𝗔𝘁𝘁𝗮𝗰𝗸 𝗢𝗻 𝗧𝗶𝘁𝗮𝗻 | 𝗢𝗻𝗲 𝘀𝗵𝗼𝘁𝘀

Armin

Fue el segundo día de unirse a 104. Te sentabas a la mesa en los comedores solo. Eras demasiado tímida para hablar con alguien o incluso para hacer amigos. En la mesa de enfrente se sentaba un chico de cabello castaño y ojos turquesas y junto a él se sentaban ojos azul océano, con cabello rubio y al otro lado, una chica de cabello negro con una bufanda roja. Estabas confundida sobre si debías hablar con ellos o no, pero tu timidez había ganado esta ronda. Simplemente comiste en silencio y los observaste.

Cada vez que tomabas un bocado, echabas un vistazo a su mesa. Desearías tener amigos también, ya que todos parecen tener amigos aquí excepto tú. Profundamente en sus pensamientos, no te diste cuenta del hecho de que el chico de cabello rubio parece estar mirándote.

"¿Armin? ¿Estás bien?" La morena le pregunta al chico rubio. Los miraste.

"S-sí, estoy bien, Eren." El responde.

Al terminar su comida, te levantaste de su mesa y colocaste la bandeja junto al fregadero. Ahora caminabas hacia los dormitorios de las chicas cuando una mano te agarró la muñeca.

"U-umm hola. ¿Hay algo que quieras?" Tartamudeas y te volviste para ver al chico moreno, llamado Eren de antes y detrás de él estaba el rubio, llamado Armin que parece que quiere encogerse.

"Soy Eren. ¿Tú quien eres?" Él pide.

"Soy (t / n)". Dices, me alegro de no tartamudear.

"Encantada de conocerte." Te da una sonrisa genuina.

"Encantado de conocerte también, E-Eren." Tu dices.

"Por cierto, también tengo a alguien para que conozcas." Empuja a Armin frente a ti. Un leve rosado le cubrió las mejillas. Su cuerpo temblaba un poco.

"Yo-yo-yo soy A-Armin." Dice y de repente te sonrojas.

"H-hola, yo-soy (t / n)". Tartamudea mucho.

Por el rabillo del ojo, ves a Eren sonriendo.

"Tengo que volver con Mikasa. ¡Diviértete!" Eren grita corriendo.

Ustedes dos se quedaron en silencio, con las palmas de las manos sudando, ruborizándose. Miradas desviadas, ninguna emitiendo un solo sonido de comunicación. El silencio no llegaba a ninguna parte, hasta que Armin tuvo el valor de romperlo.

"¿P-te gustaría pasar el rato en algún momento?" Dice, los ojos finalmente se encuentran con los tuyos.

"S-seguro. Me encantaría ." Intentaste sonreír, pero terminó siendo forzado de manera incómoda. Tu corazón latía tan rápido que pensaste que ibas a morir.

Mientras tanto, en el comedor donde estaban sentados Mikasa y Eren, ella sacó el tema de ti y Armin.

"¿Cómo te fue con Armin?" Ella pregunta.

"Eran tímidos y tartamudeaban mucho. De todos modos, mi plan funcionó". Eren dice con confianza.