Amor de Agentes

Capítulo 19

Era de mañana, pero Santana no se preocupó por la hora ya que al remover a su equipo del caso no tenía que ir a trabajar. Con un bostezo se bajó de su auto y abrió las puertas de la casa de sus padres, al abrir la puerta vio a su madre desayunando en el comedor, quien al escuchar que abrian puso cara de enojada.
Santana ni siquiera terminó de entrar a la casa que su mamá empezó a retarla.

—¡Miren quién decidió aparecer!— gritó levantándose se su asiento— ¡¿Se puede saber dónde te habías metido Santana Marie López Fields?!

—Mamá— sonrió sarcástica cerrando la puerta— También me alegro de verte.

—Santana no seas sarcástica con tu madre— la retó Alfonso.

La latina miró al comedor completo y vio que estaban desayunando sus padres junto a Noah, pero ninguno había tocado su café.

—No lo soy papá— suspiró y caminó hacía las escaleras.

—¡Santana dame una respuesta!— gritó Maribel— ¡No podes desaparecer así! ¡Pensé que ya había quedado atrás la época que desaparecias por una mujer nueva!— la latina gruño y entró al comedor.

—¿Ahora me estás juzgando?— preguntó— ¡Por favor! ¡Estaba soltera! hacía lo que quería y ya estoy bastante mayorcita para que me digas con quien puedo acostarme y con quién no.

—Hace de tu vida sexual lo que te plazca, no me interesa, pense que al volver Britt esto iba a cambiar— suspiró— ¡Solo decime cuando no venís a dormir a tu casa!

—Mamá— suspiró cansada— Primero te voy a decir que esa época nunca existió, nunca fui una mujeriega... a veces si, pero fue durante un tiempo y nunca volvió a pasar— se agarró el puerte de la nariz por el estrés— Segundo, el que haya vuelto Britt es problema mío, no te entrometas por favor.

—Santana....

—Y tercero. Dormí en mi departamento con Brittany, y si no te avisé es ¡Porque tengo veintiséis años y soy una agente del FBI! me sé cuidar bastante bien Maribel. Y si no supiera, Britt es una maldita agente también.

—Tu madre solo quiere cuidarte Santana— habló su padre y cayó en la cuenta que su hermano no despegaba la vista del café—¿Así que volviste con britt?— preguntó sonriendo— ¿A que viniste Tana? siempre que dormis allá vas directo a trabajar.

—No papá, no volvimos, es una amiga y yo necesitaba su compañía— suspiró— Por un tiempo no trabajo— respondió— No corre la misma suerte para vos, López— miró a su hermano de mala forma— Luego de acomodarme voy a llamar al idiota de Will para que te transfiera a la maldita Antártida si es posible.

—¿Qué está pasando?— preguntó Alfonso— ¿Que pasó?

—Nada— respondió Santana sin dejar de mirar a Noah— Voy a buscar mis cosas.

—¿Tus cosas?— preguntó Maribel.

—Me mudo mamá, me voy a mi departamento de forma definitiva— siguió mirando a su hermano con odio y luego volteó a ver a su madre quien estaba con cara de aterrada.

—¿Qué?— preguntó confundida— San esta es tu casa... no sé que habrá pasado con Noah, pero no te podes mudar así porque sí.

—No tengo quince años— dijo sonriendo— Me voy y la decisión está tomada— caminó hacía las escaleras— Agradezcanle a Noah— se escuchó como su hermano suspiraba.

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—Schuester— habló Santana cuándo atendieron.