Brownie [ChanBaek]✔️

26

A todos les parecía extraño e increíble que en pocos días tenían de vuelta al grinch. Nuevamente Baekhyun estaba aislado de todos, ni con Yeeun mantenía una conversación demasiado larga.

Estaba cayendo de nuevo al hoyo del que Chanyeol lo había sacado. Las ojeras comenzaban a notarse, las arrugas que tenía de tanto fruncir el ceño antes estaban volviendo a aparecer.

Y por supuesto, de nuevo dormía en clase.

—Despierta, es hora de la clase de deportes. —Yeeun golpeó su espalda para despertarlo. —Es obligatoria tu presencia.

Baekhyun se tomó su tiempo para levantarse, sacó de su mochila su uniforme deportivo. Fue el último en llegar al gimnasio, pero aún encontró a sus compañeros en los vestidores.

Los siguió hasta donde estaba la maestra, poco después comenzaron con el calentamiento.

A la mitad de este fue con la maestra, ya estaba cansado y ni siquiera habían empezado bien con la clase.

—Maestra soy un discapacitado visual, sin mis lentes no veo con claridad y si corro con ellos podría tropezar, caerme y romperlos.

—Sin pretextos Byun, te hace falta ejercitarte más.

—Profesora, ayudaré a mis compañeros a estirarse, pero no me ponga a correr. Por favor.

—Diez vueltas extra, apresúrate.

No siguió replicando, sabía que si lo hacía conseguiría más vueltas. Se unió a sus compañeros que corrían, era el último hasta que alguien alentó sus pasos para llegar a su lado, Yeeun.

—Corre bola de grasa.

—Oye

—El ejercicio mejorará tu humor.

—¿Qué quieres?

—Nada, solo decirte que puedo ser tu compañera en los estiramientos, te animaré para que logres hacer las cien abdominales.

—Cuando termine de dar la segunda vuelta un misterioso y repentino dolor estomacal llegará a mi y me salvará de hacer más. Busca a alguien más.

—No insistiré. —Dijo antes de comenzar a trotar más rápido y dejarlo atrás.

Hizo su actuación cuando creyó que era el momento adecuado, se dobló de dolor y esperó a que fueran a verlo. Para su sorpresa, nadie se acercó al instante ni se preocupó demasiado pronto, la maestra desde su lugar le preguntó gritando qué le ocurría.

—Sin actuaciones, está es la clase de deportes no de teatro. Apresúrate Byun.

No le quedó de otra más que continuar.

—Más rápido bola de grasa.

—No... Soy una... Bola de grasa... —Se detuvo, necesitaba descansar por un minuto. —Tengo mejor cuerpo que tu, mi cintura es pequeña.

—Ya cállate Byun. Vas retrasado, si esto fuera una competencia seríamos los últimos.

—Cállate tu Yeeun.

—Ustedes dos, silencio o darán diez vueltas más. —Les gritó la maestra.

A unos metros de ellos estaba Chanyeol, intentaba ignorarlos pero hablaban demasiado alto, casi a gritos. Ya no se sentía triste, ahora era la furia quien no lo dejaba.

Le estaba guardando rencor a Baekhyun por haberlo tratado de esa manera, así que se había prometido no volverle a rogar ni esperar nada de él, Chanyeol estaba seguro que Baekhyun volvería en algún momento y por supuesto lo recibiría feliz, pero no al instante.

. . .

Sentía el cuerpo molido, no tenía ganas de caminar, así que decidió esperar el autobús.

Se unió al grupo de estudiantes que iban a la misma dirección, esperaba ser de los primeros en subir o de lo contrario iba a caminar, no planeaba esperar el siguiente transporte.

Disimuladamente se colocó en la orilla de la acera, se preparaba para saltar apenas tuviera al autobús enfrente.

Baekhyun hubiera sido el primero en subir y hubiera obtenido un lugar para sentarse de no ser porque alguien sujetó su mochila.

—Chanyeol déjame en paz. —Dijo por inercia. Cuando volteó vio a Seoji sorprendida, apartó la vista de ella y a unos metros vio al mencionado.

—Lo siento. —Dijo la chica. No espero una respuesta y subió al autobús.

Sin ella en medio, Baekhyun quedó frente a Chanyeol. Se miraron por unos segundos, luego el más alto comenzó a caminar hacia él, bueno, hacia al autobús. Baek se apresuró a hacerlo también, casi subieron al mismo tiempo.

Para su mala suerte, ya no había lugares para sentarse, se aferro a uno de los tubos y espero a que el vehículo arrancara. Sintió que todo empeoraba cuando Chanyeol se colocó a su lado.

"Sólo unas cuantas paradas, no pasaré mucho tiempo aquí", se decía Baekhyun.

El autobús se siguió llenando en la siguiente parada, como un cliché, Chanyeol quedó lo suficientemente cerca de Baekhyun para "robarle su oxígeno", como el bajito pensaba.

Chanyeol disfrutó la cercanía hasta que Baekhyun bajó, en ningún momento se dirigieron la palabra ni compartieron miradas (aparte de que era difícil). Sólo lo vio bajar y sujetar su mochila con fuerza para comenzar a caminar.

Baekhyun sintió que recuperaba el aire cuando estuvo abajo, había sido bastante incómodo ese corto viaje. De haberlo sabido, se habría aguantado el cansancio y hubiera caminado.

Cierto, estaba cansado. Se había olvidado de ese detalle por completo.

—Jamás volverás a tomar el autobús de esa parada Baekhyun. —Grito y pateó un cesto de basura que se atravesó en su camino.