Amor de Agentes

Capitulo 35

La semana pasó rápido. Santana había empezado a trabajar como directora ganándose los aplausos de todos sus compañeros y cómo Hanna y Emily, no formaban parte del FBI oficialmente todavía no sabían la noticia ya que no iban a la oficina, y la latina estaba esperando que firmen sus contratos para hacerlo.

Por parte de Britt, ella fue a la CIA a hablar para explicar lo de su embarazo y que claramente no iba a poder trabajar en el campo en un tiempo, pero que ahora hasta que pudiera lo haría... claro que eso no se lo contó a la latina.

Y la relación de las Brittana crecía cada día más. La rubia ya estaba viviendo en el departamento de la morena. Un día de la semana ya habían ido a comprar para empezar a decorar lo que sería la habitación del bebé... Santana no daba más de embobada cada vez que veía a Britt y se daba cuenta que su sueño de toda la vida se iba a volver realidad, formar una familia con la rubia.

Santana había terminado una reunión con el matrimonio, ahora estaba en la oficina hablando con Rachel, y a su vez revisando los últimos detalles del contrato de las chicas.

—Berry, tu equipo es uno de los mejores que tenemos en esta oficina— dijo dejando los contratos a un lado y apoyándose en el escritorio— Y también confío en vos, necesito un favor.

—¿Favor o orden?— preguntó sonriendo.

—Favor, nadie puede enterarse, más que vos y tu equipo... y te recomendaría que uses a Danielle Lovato, es realmente buena.

—¿A quien queres que busque?

—David Martinez, es el padre de Emily. Ex agente, corrupto. Lo último que Fields supo mientras lo investigaba es que estaba en Chile o Argentina.

—¿Supongo que Emily no sabe que me pedis esto, no?

—No, y te pediría que no le digas a tus agentes quien es la persona a quien buscan, así sólo lo sabes vos... y bueno, Quinn— Rachel iba a contestar pero llamaron a la puerta.

—Adelante— respondió Santana recostándose en su silla y sonriéndoles de forma arrogante, mientras que Rachel se retiraba.

—Gracias señ... ¿Que haces acá?— preguntó riendo Emily.

—¿Donde está figgins? ¿Cómo estás en la oficina del dir...— estaba hablando Hanna cuando cayó en la cuenta— ¡No!— dijo sorprendida con una sonrisa en su rostro y Santana asintió— ¿En serio? ¡Felicitaciones!— fue hasta dónde estaba la latina y la abrazó.

—Hola, perdón que interrumpa— habló Em riendo— Pero no entiendo nada.

—¡Santana es la nueva directora!— dijo Hanna emocionada revolviéndole el pelo.

—¡¿Que?!— dijo sorprendida y con los ojos llenos de lágrimas— ¿En serio?— dijo caminando hacia donde estaba Santana.

—Si agente— dijo guiñándole un ojo a su hermana y esta la abrazó.

—Felicitaciones mi chiquita— dijo emocionada mientras la abrazaba— Estoy muy muy muy orgullosa de vos, te lo mereces— dijo separándose y dándole un beso en la frente— Estoy segura que vas a ser la mejor directora del país.

—Gracias Em— contestó con la voz cargada de emoción por lo que le dijo su hermana— Gracias Hanna. Y ahora como soy su jefa, siéntense— las dos mujeres le hicieron caso y ella siguió hablando— Muy bien, acá tienen sus contratos— se los deslizo por la mesa— Está todo chequeado por mi, pero pueden verlo. Van a ser unas de las mejores remuneradas de la agencia de Nueva York.

—¿Y eso?— preguntó Hanna.

—Tienen treinta y dos, por ende experiencia. Además de que vienen de la CIA. No muchos vienen de ahí hacia el FBI— explicó— Y eran de las mejores de esa agencia.