𝗔𝘁𝘁𝗮𝗰𝗸 𝗢𝗻 𝗧𝗶𝘁𝗮𝗻 | 𝗢𝗻𝗲 𝘀𝗵𝗼𝘁𝘀

Marco

Hoy era tu día libre de la escuela y, aunque normalmente habrías pasado el fin de semana en casa de Marco, todo lo que querías hacer era quedarte en la cama.

El sol que entraba por la ventana te hizo darte cuenta de que olvidaste cerrar las cortinas la noche anterior, lo que no ayudaba a tu necesidad de dormir. Mirando la hora en tu mesita de noche, eran las 9 am. Gemiste de frustración ante la luz brillante y te cubriste la cara con la manta hasta que tu teléfono vibró. Al buscar su teléfono, viste que era un mensaje de texto de tu novio, Marco.

De: Marco <3

Buenos días bebe

Si bien le habrías respondido con algún tipo de entusiasmo, ni siquiera tenías la energía para hacerlo. Estabas un tipo diferente de cansado hoy.

Para: Marco <3

Oye

Después cerraste los ojos en un intento de seguir durmiendo, pero tu teléfono vibró de nuevo.

De: Marco <3

¿Oye? ¿Estás bien? No es propio de ti responder así.

puaj

Para: Marco <3

Estoy bien. solo estoy cansado.

Que mentira

De: Marco <3

Está bien ... bueno, ¿vienes hoy?

Lo pensaste durante unos minutos. Si bien hubieras querido estar con él, hoy fue solo uno de tus muchos días bajos que estabas tratando de esconder de él.

Para: Marco <3

Hoy no, lo siento.

Tirando su teléfono a un lado, se levantó solo para usar el baño mientras se miraba en el espejo. Tu cabello estaba desordenado y enredado, tu piel pálida como siempre. Tenía bolsas debajo de los ojos y tenía la expresión más indiferente de todas. Suspirando y luego regresando a su habitación, cerró las cortinas y volvió a la cama para dormir. Ni siquiera prestaste atención al mensaje de texto que recibiste en tu teléfono.

De: Marco <3

Algo no va bien. Voy a tu casa .

¿Bebé?

¿Estas allí?

Te quedaste dormido un rato ...

Algún tiempo después

Te despertaste con el sonido de un golpe en la puerta e hizo todo lo posible por ignorarlo cubriéndose la cabeza con la almohada. Quienquiera que estuviera llamando, fue bastante persistente. Gruñendo de frustración, te levantste y te dirigiste hacia la puerta solo para casi tropezar con un libro en el suelo.

"¡Joder!", Dijiste mientras masajeabas tu pie donde fue golpeado. Miraste a tu alrededor y notaste el desorden que tenías pero no tenías ganas de limpiarlo. Cuando llegaste a la puerta, preguntaste quién estaba allí.

"¿Quién es y qué quieres?"

Maldita sea, eso sonó bastante duro

La voz que escuchaste al otro lado era bastante familiar.

"Uh nena, soy yo Marco. ¿No recibiste mi mensaje de texto?

¿¿Qué esta haciendo él aquí?? Que texto Ah, mierda, probablemente me envió un mensaje de texto de nuevo después de dormir.