Together | Paulo Dybala

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–¿Podemos hablar?– le pregunto a Paulo por llamada

–¿Pasó algo?– responde de manera desinteresada.

–¿No podías esperar un poco más para anunciar que terminamos? me hubieras dicho por lo menos lo que ibas a hacer, así lo hablabamos los dos.

–Agustina, ya fue, si igual ya no estamos juntos...– lo interrumpo.

–Pero no es la manera Paulo, se supone que la relación era de los dos, podrías haberlo hablado conmigo– suspiro.

–¿Y que querías que lo hablemos y después sigamos como si nada hubiera pasado? vos fuiste la que terminó con todo.

–No iba a seguir estando en una relación sabiendo de que vos estabas con otra, y me refiero a que podríamos haber hecho la publicación los dos, no solo vos– me saco las zapatillas y me siento sobre la cama.

–¿Y hasta cuando querías esperar? si todo terminó hace casi dos semanas, se iban a enterar de todas formas.

–Quería esperar por lo menos hasta saber si estoy embarazada o no– le respondo sobresaltada y me quedó callada cuando soy consciente de lo que acabo de decir.

–Espera, ¿Que dijiste?– me llevo la mano a la cara frustrada.

–Lo que escuchaste Paulo– miro el techo de la habitación.

–¿Vos estás embarazada?– este es el momento en el que me dan ganas de pegarle.

–No sé, me estuve sintiendo mal los últimos días y tengo un atraso de dos semanas– me acuesto sobre la cama–.Mañana tengo que ir para que me hagan la prueba de sangre.

No se escucha nada del otro lado, miro el celular para ver si cortó, pero la llamada sigue en curso.

–Paulo, contesta dios, yo también tengo miedo– hablo desesperada y se me llenan los ojos de lágrimas al no recibir respuesta–. No me dejes en esto sola por favor.

–No sé que decir, ¿podemos hablar después? tengo cosas que hacer– antes de que pueda llegar a decir algo, corta la llamada.

No aguanto más y me derrumbo por segunda vez en el día, llamo a Sofi que está en el piso de abajo porque tengo miedo a que vuelva a pasar lo del otro día y estar sola.

A los minutos abro la puerta y ella me abraza, nos quedamos así, sin decir nada hasta que logro calmarme.