Capitulo 12.- Más cerca.

834 87 22
                                    

Parecía ser que el mal tiempo estaba por retirarse. El sol estaba cada vez más poderoso en las mañanas y cada vez tenía que ponerme menos ropa encima lo que ahora con una barriga mucho más pronunciada era una gran noticia. Algo que al parecer este día el clima había olvidado por completo porque amaneció con nubes horrendas que cubrían el cielo de un gris y blanco amenazante de una lluvia torrencial. No es que me sorprendiera demasiado viviendo en Seattle pero ya me estaba acostumbrando a los días cálidos.

Suspiré mientras quitaba la toalla de mi cabello para comenzar a secarlo. Por primera vez en mucho tiempo saldría de esta habitación completamente arreglada sin tener que disculparme por aparecer en la cocina en pijama. Mi excusa es que pumpkin es demasiado insistente cuando se trata de tomar desayuno, ahora sin embargo no parecía haber despertado aún así que me lo tomé con calma.

-Hola, ¿trabajas temprano?.- Preguntó Bucky desde la puerta de mi habitación con su corbata en la mano.

-Si, llegaré antes para limpiar los ventanales.

-¿Crees que debes hacer tanto esfuerzo?.- Preguntó Bucky y moví mis manos restándole importancia.

-No es difícil ni debo subirme sobre nada, no te preocupes.

-Vale, no me preocupo.- Dijo eso y luego estiró su corbata sin nudo hacía mi.

-Gracias pero ya completé mi ouffit y la corbata no combina.- El rodó los ojos ante mi comentario y reí dejando el secador sobre el escritorio para recibir su corbata.- ¿Cómo es que no sabes?.

-Solo me pongo corbata en ciertas ocasiones, nunca aprendí a hacerles el nudo y normalmente Ben está aquí.- Dijo rápidamente y asentí mientras comenzaba mi trabajo de fabricar un buen nudo de corbata. Así como le gustaban tanto a Pietro.

-¿Ben no está?.

-Su hermana acaba de tener un bebé y su cuñado se rompió una pierna en la escalera del hospital así que, me pidió un par de días para ayudarlos mientras su madre llega de Corea.

-Increíble.

-Ellos no son de Corea.- Aclaró ante mi rostro de confusión.

-No, la verdad es que nunca pensé en una familia de Ben.

-Si Maximoff, no son parte de la casa. Tienen vida allá afuera.

Esta vez yo rodé los ojos y le golpee la espalda con su misma corbata antes de apuntarle la cama. Se sentó mientras aún reía de su chiste.

-Bien, está listo pero intenta no desarmarlo la próxima vez.- Me acerqué y comencé a acomodar al corbata en el cuello de su camisa mientras él parecía bastante atento a mis expresiones porque solamente podía sentir su mirada sobre mi rostro. Me dediqué a ordenar de forma perfecta su camisa y puede ser que me haya demorado más del tiempo necesario pero la verdad es que su olor era fascinante. Sin mencionar que tenerlo en frente era una droga para mi que no podía explicar.

De seguro eran las hormonas.

-¿Cómo me veo?.-Preguntó antes de que pudiera alejarme demasiado de su rostro. Su aliento a menta me pegó en la mejilla y tragué saliva para controlar mi respiración.

-Bien...tú te ves muy bien.

-También tú.- Dijo sonriendo. Ningún ser podría ser tan adorable y sensual. ¿Cómo era posible que me topara justamente con el que tenía ese poder?.

-Quieres besarme.- Soltó entonces. Hubiera reaccionado de otra forma de ser otro momento o quizás fue la forma en que lo dijo lo que evitó que me avergonzara demasiado. Aún estábamos a pocos centímetros de distancia. Yo de pie y el sentado en la cama con su rostro ligeramente hacia arriba para poder verme bien, podía ver cómo se esforzaba para no tocar ninguna parte de mi cuerpo sin que yo diera una señal primero.

Embarazada A SueldoWhere stories live. Discover now