Nocturno op 9 n°1

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Es hora de escribir a otra pareja, hoy toca una que me llama mucho la atención:
MatsuHana
Espero que les agrade.

Probablemente haga otras historias con este mismo "universo"

Aclaraciones, en la historia todos tienen tres años más.
Los nombres de las escuelas serán distritos.

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Las luces de colores dibujaban siluetas obsenas desde el primer instante, el sonido de la música retumbaba en cada centímetro de mi cabeza y el aroma del alcohol junto al humo del cigarro viciaba terriblemente el aire haciendome toser de vez en cuando. Un bostezo escapó de mi boca mientras daba pequeños golpes en la barra con el cigarrillo electrónico, por más que odie el olor no puedo dejar de fumar incluso cuando me dieron esto parece que solo aumenta mi ansiedad, llevo el aparato a mis labios dándole una calada antes de soltar la nube al rostro de un extraño que miraba el espectáculo casi en trance, sonreí un poco por aquello era bueno saber que en ese momento era invisible.

- pronto será tu turno de subir- dijo Watari, nuestro bartender apenas haciéndose escuchar sobre aquella música estridente, afirme con la cabeza antes de bajar del taburete, no había dejado de mirarme seguramente estaba preocupado por qué yo me paseara por las mesas siendo un Omega, entre por una de las puertas de servicio mirando la sala de empleados que aún que no era muy amplia resultaba bastante acogedora, un bostezo se escapó de mis labios mientras abría la puerta oculta que llevaba a los camerinos lugar donde nadie podría ingresar al menos que tuviera un pase las escaleras apenas visibles por la luz negra me guiaron hasta los vestidores dónde los demás omegas iban de un lado para otro vistiendo o maquillándose, tenía unos seis minutos como máximo para arreglarme, me senté frente al espejo que tenía mi nombre no era de los que usaban maquillaje excesivo por lo que solo tomo el labial rojo y un poco de sombra mientras caminaba hacia el biombo con su ropa.

- Dios Maki apenas te estás cambiando- dijo Oikawa mientras se quitaba los tacones azules y ponía su botella de agua aún lado
- no los podías entretener un poco mas- dije mientras me quitaba el abrigo y la ropa interior para ponerme aquel ajustas traje de cuero- ayúdame con el corse

Dije mientras escuchaba como se adelantaba sonriendo un poco mientras me colocaba los guantes y medio me ponía las botas altas.

- ya está date prisa no quiero que pase lo de la otra vez y tengamos que llamar a la policía- dijo mientras me alejaba hacía la jaula, suspirando apenas con los ojos cerrados mientras me sostenía del tubo enmedio la plataforma comenzaba a ascender.

Salir después de Oikawa era estresante, las cosas podrían salir muy mal por eso habían puesto esta jaula, los barrotes por lo menos nos protegerían de sus manos pero, siempre tenía la sensación de que se podrían romper en cualquier momento. Como aquella noche donde Yahaba entro en celo y aquellos dementes se abalanzaron contra la jaula, la policía tuve que intervenir y aún que el evento solo duró media hora, fue un infierno para nosotros afuera que no sabíamos si quiera si el menor estaba bien y para el que le habían dislocado una pierna al intentar jalarlo, hasta el día de hoy tenía que tomar calmantes para subir al escenario.
Negué con la cabeza tratando de alejar esos pensamientos de mi mente, me sentía bien no tenía síntomas de celo, y pese a mi retraso y que no era tan hermoso como Oikawa seguia siendo un Omega decente, baile lentamente al ritmo de la música llendo en contra de las advertencias de Oikawa acercándome demasiado a los barrotes mientras los silbidos llenaban el aire, no podía ver bien por el humo que me picaba los ojos, me quite el guante mientras me sujetaba del tuvo solamente con mis piernas botandolo fuera de la jaula y riendo cuando aquellos alfas y betas se peleaban para obtenerlo para terminar esos malditamente agotadores minutos bese y lami lentamente el tubo de metal causando un grito eufórico del otro lado a la par que la jaula bajaba. Tome una toalla húmeda para limpiar el metal mientras le daba ánimos a Yahaba quien sonrio no muy animado.

Luces en la ciudadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora