Luces en la ciudad

El Peso sobre tus hombros

Que caluroso son los días de verano, la sensación pegajosa en mi cuerpo me hace pensar en la última vez que nuestros caminos se encontraron, creo que era un día como este con el cielo despejado y el sonido bulliciosos de las cigarras cantando en algún lugar, estábamos desorientados ¿No? Tal vez era el calor o que acabábamos de graduarnos de la preparatoria, no podía creer que estos tres años en tu compañía llegarían a su final de forma tan repentina sentía un nudo en la garganta y trataba de ser fuerte con todo lo que tenía. Nisiquiera podía llevarme a la boca esa paleta de chocolate que se estaba derritiendo y ensuciando la manga de mi uniforme.

Recuerdo que me sostuviste la mano en aquellos últimos callejones, estábamos sudando y no era muy agradable, pero no me importo.

"Voy a presumirle a todos que era tu compañero en la preparatoria"

Dije mientras balanceaba nuestras manos enfrente y atrás tratando de calmarme un poco, tu no dijiste nada en ese momento pero me parecio que apretaste mi mano un poco más en ese momento pensé en todas las cosas que no quería, en cómo te irías lejos y estarias demasiado ocupado para cualquier cosa, trago saliva sonriendo un poco para darme ánimos.

"Y a los más cercanos les diré que eras mi crush"

Dije mientras reia, esa había Sido una confección muy estúpida ¿Por qué tenía que decirlo justo ahora? En nuestro último día de escuela, en nuestro último camino juntos y después de haber salido por más de medio año.

Un "lo se" salió de tus labios, busco tu mirada pero tus ojos están clavados al frente en unas calles nuestros caminos se separaran por lo que me detengo haciendo que tu mismo lo hagas a los pocos minutos soltando mi mano. Nos observamos, miro tu chaqueta no queda ni un solo botón en ella, la mía está casi intacta. Sonrió un poco mientras arranco uno de ellos con todas mis fuerzas casi descosiendo la tela.

Cuando estoy apunto de mover mi mano hacia ti siento tus dedos alrededor de mi puño. Oh que miraba más profunda tienes siento que me traga lentamente y mis dedos se quedan petrificados no soy capaz de entregarte este botón y es tan frustrante.

El sol está sobre nuestras cabezas, las cigarras cantan y siento como si mi corazón se detuviera cuando tú boca se apodera de la mía, tus labios siempre fueron tan carnosos y suaves, suspiro cerrando los ojos a la par que me dejó llevar por la sensación que me invade y una lágrima creo que sale de mis ojos.

"Wakatoshi-kun"

Que cursi es decir el nombre del otro despues de un beso, extiendo mis brazos hacia ti rodeando tu cuello pese a lo pegajoso que estamos.

Pero es la última vez.

"Gracias por todo estos últimos años, nunca creí que podría ser tan feliz, gracias por dejarme jugar contigo y por... Por darme una oportunidad"

Siento tus manos en mi espalda, es como si me arrullaras, cierro los ojos un momento esperando que me digas algo, alargando cada segundo todo lo que puedo, tus manos han detenido sus caricias y siento que me falta el aire, debo apartarme ahora pero me aferró a tu uniforme mordiendome el labio.

"Debería"

No quiero escuchar.

"Sabes... ¿Por qué no... Vamos a un motel?"

No te veo a la cara mientras sigo aferrandome a ti.

"Quiero... Ser tu primera vez"