🌱CAPÍTULO 16🌱

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No podía creer que la persona que me había estado observando aquel día, había sido Damián.

No podía creerlo.

Aquella vez que habían venido a la casa a cenar, a la hora de irse si vi que él entraba por ahí, fue por eso que fui con tanta seguridad de encontrarlo y no equivocarme.

No se porque mi cerebro no se concentro en eso y no unió esos puntos aquella noche.

¿Damián me estaba observando aquella noche?

Sí.

¿Había alguna razón?

Probablemente.

¿Se la iba a preguntar?

Absolutamente no.

Seguía molesta con él y ya no estaba segura de que si era por lo del hospital o porque, solo sabía que estaba molesta.

Más bien, creo que era su actitud de creerse mejor y superior a los demás, la que aún no terminaba de agradarme.

Y algo que empeoraba mi estado de ánimo era que tenía que soportarlo todos los días por quien sabe cuánto solo por un capricho que Ana tenía con que fuera amable con él y socializar con alguien que no fuera mis amigos.

Después de regresar de casa de Damián, me aseguré de cerrar mi ventana con seguro y poner las cortinas para que nada se pudiera traspasar y llegara a su vista. No iba a cometer el mismo error que las otras veces.

Había sido demasiado descuidada al dejar mis cortinas abiertas todas estas semanas. Pensar en qué me pudo estar observando cuando me salía de bañar, cuando me cambiaba cada noche antes de dormir o cuando hacia cosas que solo se hacían en la privacidad de su alcoba, me revolvía el estómago de incomodidad y vergüenza.

No sabía si Damián frecuentaba el espiarme, o solo había sido solo un accidente o casualidad, aunque tampoco iba a preguntárselo. No fue como que al decirlo él hubiera negado algo o hubiera intentado darme una explicación, su única excusa fue que necesitaba cortinas más gruesas. Eso me daba mucho que pensar.

Saber que él me espió aquella tarde mientras me cambiaba, tenía una sensación extraña en mi. Me hizo pensar en demasiadas cosas, pero intenté reprimirlas porque tal vez estaban muy fuera de lo usual. El punto era que había una parte de mi que quería saber cuantas veces más lo había hecho, o si lo volvió a hacer en todo este tiempo. Debía dejar de ser tan despistada, sino, estas cosas seguirían pasando.

El Recuerdo De Los Dos Amores Más Grandes De Mi Vida [1.0]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora