Infiltrado || Joerick

Capítulo 7

Erick

Estando allí, enfrente de tanta gente juzgando me di cuenta de que eso lamentablemente se basa mi vida.

¿Realmente es bueno estar en la cima para ser el centro de atención y que todos te traten mal por simplemente serlo?

Mientras mejor te vaya en la vida, más mierda te van a tirar.

Cuando de las luces comienzan a parpadear todos aquellos pensamientos parecen desvanecerse por unos segundos, y lo único que puedo pensar es en una sola cosa.

Debo escapar.

Corro con aquel papeleo entre manos, procurando de que el mismo no se caiga.

Por más que en el hotel tengan mi firma también, es necesario cuidar esto.

A fin de cuentas, nunca está demás tener una copia.

Cuando estoy bajando las escaleras del lugar, es cuando miro hacia atrás unos segundos.

Johann es el primero en aparecer, y ello provoca que mi corazón se acelere aún más.

Continuo bajando mientras observo algún lugar hacia el cuál ir.

Creo que esto ya no tiene sentido por un momento, pero para mi buena suerte, algo sucede.

Una moto se interpone en mi camino, y noto como la persona detrás del casco no demora en hablar.

—¿Vienes? Creo que tienes problemas —Expresa.

Es el chico del baño.

No demoro en subirme a la motocicleta, y con la adrenalina y todo lo demás, no me da tiempo de procesar lo que hago.

Solo encontré una posible salida y la utilicé.

Miro a Johann y cómo el mismo parece realmente enfadado bajando las escaleras.

Es en ese momento en el cual me doy cuenta que Zabdiel no es el más peligroso de todos.

Por su mirada, por un par de segundos, noto que es una persona realmente impulsiva en algunas situaciones, y siento que si me atrapara, no dudaría en matarme.

El chico motociclista acelera con velocidad y debo agarrarme de su chaqueta para no caerme hacia atrás.

Por unos milisegundos no pienso en el hecho de que no traigo casco, aunque cuando ya nos encontramos afuera del lugar, me percato de aquello.

Mi corazón late con fuerza mientras proceso todo lo malo que podría lograr en esta situación.

Un accidente provocaría que el chico motociclista se lesione, pero gracias al casco su cráneo podría ser salvado.

Sin embargo para mí...

Trato de decirle que frene, aunque sé que no me hará caso.

Además, frenar significaría ceder contra las personas que podrían seguirnos en un momento.

Noto como el chico agarra una ruta que casi nadie nunca usa.

Sin embargo, no digo absolutamente nada mientras nos movemos por un sendero con pocas luces.

Nos movemos a gran velocidad por las calles hasta llegar hacia el motel donde con Joel siempre nos quedamos.

Alzo el ceño por ello.

—¿Creerías que te llevaría a otro lugar? —Inquiere, riendo un poco.

El chico se quita el casco y veo su rostro.