Lacrimosa

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Sentía que Danse macabre ya no quedaba con la historia así que le daré este nombre al que espero sea el último capítulo, lo siento se está alargando de más de lo planeado

Que frenético era todo eso, un completo toberllino de sensación desenfrenadas que los arrastraba a ambos sin tiempo a pensar seriamente sus acciones con la certeza de que no importaba en lo más mínimo que hicieran el resultado no iba a cambiar, Wakatoshi no lo amaba pero había algo en el candor del pelirojo que le empujaba a besarle como si la vida se le fuera en ello era lo mismo para Satori que se regocijaba en el control que tenía sobre los bruscos besos y las fieras caricias que se dedicaban ahora como si estuvieran dopados de algún modo, los dos acordaron que no era más que sus  instintos controlado su accionar.

Ahora con el delgado cuerpo del omega entre sus piernas, besandole el cuello de forma lenta mientras que sus pijamas estaban esparcidas por alguna esquina de la habitación mientras aquellos dedos delgados y finos pasaban por los cabellos cortos causando de vez en cuando un escalofrío agradable en el cuerpo del alfa.

- debemos levantarnos- dije deteniendo la boca del pelirojo que delineaba su mandíbula y soltó una suave risa.
- ¿Es hoy?- pregunto con fingida ignorancia encogiéndose más en su posición deslizando los dedos por su cuello hasta sus hombros- realmente es increíble que lo hayan hecho en tan poco tiempo
- ya estaba casi todo preparado- dijo el peliverde sintiendo el aliento cálido del pelirojo en su pecho
- cierto... Oikawa debería estar aquí- dijo estirándose un poco para alejarse de su lado gateando hasta su lado de la cama en busca de sus pantuflas siendo sujetado por la cadera para ir a sentarse de nuevo a su lugar, causando una suave risa mientras recargaba su espalda contra su pecho- hueles a celo
- no estoy en celo
- lo se... Pero hueles rico-dijo el pelirojo frotandose contra el con cierto descaro, liberando feromonas, aquellas que usaba para atraer a betas a una noche de desenfreno de unas horas, un aroma dulce a chocolatado lleno las fosas nasales del menor haciendo que le abrazara con más fuerza atrayendo su cuello hasta su boca para dar una mordida suave, delineando la marca rosada que estaba impresa en su cuello de alabastro- Auch...

Sabía que aquella queja no era real, lo sabía por aquel sentimientos cálido en su pecho que el de cabellos verdes que a decir verdad no sabía si era causado por la alegría del pelirojo o por el vínculo que le hacia sentir esa alegría. Finalmente le dejo apartarse corriendo al pequeño baño que tenían en la habitación donde se limpiaria la evidencia de lo hecho la noche anterior: Debían ir a la recidencia Ushijima para que el pelirojo se cambiaría y de ahí seria la ceremonia para finalmente ir a la recepción por la tarde, todo un espectáculo decían los programas de chismes que el pelirojo escuchaba mientras se encargaba de su nuevo territorio: la cocina había sustituido el diminuto baño. Había escuchado del doctor que la mala alimentación del pelirojo pudo haber sido causada por un ataque de histeria que era mejor tenerlo contento hasta que terminara la gestación, por eso le había pedido al cocinero que le dejara ayudar para mantenerlo entretenido mientras el entrenaba, un poco de normalidad para el dinámico omega.

A Tendou no le molestaba particularmente la atención especial que estaba obteniendo, no iba negar que sin su celo podia disfrutar como siempre del sexo, que los mimos de la ama de llaves por su bebé le eran agradables y la consideración de todos los presentes le llenaba de confianza, tanta como para hablar por teléfono a sus anchas en el sillón de la sala.
Era todo eso una bonita ilusión que se rompería en cuanto se le recordó en casa de la sra. Ushijima que era un omega y como tal debía callar, obedecer y abrir las piernas recalcando que debía tener una niña alfa o le harían la vida tan miserable, todo ello con ese marcado tono de alfa que despejaron el camino de nubes por el que hasta ese momento había transitado.

Luces en la ciudadWhere stories live. Discover now