Dejaste tus cosas adentro y te quedaste mirando por un momento. Te preguntabas cómo llegarias a casa. Sin paraguas, estarías mojada y podrías enfermarte.

"¿Estás bien?" Te volviste para ver a tu amiga, Mizuki, hablando contigo.

"Olvidé mi paraguas." Tu dices.

"Yo también olvidé el mío." Ella dice.

"¿Qué vamos a hacer ahora?"  preguntas.

"Voy a buscar a alguien que esté dispuesto a compartir conmigo". Ella dice y se despide con la mano.

La sigues y empiezas a preguntarles a tus amigos si están dispuestos a compartir. Pero sin suerte, la mayoría de ellos ya están en tres para compartir el paraguas. Gimes de frustración, solo quieres irte a casa.

Sin ninguna opción, agarraste tu bolso y esperaste afuera de la entrada de la escuela. La lluvia no se detendrá pronto. Colocaste tu bolso sobre tu cabeza y corriste.

'Solo voy a correr bajo la lluvia'

Te detuviste en un cobertizo de espera cercano. Miraste hacia atrás, solo te habías alejado 100 metros de la escuela. Es imposible llegar a casa sin estar tan empapada.

Continuó corriendo de todos modos. ¿Qué podría ser peor? Resbalaste debido al suelo húmedo y resbaladizo. Aterrizas con un ruido sordo y tu bolsa esparce los materiales en el interior. Murmuraste maldiciones en voz baja mientras las recogiste.

Bueno, ¿a quién le importa mantenerse seco? ¡Ya estás tan mojada! Frunces las cejas y gritas de frustración. Caminabas de un lado a otro y abrías los brazos para mirar las nubes. Solo entonces, te diste cuenta ...

Te encantaba la lluvia. Y bailaste.

'Solo voy a bailar a pesar del dolor'

Por primera vez hoy, en realidad sonreiste. No era falso, era genuino. Volviste a agarrar tus cosas y regresaste a casa en silencio.

En un momento de tu caminata, se detuvo para mirar una tienda. Vendían croissants recién hechos y chocolate caliente. Querías entrar, pero no tenías dinero en ese momento.

Espera, ¿dejó de llover? Te volviste para mirar frente a ti para ver que la lluvia seguía cayendo pero ya no te mojabas. Te volviste y tu mirada se posó en un hombre alto.

Era Bertholdt.

Y tu corazón se aceleró por primera vez cuando te sonrió.

Solo quiero sentir ese ritmo, sentir ese tambor. Deja que mi corazón lata más fuerte. Deja que mi corazón hable más fuerte que mi cabeza.

Le devolviste la sonrisa. Te invitó a llevarte a casa para que no te mojes. Era todo un caballero.

¡No podrías estar tan feliz! De camino a casa, bailaste bajo la lluvia con él. Terminaste mojándote y riendo bajo el clima.

Estabas contenta porque Bertholdt estaba contigo y estabas contenta porque encontraste a alguien que realmente amaba la lluvia tanto como tú.